Yo nunca, nunca [TERMINADO] [en edición]

Capítulo 10.

Cassie Walker, en aprietos.

— ¿Es acaso una tradición familiar encerrar chicas en habitaciones? — miro con desdén a Tom.

— Ashton siempre me ha admirado, por eso me imita nena — responde con su peculiar tono arrogante — Que puedo decir, tengo mucha más experiencia que él y se más cosas. Cosas que podrían interesarte.

— Ajá, ¿y yo cuándo solicité esa información tan valiosa?

— En el momento en que te atreviste a mirarme de esa manera — aclara apuntando mis ojos.

— No te miro de ninguna manera pedazo de engreído, no me interesas en lo más mínimo.

Se acerca acortando la distancia entre nosotros, el ambiente se siente tenso y yo me estremezco al sentir su respiración pesada sobre mi cara. Apoya sus manos contra la puerta en la que estoy apoyada — Tu cuerpo dice otra cosa nena.

— ¿Nena?, realmente me preocupa los programas que vieron cuando eran chiquitos — volteo los ojos, paso por debajo de su brazo y me siento sobre el escritorio de la habitación.

Tom se ríe, apoya su espalda en la pared cruzando sus brazos, mirándome con atención.

— ¿Eres guapísimo?, sí lo eres. — me apresuro en agregar — ¿Me interesas?, claro que no. ¿Eres un buen hermano?, de ninguna manera. Eres terrible.

— Já — bufa, dando un paso hacia adelante para alcanzar una silla y sentarse frente a mí. — Tú no te mereces un niñito como Ashton, tienes carácter, eres hermosa y él solo es eso... un niño.

— Y tú eres un idiota egocéntrico que cree que todo el mundo debe estar siempre a sus pies.

Entrecierra los ojos, y con una mano acaricia su barbilla en modo pensativo. — Tal vez lo soy Cassie, pero aun así crees que soy guapísimo, ¿no?

Volteo los ojos y lo miro con indignación — Thomas, tienes novia y yo salgo con tu hermano. — Tom enarca una ceja y me mira confundido, como si ninguna de esas razones fuera válida — No serías capaz de hacer algo así, es tu hermano. — insisto en hacerle entender que la posibilidad de que algo pase entre nosotros desde un punto moral, es aberrante. No dice nada y esta vez me incomoda ver como repasa mi cuerpo con sus intensos ojos azules. — Él jamás te haría algo así.

Y por fin obtengo una reacción, que sinceramente lo que menos me da es tranquilidad. Thomas Dawson se echa a reír. — Ni siquiera lo conoces niña buena. Ashton es capaz de hacer muchas cosas, créeme.

— Obviamente y yo también, quizás crees que soy — finjo dudar — ¿Una niña buena? — me río del comentario — Tú no me conoces a mí, si crees que soy una niñita indefensa que el pobre Ashton se está aprovechando, estás muy equivocado.

Tom me mira sorprendido y no dice nada.

— Imagino que Ash debe tener su pasado y tal vez se acostó con tu noviecita, que triste tu caso don egocéntrico. Pero me da igual, es su pasado, yo tengo el mío y no soy quien para juzgar nada.

Se para con rapidez quedando entre mis piernas, agarra el escritorio con sus manos, dejándolas pegadas a mis piernas, me mira con seriedad, dejándome atónita ante su presencia, su boca esta cerca de la mía y él no deja de mirarla.

— ¿Te crees muy lista?

Trago con fuerza e intento seguir pareciendo valiente, aunque debo admitir que Tom me intimida muchísimo. — Lo soy — afirmo.

— Te deseo Cassie.

Mis piernas vacilan ante tal confesión y se sienten como gelatinas, mi corazón azota mi pecho. Trato de mantener la compostura. Empujo con mi palma el torso de Tom. — No estoy interesada Thomas, pero me siento halagada. — bajo del escritorio y me dirijo hasta la puerta por la que entré. — Ve a ser un idiota egocéntrico a otro lado y destruye la relación de alguien más.