CAPITULO 28 LA FIESTA

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FAN ART SUBIDO POR ROSSY CASTAÑEDA EN PRINTERST CREDITOS  A SU AUTOR

CAPITULO 28 LA FIESTA

Los recién estrenados esposos bailaban alegremente un vals, sus amigos y familiares esperaban a que terminaran su primera pieza para también bailar con ellos, la alegría de los niños que aplaudían al ritmo de la música en la que resaltaban seis lindas damas con vaporosos vestidos quienes habían abierto el paso de la novia cuando hizo su entrada, arrojando pétalos de rosas en la alfombra que pisaba. Luego se tomaron las fotos inmortalizando la belleza de la novia y la gallardía del novio, la felicidad de los amigos e invitados más cercanos, luego las felicitaciones del caso. Concluido aquello, Albert tomó la palabra y con una copa en la mano realizó el brindis:

Cómo todos los presentes saben, soy William Albert Aldrey el padre de Candy y hoy tengo el honor de dirigirme a ustedes para agradecer su presencia en esta reunión tan especial, acabo de entregar a mi preciosa hija al amor de su vida. Puedo decir que conozco a ambos desde hace muchos años y tengo la certeza de que son el uno para el otro, almas gemelas que han superado muchos obstáculos para celebrar su amor hoy aquí y compartir su felicidad con nosotros. Ustedes dos chicos rebeldes, se merecen toda la felicidad del mundo, por su tenacidad, perseverancia y amor a prueba de todo, del tiempo, la distancia y las dificultades. Me enorgullece ser testigo y parte de su historia, deseándoles muchos años de prosperidad, alegría y amor. Ahora todos por favor, levanten su copa y únanse a mi brindis. Por Candy y Terry, por su eterno amor, ¡Salud! ¡Felicidades!

Todos los invitados brindaron felices por la pareja, los conocían muy bien, un par de jóvenes de buen corazón, llenos de virtudes que habían sufrido el dolor de una separación injusta, por años y sin embargo su amor se había mantenido incólume.

Cuando llegó La tía abuela su sorpresa fue tan grande que quedó con la boca abierta, no podía creer lo que veía, si había sido testigo de aquel bochornoso acontecimiento en la iglesia del Santo Nombre ¿Cómo podían estar celebrando?

Elroy- ¿pero que pasa aquí? Albert ¿Qué están celebrando después de lo que pasó?

Albert-¿Cómo que celebramos? El matrimonio de Candy por supuesto.

Elroy- Pero si el matrimonio no se celebró, fue arruinado por una mujer que dijo haber sido engañada por el novio.

El rubio comprobó entonces que habían sido correctas las averiguaciones y sospechas del padre de Terry, sin ningún remordimiento por el escándalo Eliza Lagan había llevado a cabo su infausto plan.

Albert-Tía ¿escuchaste los nombres de los novios? me temo que fue un error. Candy se casó aquí.

Elroy-¿Error? Por cierto tu no estabas vestido así y tenías barba, ni Candy, ella tenía otro vestido.

Albert- Tía ese matrimonio no fue el de Candy. Sabíamos que habían planeado algo con esa mujer, para que mintiera, está claro, fue pagada para que hiciera ese escándalo. Déjame bailar con Candy y después te explicaré todo en mi despacho.

En ese mismo instante en que Albert y la tía abuela Elroy  conversaban los hermanos del infierno asombrados no lo podían creer, habían ido a Lakewood para burlarse y disfrutar de la vergüenza y sufrimiento de Candy; sin embargo habían encontrado lo contrario, una fiesta.

Neal- No puede ser ¿Por qué están celebrando? Su boda acaba de ser arruinada.

Eliza- ¡No puede ser! no puede ser yo misma la vi llorando. ¿Qué hace aquí bailando y feliz?
¡Maldita huerfana! Ella no puede ganar, No, no, no.

Neal- Vámonos Eliza, no quiero ver como celebra ésta gente.

Eliza- No, no, todavía podemos hacer algo.

Recuerdos y esperanzasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora