Dark Love

CAPÍTULO 14.

Parte 2:

Sonó la última campana del dia. Sarah recogió y se levantó como pudo; ir con muletas y escayola no es nada fácil. Con la mochila a cuestas y las muletas camino por todo el largo pasillo. Por el pasillo, en contra de ella habían muchos alumnos. Algunos le abrían paso mientras que algunos se chocaban con ella y después pedían disculpas. Entre toda la muchedumbre supo detectar una cara en especial. Dios esa cara no se le olvidaria nunca: Liam. Miró a su lado y estaba... Lauren, la lapa, como no. Sarah pasó lentamente a su lado y la lapa le dedicó una mirada de malicia. Después, se volvió hacia su amado novio y le dedicó una sonrisa inocente.

-¡Hey!-Alguien le tocó el hombro.

Por su lado apareció Kate.

-Hey- la saludó Sarah.

-¿Has visto a la lapa y al otro? Buff... te juro que les daria de ostias.  A la lapa le partiria la cabeza y le quitaria sus preciados tacones, a ver qué es capaz de hacer sin ellos. Y a Liam le dejaría estéril y le aplastaría los coj...-Sarah la miró con cara de "ya, basta", y ella entendió lo que significaba.

-Oops, es verdad. Que tu...-hizo un corazón con las manos- Liam.

-¿Qué? ¡Noooo!-negó Sarah.

-Sarah, amor mio. Puedo hacerme la tonta a veces, pero ten por seguro que soy de todo menos eso. Creo que las demás también se habrán enterado pero tranquila, no saldrá de las cuatro.

Ella asintió.

Llegaron a la salida del colegio.

-¿Qué tienes pensado hacer esta tarde?-le preguntó la morena de labios carnosos.

-Mmm... no sé, a lo mejor salgo a dar una vuelta... o a lo mejor me quedo pudriéndome en casa.-dijo Sarah riéndose.

-¡Jajajaja! Bueno, yo me tengo que ir, que yo si que tengo  plan para esta tarde.-ella le guiño un ojo pícara y Sarah lo captó a la perfección.

-¡Wooooow! ¡Cuenta!

-Bueno, ¡solo datos superficiales ehh!-Sarah asintió.- Se llama Johann y es monísimo, piel castaña y pelo negro, alto y fuerte. Alegre, listo, me hace reír y siempre tiene las respuestas a todo.- ella hablaba ansiosa, gesticulando mucho.-Claro que un bombón como yo se lo merecía.-acabó ella, hechándose el pelo para atrás, fingiendo superioridad, mientras mostraba sus blancos dientes de su amplia sonrisa.

-¡Ojalá todo acabe bien!- le deseó Sarah.

-¡Siiiii!-dijo Kate aplaudiendo rápidamente.- Es que es tan... tan perfecto...-dijo ella hechándose para atrás, fingiendo un desmayo.-Bueno, me voy, que si no la voy a cagar en mi primera cita. ¡Bye!

-¡Bye! ¡Suerte!--se despidió la chica.

Inmediatamente después de la salida de la morena, Sarah se puso en marcha. Tardó un poco en llegar a casa.

Cuando llegó, su comida ya estaba servida.

-Mmm... que rico...-dijo ella, oliendo por encima del plato.

-¿Te gusta?-dijo su madre, mientras Sarah daba una probadita.

-¡Mmmm...! ¡Dios, mama! ¡Te ha salido de perlas!

-Tssss... como todo.-dijo la Sra.Brooklyn mientras se ponia la mano en la cintura.

Ella acabó de comer y se puso en el sofá.

-Bueno, yo me voy a descansar un rato arriba. Cualquier cosa, avísame.-le dijo su madre.

-Ok, mamá.