Nuestra Historia

¿Que pasó?

TUL

De pronto sentí la mano de Max tomar fuertemente la mía y arrastrarme hasta llegar a mi auto.

-¡Tul, ¿Estás loco?!- le escuchaba decir, mi vista no enfocaba muy bien, aún así veía su furia a través de sus ojos. Se veía tan guapo.

Mis ojos difícilmente enfocaban a un sólo Max, de la manera que pude me arriesgué a lanzarme sobre uno de ellos a abrazarlo. Por suerte atiné al verdadero.

-No salgas con nadie más- dije a punto de llorar como un niño -Te amo Max- sentía pena por mí mismo en éste momento por lo patético que seguramente me estoy viendo -No salgas con nadie más- insistí

-¡Estás ebrio!- dijo -Vamos, te llevo a casa-

-¡No~o!- dije en modo de berrinche, como un niño que no quería ser castigado -En mi casa no, tu no estarás en el balcón- dije sosteniendome mas fuerte del cuello de Max y hundiendo mi cabeza en él -Llevame a otro mundo, lejos de casa, lejos de mis padres-

Estaba ebrio, pero mi pecho aún dolía y dolía tanto que me mantenia en la realidad, enseguida comencé a llorar.

-¡Ma~ax...!- dije llorando, casi suplicando

-¿Mmh?- se pregunto Max confundido

-No dejes que otra chica te toque- dije y enseguida le escuché reír

-¡Bien!- dijo riendo -Vámonos de aquí-

En seguida me ayudó a subir al auto, en el asiento del copiloto.

-Te amo Max- le repetía sin parar -Te ves tan guapo hoy-

-Tú eres más guapo que yo- respondió mientras me acomodaba el cinturón de seguridad -Y en esta condición te ves extremadamente adorable, cariño- dijo y en seguida acarició y besó mi frente. Sonreí.

-Te amo- respondí sonriendo

Max cerró la puerta del auto y se dirigió hacia el asiento del conductor, en pocos minutos sentí como el auto ronroneaba poniéndose en marcha.

...

No sé cuánto tiempo ha pasado, abrí los ojos y me encontré en un lugar extraño, nunca antes había estado aquí, de inmediato me senté de golpe al no reconocer el lugar

-Tranquilo- escuché una voz en la habitación, enseguida me giré viendo la silueta de Max sentado sobre un sofa frente a la cama

-¿Dónde estoy?- pregunté nervioso

-Bienvenido a mi hogar- dijo un poco serio

-¿Tu... Hogar?- pregunté viendo a mi alrededor -¿Y... Qué hago aquí?- elevé mi mano para ver el reloj, 12:30 pm -¡Shiit!-

-Creí que no despertarías hoy- dijo Max levantándose de su asiento, camino hacia mi y tomó asiento sobre la cama, frente a mí

-¿Porqué estabas bebiendo?- preguntó, viéndome fijamente a los ojos con su mirada seria

-Yo... - evadía su mirada mientras llevaba mi mano a mi cuello

-De camino hacia acá, mientras dormías mencionaste a mis padres- dijo Max -Dijiste que no querías que los viera...- dijo viéndome confundido

-Estaba dormido, no le tomes importancia- respondí intentando que lo olvidara, pero quien no lo olvidaba era yo.

Max elevó ambas manos y acunó mi rostro entre ellas

-Necesito que me expliques eso- dijo viéndome a los ojos -Tu dijiste eso y luego comenzaste a llorar mientras dormias-

Cerré los ojos para contener mis lágrimas pero poco a poco sentí algunas escabullirse en mis mejillas