CAPÍTULO 11:

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Pasaron algunos dias y llegó el fin de semana. Era una tarde soleada de sábado y Sarah estaba aburrida, sin hacer nada, tumbada en la cama. De repente, le sonó el móvil. Había recibido un mensaje:

"¡Sarah!", decía el mensaje. Era Derek.

"¿!Qué pasa!? :0", preguntó ella alarmada.

"He llevado a Dallas al parque Northewick. Lo estaba vigilando para que no se me perdiera pero... miré el movil un momento y... ¡ya no estaba! Porfavor, ¿puedes ayudarme a buscarlo? ;)", contestó Derek.

Ella rió y contestó:

"¡Allá voooy!"

Dejó el móvil en la mesilla de noche y fue a prepararse. En pocos minutos ya estaba lista.

-¡Adiós, papá! ¡Adiós, mamá!-se despidió.

-¡Adiós, cariño!-le respondieron sus padres casi al unísono justo antes de que Sarah cerrara la puerta.

El parque Northewick estaba a dos manzana al norte de su casa. Fue a paso rápido. Al llegar, vió a Derek de pie.

-¡Al fin! ¡Ultrawoman ha llegado!-exclamó Derek.-si llega a ser por tu gran puntualidad, Dallas llegaria a casa solo.

Sarah río:

-Por cierto, pensé que lo habías traído de verdad.

-No, pero...-dijo él, alargando la "e".- lo que sí que he traído ha sido dinero... para ir a dar una vuelta, tu y yo solos. ¿Te hace?

Sarah iba a contestar pero Derek la interrumpió:

-Eh, no se admite un no por respuesta.-le dijo, guiñando un ojo.

-Mmm... con esa condición, creo que no me va a quedar mas remedio que decir que si.-le dijo ella con un gran sonrisa.

No era la primera vez que Derek y Sarah habían quedado en los últimos dias, por lo tanto, ya tenían bastante confianza.

-¿A donde quiere usted ir, señorita Brooklyn?

-Mmm... no estoy segura...-dudó Sarah. Tenía hambre, eran las 14h-¿Qué tal Burger King en Kellmorg Shopping Centre? Está aquí al lado.

-De acuerdo, vámonos.

Fueron raudos y veloces hasta Kellmorg Shopping Centre, entre risas y algunos "golpecitos tontos".

Llegaron a Kellmorg y fueron directo a Burger King.

- Una doble Cheesburger con extra de queso.-pidió Derek.

- Una Whopper, porfavor.-pidió Sarah.

-Una Doble Cheesburger con extra de queso y una Whopper... muy bien, serán 15'95.

Sarah sacó un billete de 20.

-No lo acepte, es falso.-el dependiente se quedo con cara de tonto y Sarah con cara de incredulidad.- Coja el mio, es auténtico. Mírelo a contraluz.

En realidad, los dos eran verdaderos, pero Derek no quería que ella pagara.

Al final, el dependiente cogió el billete de Derek y le dio el cambio.

-Esperen un momento, porfavor. Les traeremos la comida ipsofactus.

El dependiente marchó a buscar la comida.

-¡Eres tonto!-le dijo Sarah riéndose, mientras le daba un suave golpe en el hombro derecho.

-¿Crees que iba a dejar que pagaras?-le dijo Derek, levantando una ceja.

-Pues al final, te has salido con la tuya-dijo Sarah. Él sonrió.-Pero a la próxima pagaré yo.

-¿Estás diciendo que habrá próxima?-le preguntó Derek, pillín.

-Tal vez... -le dijo Sarah.

Sonrieron los dos. La comida llegó y fueron a una mesa cercana a la puerta.

-¡Eh! ¡Devuélveme mi patata!-le dijo Sarah.

-¿Qué patata?dijo Derek, con cara de inocente.

-¡No seas mentiroso, que te he visto!-Sarah rió-¡me has robado una patata!

-¿Ah,si? ¿Qué patata?-dijo Derek mientras se comía la patata que le había quitado a Sarah.

-¡Nooo!-exclamó Sarah, mientras se ponía las manos sobre los ojos-Lloro. Te vas a enterar.

Con un movimiento hábil, Sarah le cogió una patata y se la comió.

-Ya estamos en paz-dijo ella, sonriendo con los labios cerrados.

-¡Joder! Si hubieras sido así de rápida para llegar a Northewick, Dallas estaría con nosotros.-dijo él riendo, contagiando a Sarah.

Salieron del Burger King y fueron a dar una vuelta por todo el centro comercial. Entraron a muchas tiendas, Sarah en la mayoria. Cuando estuvieron cansados, se sentaron en el centro de Kellmorg, al borde de una fuente.

-¡Jajajajajajajaja!-se rió Sarah-Qué cabrón eres! -¡Te lo digo en serio! ¡No sé como mierda hizo eso! Y yo: WTF?

Derek abrazaba a Sarah, cogiéndole del hombro.

Hubo un momento de silencio.

-Sarah...-le dijo Derek

-¿Qué pasa?-le preguntó ella.

Se miraron, hubo unos eternos segundos de silencio y...

Derek se lanzó. Sus labios rozaron los de Sarah, en un beso que transmitía todo lo que él sentía. Pero ella no respondió. Sentía una presión extraña detras suyo, una mirada clavada a sus espaldas. Le apartó. Sus labios se separaron bruscamente

-¿Que pasa?-dijo él, algo impresionado por el empujón.

-Lo siento, pero... no siento lo mismo, no siento los mismos sentimientos hacia ti que tu tienes por mi.

Él se quedó callado, mirandola con sus ojos verdes.

-Y no quiero, de ninguna manera, darte falsas ilusiones ni esperanzas. Ni mucho menos hacerte ver lo que no es.

-Lo siento, Sarah. No quería que esto acabara así.- Hasta ahora, Derek había dejado ver su parte más alegre, pero ahora se reflejaba su parte mas triste y melancólica-y no quiero darte pena, lástima, ni mucho menos.

-Podemos ser... solo amigos.-Derek la miró y asintió debilmente.

-Bueno, yo...-Derek estaba pasando una situación muy incómoda, al igual que Sarah.- tengo que irme.

-Vale, adiós...

-Adiós.

Derek marchó lentamente y Sarah se quedó sentada, delante de la fuente, cabizbaja. Nunca se pensó que esa cita acabaría así. Ella quería a Derek, pero sólo como un amigo. Ella a quien de verdad queria era... de repente, sintió la misma presión del beso detrás de ella. Se giró, pero no vió a nadie.

-¿Que ha sido eso?-se preguntó Sarah.

Dark LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora