III Su legado

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Joaquín

Al entrar a la empresa me atendió una señorita muy joven y guapa a decir verdad, ¡Esperen un momento! Creo reconocerla, es Arantza! Ella me dijo que trabajaba en una empresa muy importante, pero nunca me imaginé que fuera aquí. Ella y yo nos conocimos hace años en la primaria, cuando aún vivíamos en México, pero luego de vivir en New York sólo nos comunicábamos por teléfono o video llamada.

-Adelante, sea usted bienvenido a... ¿Joaquín? -Me miró sorprendida.

-¿Arantza? -Ambos nos miramos y finalmente nos dimos un abrazo, la extrañaba demasiado.

-Perdóname, ya sabía que vendrías, pero realmente me sorprende verte de nuevo después de tantos años. Ven, te llevo a la oficina de tu padre, tu mamá ya se encuentra ahí.

-Muchas gracias Arantza, por cierto qué mala eres ¿Por qué no me dijiste que trabajabas aquí? -Nos dirigimos a la antigua oficina de papá.

-En realidad trabajo aquí desde hace tres años, soy la asistente y mano derecha del licenciado Ricardo, pero no te dije nada para darte una sorpresa. -Finalmente llegamos y ya se encontraba mamá ahí. -Bien, los dejo, en un momento le comunicaré al señor Ricardo que han llegado.

-Gracias Arantza, pero ya sabes, aún tenemos una plática pendiente. -La apunté con el dedo y ella me sonrió.

-Muchas gracias hija, ya sabes que cuando gustes puedes ir a la casa, pídele a Joaco que te la de.

-Muchas gracias señora Eli, bueno ahora sí me retiro.

Ella se llevaba bien con mamá, siempre la ha tratado con respeto, aunque mi mamá siempre le dice que puede llamarla solamente Eli, creo que a la única que nunca le ha caído bien es a Renata, pero no entiendo por qué, ella es un amor de persona.

-Bien hijo, hoy se dará lectura a lo que tu padre ha estipulado. Sabes que él siempre fue un hombre precavido y te aseguro que ha tomado la mejor decisión.

-Lo sé mamá, sabes a mí no me importaría empezar como becario en la empresa, incluso sirviendo el café, quiero ganarme un puesto en esta empresa a base de esfuerzo y dedicación, así como siempre lo hizo mi padre.

-Ay mi niño, tú siempre tan noble al igual que él, sabes... cuando papá murió me dejó un gran vacío... pero ahora veo que de alguna manera él sigue vio en ti... eres igual de noble, de atento y cariñoso como lo era él. -Besó mi mejilla.

-Te quiero mucho mami, vas a ver que no lo voy a defraudar.

*TOC, TOC*

-Lamento interrumpirlos, pero el señor Osorio me ha indicado que ya pueden pasar a la sala de juntas para dar lectura a las clausulas estipuladas por el señor Bernardo, que en paz descanse.

-Gracias Ara, enseguida vamos.

Al entrar, estaban ahí presentes Ricardo Osorio, parte del personal de la empresa, Arantza y... aquel chico con quien había tropezado en la mañana por accidente.

-Bien, estando todos presentes daré lectura al testamento del Licenciado Bernardo Bondoni. -Todos asentimos y tomamos asiento.


Yo Bernardo Bondoni, en pleno uso de mis facultades mentales, dejo estipulado en esta carta quien pasará a ser el dueño mayoritario de "BeautyGress" en caso de que algún día llegue a fallecer ya sea por causas naturales o por alguna otra circunstancia.

No Por Compromiso ✔️ (HISTORIA EMILIACO) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora