23. El lago

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Maraton 5/?

Después de jugar yo nunca nunca Cole le pidió a los chicos que prendieran el carbón del asador para que él pudiera comenzar a preparar la comida, lo se, es sorprendente como si es bueno en algo muy complicado, y eso que esta borracho.

Cuando ya empezaba a oler a comida pusimos una mesa al centro de los asientos para comer. Cole había preparado carne asada con cebollin y espárragos envueltos en tocino. Todo estaba buenisimo, en especial los espárragos ya que nunca me han gustado y Liam me obligó a probar los que hizo Cole y no me arrepiento.

Después de comer esperamos unos minutos platicando mientras nos llevaban a una parte del lago donde se podía nadar.

Al llegar era un sitio donde se reúnen más barcos pero esta vez éramos sólo nosotros. El conductor amarró el barco a una boya y nos dijo que ya nos podíamos meter.

El primero en entrar fue Peter de un chapuzón mientras tenía a Ela en brazos. Después fue Cole, Hannah, Dani, Maddison y Jacob. Brooklyn decidió quedarse en el barco porque estaba en su periodo y no traía lo necesario para meterse al agua. Solo faltamos Liam y yo por meternos al agua.

—¿Quien primero?— me pregunta Liam

—Tu

—¿Y por qué yo?— pregunta ofendido

—Porque no me he quitado el vestido— le respondo señalando mi vestido con mis manos

—Ese no va a ser un problema— dice Liam con una sonrisa de lado

—¿Que planeas?— lo interrogó con los brazos cruzados

—Levanta los brazos

—No— respondo juguetona

—Hazlo o esto va a acabar muy mal— dice y da un paso hacia mi

—No te tengo miedo

—Deberías

—¿Y eso por que?— pregunto inocentemente

—Por que no me importaría tomar mi venganza aquí mismo en frente de todos— responde arrogante

—No te creo— digo y doy un paso hacia atrás que hizo que todo se arruinara porque ahora estaba demasiado cerca de la orilla

—¿Ah no? Lo probare— dice y se acerca más hacia a mi y lo único que me queda hacer es agarrar un vaso de agua que estaba en un posavasos y lanzarlo a la cara para despistarlo y salir corriendo de ahí —¡Ronnie!

—¡En tu cara príncipe arrogante!

En menos de dos segundos él ya estaba persiguiéndome por todo el barco mientras todavía le caían algunas gotas en la frente del vaso de agua que le avente

Ahora peor, en otros dos segundos el ya me estaba cargando como costal de papas hacia la orilla para aventarme al lago.

—¡No! ¡Liam, bájame!— le grito a carcajadas

—Solo si te rindes

—¡NUNCA!— le grito con todas mis fuerzas pataleando e intentando zafarme de su agarre

—Entonces tristemente se te mojara el vestido y se te pegara entero a tu cuerpo. Aunque pensándolo bien, no sería mala idea— dice dando pasos más grandes para lanzarme contra el agua

—¡Ok, ok! Me rindo— suspiro y él se detiene en seco para ponerme en el piso

—Lo sabía, ahora, levanta los brazos— me ordena y yo obedezco con una cara enojada aunque por dentro me estoy muriendo de risa. Levantó los brazos y él me saca el vestido por arriba —Buena chica— dice y me da un beso en la mejilla después de poner mi vestido en uno de los asientos

Lo que haga faltaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora