Capítulo 48 Los secretos salen a la luz

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Patricia y Terence salieron de la Torre cada uno pensando en sus preocupaciones por los acontecimientos, había sido una sorpresa muy grande para ella el enterarse de su amado Stair estuvo casado y tuvo una familia mientras que ella lo guardó en su corazón y no se permitió mirar con ojos de verdadero compromiso, es cierto que nadie le había tan ni siquiera gustado lo suficiente para pensar en algo un poco más serio como un compromiso formal, pero Stair , había formado una familia, en su defensa podía decir que estaba desmemoriado que no la recordaba, que lo engañaron pero en el fondo su corazón tenía celos. Otra mujer había compartido su lecho, había sido su esposa y le había dado hijos, oportunidad que no se dio ella porque sentía que lo traicionaba a pensar de creer que estaba muerto.

Por su parte Terry pensaba:

Y ahora que le digo a Candy, lo primero que hará será preguntarme cómo me fue y si el preso  es americano, de que parte es, a quién se parece, si creo que es culpable , etc, etc y he prometido no mentirle ni ocultarle cosas, pero me preocupa su reacción, como decirle resulta que ese pobre hombre que está siendo acusado por espionaje y con la soga al cuello es tu querido Stair. Por más que se apure Albert en llegar a Inglaterra demorará por lo menos una semana y el resto no que se diga, me va a preguntar, tengo miedo que se le complique el embarazo. ¿Qué hago como se lo digo? ella lo querrá ver.

-Estás pensando como decírselo a Candy ¿verdad?

-No se que haré, esto puede impresionarla

-A mi también me preguntará , debemos ponernos de acuerdo. ¿Y si le decimos que no lo vimos, que estaba enfermo , con gripe o algo?

-He prometido no mentirle nunca ¿Cómo ocultarle algo tan importante? Ella me conoce tanto, se daría cuenta. Solo me queda disfrazarme de ogro para que no me pregunte mucho.

-Finge jaqueca, tal vez resulte.

-Tu tampoco te salvarás de sus preguntas. Habrá que decirle la verdad

_Conociéndola lo querrá ir a ver inmediatamente.

-Tendré que confiar en su fuerza y conversar con mi padre sobre sacarlo de ahi lo más pronto posible. Dios no quiera que se emocione tanto como para hacerle daño.

Mientras tanto el Duque de Granchester mandó a su secretario ubicar a William A. Ardley,  pero no lo pudo lograr puesto que al vivir en Brasil eran   7 horas de diferencia, no lo ubicarían de madrugada aunque bien valdría la pena por la importancia del asunto. Después de algunos intentos y dejar en claro quién lo llamaba recibió en respuesta una llamada de Georges Villers:_ Buenas noches su excelencia Dique Granchester, he sido informado de que está tratando de comunicarse con el Sr. Ardley, pero lamentablemente está en un lugar un poco alejado, en cuanto sea posible le informaré de su llamada ¿ Nació el bebé de la señora Granchester? ¿ todo está bien?
_ No señor Villers aun no ha nacido.
_ ¿ Todo está bien ? Se ha presentado algún problema.
_ Si, es decir .....no, en realidad es un milagro.
_ ¿Un milagro? Disculpe pero no entiendo.
_ Señor Villers hemos encontrado a Alistair Cornwell en una prisión inglesa pero tiene amnesia.
_ Pero..... ¿ está ud. Seguro? En nuestras investigaciones el avión del joven Alistair y según muchos testigos de su escuadrón,  se estrelló y se quemó.
_ Es cierto eso pasó pero de alguna manera logró salvarse. Es una larga historia, pero es urgente que el Sr. Ardley venga y lo más pronto posible, lo acusan de asesinato, de impostor y espía,  lo podrían condenar a muerte.
_ Su excelencia ya hemos conocido personas que han pretendido engañarnos ¿ Cómo puede estar tan seguro?
_ No lo importunaría a esta hora si no lo estará. Terence y Patricia O Brian lo reconocieron.
_ Entonces....... es él.  Mañana me contactar con el Sr Ardley y estaremos viajando a Londres lo antes posible.
_ ¿Podria venir el sr Archibald Cornwell también? Creemos que lo reconocerá. Es muy largo de contar.
_ No es necesario que me de mayores explicaciones, confío en su criterio pleno.
Después de colgar el teléfono Georges quedó pensando en las consecuencias del hecho si es que fuese verdad, debía comunicarse con Albert con urgencia pensaba:
_ Este acontecimiento sería una gran felicidad, solo espero que el corazon de la señora  Elroy lo soporte, Albert está esperando que mejore su salud pero eso es muy difícil por su avanzada edad. Hay demasiadas cosas que está ocultando, no lo podré cubrir siempre.
Al día siguiente Georges fue a buscar a Albert en una villa en Sao Paulo en donde el rubio tenía una familia escondida de sus parientes,  pero especialmente de la tía abuela Elroy.
Albert estaba casado con una joven brasilera de clase media que había conocido casualmente cuando casi atropella con su auto a la joven mujer que se arrojó a salvar a un cachorro que cruzó intempestivamente la calle.
_ Albert bajó de auto asustado por haber lastimado de alguna forma a otro ser vivo. La joven sólo tenía un feo raspón en la rodilla pero nada más.  En cuanto sus ojos verdes se toparon con los ojos celestes de Albert ocurrió un flash.
Ambos fueron flechazos.
La joven era una joven de hermosas curvas, cuerpo contorneado, alta, esbelta, de cintura pequeña, con la piel bronceada era tan diferente a las mujeres de la familia o a aquellas que la señora Elroy le había querido enseñar por ser de alcurnia o " de buena familia ".
_ Disculpa señorita ¿ Esta Ud. bien?
_ Auch me golpee un poco la rodilla,  pero estoy bien. Salvé a este pequeño que no pudo ver a tiempo.
_ Lo siento, es cierto no lo vi. Por favor déjeme ayudarla.
_ Ay , ay me duele un poquito.
_ Esta sangrando,  tiene un raspón muy feo. Suba al auto la llevaré a un hospital.
_ No,  no es necesario, además debo poner a este cachorro a salvo.
_ No se preocupe,  yo me encargaré de eso, necesita atención.
_ Sólo es un raspón, además debo cambiarme y lavarme  tengo una entrevista de trabajo y debo llegar a tiempo.
_ Por favor permitamos llevarla a su casa a que se cambie, no deseamos que pierda usted esa oportunidad por mi culpa.
_ Pero.....
_ No le aceptaré una negativa,  me siento comprometido por lo que pasó.
_ Esta bien, le aceptaré que me lleve a casa.
_ Gracias,  es lo menos que puedo hacer por Ud.

Recuerdos y esperanzasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora