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- Cornelio? -preguntó el hombre fueradel auto

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- Cornelio? -preguntó el hombre fuera
del auto. Lú se sobresaltó. Le sonrió a Cornelio, este parecía más bien a gusto con todo esto. Trató de bajarse
de las piernas de él con dificultad. Una vez sentada en el asiento copiloto, Cornelio abrió la puerta.

- Ah.. no es cierto...- dijo con una gran
sonrisa. Bajó del auto y abrazó con
fuerza al hombre que lo acababa de
saludar. - joder estás más grande. - le
dijo. Y sí, ahora tenía dos tatuajes más y había hecho ejercicio.

-Siempre he sido así, imbe.cil. - se
abrazaron. Lú miró desde adentro del auto. - se puede saber que haces aquí?

- Nadie me ha extrañado en Obregón
acaso? - Cornelio río.

- Vale sí, sí...como sea... y..- trató de
observar quién seguía en el auto. -Es
una amiga? - se volvió hacia Cornelio,
brindándole una mirada cómplice.
Cornelio negó con la cabeza mientras reía. Si tan solo supiera que. Lú era
más que eso. Cornelio abrió la puerta de la Camioneta. Lú se volteó a verlo.

- Te quiero presentar a alguien...- le susurró con una bonita sonrisa.
Lú salió del auto de inmediato. Quería ser atenta. Diferente. Cornelio había tenido otras novias? Bueno, ella quería demostrar que podia ser algo más que solo eso. Cornelio la vio rodear la camioneta, dirigiéndose a los tres.

- Ella es Lú...

- Un gusto..- este le cogió la mano,
besándosela.

Vaya. Cornelio era un maestro realmente. Lo admiraba de ciertas maneras. Sabía elegir a las mujeres. Y Lú no era la excepción.

- Mi novia. - aclaró Cornelio. Con una
oleada de celos en su cuerpo. Pequeña, pero la había. - él es Marco un amigo...

- Un gusto también. -le dijo Lú, de pronto sintió los brazos de Cornelio abrazarle la cintura, se volteó a mirarlo.

- Y se quedaran un tiempo aquí? -
preguntó Marco.

- Si, eso planeamos...

- Pensé que no vendrías más.

- Lú quería conocer.. - la volvió a apretar contra su cuerpo, ella le dedicó una sonrisa.

-Si...pero... - Marco sonrió. Incomodo.
- ya sabe... lo último que pasó no fue
muy bueno y..- Cornelio endureció la mandibula. Sintió la mirada de Lú sobre sus ojos. Buscando una respuesta. Una pequeña palabra proveniente de sus labios que le explicara que había pasado. Qué era lo que ella no sabía? Y por qué no lo sabía? Y al ver que no obtendría respuesta de parte de Cornelio, intentó preguntárselo a Marco.

- Qué fue lo que pasó? -le preguntó.

- ¡Cornelio! - un hombre moreno y de estatura media se apareció por detrás. Tenía el cabello con trenzas que ya eran prácticamente rastras, ya hace más de cinco años. - Qué haces aquí niño?

- Niño?- saludó Cornelio. Se volteó para abrazar a Heber. - ¡joder has envejecido!

- No, es el ejercicio...me tiene así... - mostró su bicep derecho. - Wowo...¿y
quién es ella?

- Lú mucho gusto. - saludó ella, estirando la mano.

- No, no.. el gusto es mío bonita... -
estrechó su mano. - no me digas que
este campeón - palmeó el hombro de
Cornelio. - te tiene en sus redes...

- Heber...- murmuró Cornelio, algo
avergonzado. Lú sonrió.

- Nunca escoges mal, eh. - Heber río.

Los años lo habían hecho trizas. O al menos Cornelio lo recordaba diferente. Más vivo. De otra forma. El color de su cabello había cambiado, al igual que su voz y su aspecto.

- Tienes idea si Axel está en casa? -
preguntó Cornelio. - me quedaré unos días en Obregón, pero él tiene las llaves...

- Lo he visto en la mañana. Seguro a de estar foll.ando por ahí...

- Heber. -volvió a decirle Cornelio, esta vez incomodo por Lú. Ella soltó una pequeña risita. - quieres decir que no está ahora?

- No, probablemente no... - negó él.

-Joder... - renegó Cornelio.

-Si viene por aquí le diré que has
venido, ve y da una vuelta por ahí
mientras regresa.. Obregón es muy
grande...

-Si, tiene razón. - le dijo Lú. Con verdaderas ganas de conocer más.
Cornelio observó sus labios. Le provocaba besárselos en ese mismo instante. No se podía creer lo increble que era con él. Lo poco que le importaban sus defectos.
'Oh, vaya'. Las ganas se hicieron más
grandes. Una idea se le vino a la mente.

-Vale.. - dijo, y sonrió al ver que
se contentaba. - iré por ahí y regreso en una hora, si vez a ese imbe.cil por aquí...le dices que he venido y que quiero que se vaya de mi casa, esta bien?...

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Hola chicas. Quiero aclarar que el famoso Axel y pues Raúl, son el Taxmillie que en realidad así se llama y pues Raúl es Antuna su primo de Cornelio. Bueno ya nomas era eso.

S-E-C-R-E-T-O-S ²Donde viven las historias. Descúbrelo ahora