Nuestra Historia

Es mi hijo

Tul

Las vacaciones de Max llegaron rápidamente a su fin, Max se levantó muy temprano ésta mañana y, junto con Lyn, se marcharon de vuelta a la escuela, los padres de Max tenían agendada reunión con los representantes legales de la empresa de mi padre así que también salieron temprano el día de hoy, mientras yo, espero pacientemente a que la nueva niñera de Maxi llegue a casa para quedarse con él. La obra está avanzando más pronto de lo que se tenía contemplado así que dentro de una hora tendré reunión en la constructora para presentar los avances de éste bimestre.

[...] Sonó el teléfono de la casa

-¿Hola?- contesté al teléfono

-¡Hola!- respondieron -Soy la niñera de Maxi-

-¡Ah!, Sí... ¿Ya estás afuera?- pregunté

-Ah... Lo siento, mi madre enfermó y tuve que traerla de emergencia al hospital, llamaba para avisar que hoy no podré presentarme a cuidar a Maxi, una disculpa- respondió

-¡¿Qué?!- pregunté sorprendido -Maxi está por despertar y yo tengo una junta importante en menos de una hora...- dije preocupado

-¡Perdón, perdón!, Arq Pakorn- se disculpo -Pero debo cuidar de mi Madre el día de hoy-

-Ah... Está bien- dije suspirando y resignado -Que tu Madre se mejore pronto-

-Gracias- respondió y enseguida terminó la llamada

Suspiré, creo que no puedo faltar a la junta de la constructora, será sólo un par de horas y vuelvo.

-Bien, ¿Que debo llevar?- me pregunté a mí mismo. Entré a la habitación de Maxi, tomé un bolso y le coloqué lo que creí necesario, ropa de cambio, un par de pañales, toallitas húmedas, un biberon, un frasco de papilla y un par de juguetes, los favoritos de Maxi. Justo a tiempo despertó Maxi, en tiempo récord ambos estuvimos listos y de camino hacia la constructora. Me las arreglé para salir con el bolso, mi portafolios, mi porta planos y Maxi en mis brazos.
Al salir del taxi fuí cuidadoso de no olvidar nada, me acomodé todo y entré al edificio de la constructora.

-Buen día, arquitecto Pakorn- saludó la recepcionista

-Buen día- respondí un poco agitado con algunas gotas de sudor en mi frente

-¿Necesita ayuda?- preguntó ella cuándo de pronto mi teléfono comenzó a vibrar. Entre todo el alboroto que hice logré sacar el teléfono de mi bolsillo y contesté

-¿Hola?-

-Tully, ¿Dónde está Maxi?- preguntó preocupada la madre de Max -Hablé a la niñera para preguntar por él pero nadie contestó en casa, la llamé a su teléfono y...- la interrumpí

-Si, está conmigo, Madre, la niñera tuvo un inconveniente así que...- ella interrumpió

-¡¿Que?!, ¿Lo llevaste con Pakorn?- preguntó asombrada -Estare ahí en 2 horas para la junta-

-Esta bien, Madre- respondí -Gracias- enseguida terminé la llamada, me giré a ver y me encontré a la recepcionista con mi portafolios

-Se le cayó, Arquitecto- dijo, extendiéndome el portafolios

-Gracias- respondí sonriendo -Lo siento- tomé mi portafolios y caminé al elevador para subir a mi oficina.
Al llegar a mi piso se abrieron las puertas del elevador, salí y caminé hacia mi oficina, de nuevo sintiendo las miradas de todos a mi alrededor y algunos murmullos.
Entré a mi oficina y la cerré, bajé a Maxi de mis brazos, tirando todo lo que traía cargando.

-¡Ahhh!- expresé suspirando con alivio -Aquí estaremos un momento- dije a Maxi -Se buen niño-

Enseguida comenzó a caminar alrededor de la oficina, averiguando todo lo que había de extraño para él, por mi parte tomé asiento frente a mi escritorio y comencé a dar los últimos detalles para la reunión de hoy.
Entre los ruidos de cosas que Maxi tiraba comencé a armar las carpetas de entrega, llamé a la asistente y en segundos ya estaba ahí, tocando la puerta