XI Tu recuerdo

201 17 91
                                    

*Reproduzcan la canción chicos*

Arantza Montemayor

Aquí estoy una vez más, frente a la tumba de mi madre quien falleció hace dos años. Ella tenía cáncer, siempre me sacó adelante sola, el maldito de mi padre pensaba que con verme una vez cada dos meses era más que suficiente cuando lo único que yo deseaba de él era Amor. Nunca entenderé por qué mi madre nunca le guardó odio. Aún puedo recordar las últimas palabras que me dijo antes de partir...

=Flash Back=

—Por favor hija, te lo imploro, perdona a tu padre.

—¿Perdonarlo? Yo no puedo perdonar al maldito que nos abandonó por...

—Tú sabes bien que si nunca estuvo con nosotros fue por mi culpa, fui yo quien...

—Tú nunca me quisiste contar la verdad, ¡Dímela ahora! ¡No te lleves ese secreto a la tumba! ¡Dímelo mamá! ¿Por qué papá la prefirió a ella y no a nosotras? Yo también soy su hija. ¡HABLA MAMÁ! —Me encontraba desesperada, tanto mi madre como yo llorábamos, sentía coraje e impotencia por no poder salvar a mi madre.

—No puedo hija, sufrirías mucho al saber la verdad, sólo debes saber que... tu padre es un buen hombre... él... él...

—¿Un buen hombre? ¡Por Dios mamá! ¡Ni siquiera quiso darme su apellido! ¡Yo lo odio mamá, lo odio! Y tú deberías hacer lo mismo.

—Si nunca te dio su apellido... fue por... porque yo... se lo impedí...Perdónalo hija... perdónalo... te lo imploro...

—¿Por qué mamá? No lo entiendo, yo nunca podré perdonarlo, ¡NUNCA! —Me puse de rodillas ante su cama y empecé a llorar, ella sostuvo mi mano y a los pocos minutos dejó de hacerlo, su mano ahora era fría. —¡MAMÁ, NOOO!¡MARTHA! ¡MAMÁ, NO ME DEJES! ¡DOCTOR, DOCTOR!

—Lo siento señorita... su madre ha muerto...

=Fin del flash Back=

Sé que muchas veces no suelo ser tan buena con los demás, pero no es mi culpa, fue de aquella persona que nunca me quiso, de aquella persona que se decía ser mi padre. A veces pienso que... ¡Si yo no puedo ser feliz... nadie más tiene el derecho de serlo!

—Ya tenemos que irnos amiga, es hora de ir a la empresa.

—Sí, sí, vamos Joaco. Gracias por haberme acompañado a ver a mi madre.

—No agradezcas nada bebé, es lo menos que puedo hacer por ti. A pesar de que nunca tuve la oportunidad de conocer a tu madre, sé que ella debe estar cuidando de ti desde el cielo al igual que lo hace mi padre conmigo, mamá y Renata.

—Joaco ¿Crees que las personas malas van al cielo?

—Bueno... yo creo que no... Aunque, tal vez si se arrepintieron antes de morir, deben estar en el cielo. Yo creo que... Dios les permite estar en el cielo si se arrepienten de corazón ¿Por qué lo preguntas?

—Por nada bebé, por nada, cosas mías. Anda, vamos a la empresa o el ogro de tu suegro se pondrá furioso.

—¡Ay Ara, Ricardo no es mi suegro! Sabes que Emi y yo aún no somos novios.

—Pero pronto lo serás bebé, después de todo me libré de ese cholo baboso que tenía por novio. —Ambos reímos ante mi comentario y nos dirigimos a la empresa.

Emilio

Hoy por fin le pediría formalmente a Joaquín ser mi novio, Azul, Diego, Renata, Alexis y por su puesto mi futura suegrita me estaban ayudando a colocar los globos, tarjetas de colores y otros adornos para Joaquín. Si hoy no fui a trabajar no fue porque estuviera enfermo como le hice pensar a mi padre, fue para preparar esta sorpresa ¡Espero que a mi Bonito le guste!

No Por Compromiso ✔️ (HISTORIA EMILIACO) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora