No Por Compromiso ✔️ (HISTORIA EMILIACO) TERMINADA

VII Odio Amarte

Joaquín

¿Salir a cenar con Emilio? Realmente no sé qué estaba pasando, no es como que no quisiera salir con él, pero esto definitivamente me tomó por sorpresa.

—Por favor Joaquín, es muy importante lo que quiero hablar contigo. Solo tú y yo ¿Sí? Podemos ir esta misma noche.

—¿Por qué no irá Arantza con nosotros?

—Bueno, es de ella precisamente de quien quiero hablar contigo, es algo que... tal vez tú me puedas aconsejar. —Hablaba con nerviosismo.

—¿Yo? No entiendo muy bien de que se trata pero... si te puedo ayudar en algo con gusto.... ¡Ho no, no, espera! Ahora recuerdo que ya había quedado con Ren de ir al cine hoy en la noche... Lo siento Emilio, en verdad, pero podemos vernos otro día.

—Bueno eso lo podemos solucionar ¿Recuerdas a mi amigo Diego?

—Claro ¿Pero qué tiene que ver...? Oye espera no estarás pensando que... —No me caí mal Diego, pero aun así me pone nervioso que salga sola con él.

—La quiere invitar al cine en plan de amigos, te prometo que no van a hacer nada malo, es más, Azul puede ir con ellos, a tu hermana le haría bien tener una amiga.

—Bueno... en eso tienes razón, ella se sintió muy triste al dejar a su amiga Constanza en Nueva York... creo que... la compañía de Azul le hará bien.

—Entonces ya está, ellos van al cine y nosotros podremos charlar en el restaurante de la última vez.

—Espera, mi hermana no ha aceptado ir con ellos al cine.

—Mira le diré a Azul que hable con ella, de todas maneras, paso por ti a las 7 de la noche. En verdad, necesito hablar contigo Joaquín.

—Ok, acepto, acepto. Te espero en mi casa a las 7 para ir al restaurante. —Saqué una hoja para apuntar. —Aquí está la dirección de mi casa y el número de Ren para que Azul le llame. —Él tomo el papel entre sus manos y me dijo "gracias" para luego retirarse de mi oficina.

No les voy a mentir, el salir a cenar con Emilio me hacía mucha ilusión, era como un sueño del cual no quería despertar. Terminé de hacer mis pendientes en la oficina y busqué a mi madre para que comiera conmigo, era la hora de nuestro descanso. Entré a su oficina pero ella ya estaba recogiendo sus cosas.

—Hijo creo que tendrás que ir a comer tú solo, tengo que arreglar unos pendientes con las chicas de maquillaje para el proyecto de "Zara", estaba pensando en Liliana, ella estudió maquillaje y pensaba proponerle trabajar en la empresa, así aprovecho para hablar con ella sobre lo que me comentaste.

—Me parece una idea estupenda mamá, espero que la señora Liliana acepte. Entonces ya no te entretengo más, ve con ella. Te deseo mucha suerte mami. —Besó mi frente y salió de la oficina.

Fui directo a la cooperativa para comprar algo de comer, pero me detuve al ver a Arantza sentada sola en una de las tantas mesitas, parecía un poco triste, así que me acerqué a ella para preguntarle si estaba bien.

—¿Puedo sentarme contigo? —La miré a los ojos, parece que había llorado.

—Claro amigo. —Dijo limpiándose las lágrimas con una servilleta.

—¿Qué tienes Ara? ¿Te sientes mal? —Puse una mano en su mejilla tratando de consolarla.

—No pasa nada... bueno sí... en realidad no sé... estoy muy confundida Joaco.