Capítulo 24 (Prepárate para tu sorpresa Evangeline)

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Narra Agatha

-¡Damien por favor regresa!. ¡No me dejes!-grito Damara entre lágrimas y ella cae al suelo y sus lágrimas se hacían presentes. Damien se monta en su coche y se va y yo corro hacia donde Damara.

-Princesa calmate por favor, calmate-dije y ella me abraza y llora sin consuelo.

- Me dejó mamá, me dejó. Me dejó por esa maldita-dijo entre lágrimas y yo solo la consuelo.

- No te preocupes mi vida, deja todo en mis manos. Me encargaré de hacer sufrir a esa chica. Sé arrepentirá de haber nacido. Sino dejo de llamarme Agatha-dije con rabia.

*****

-¡Tenemos que hacer algo!-dije frustrada y Evan sólo me mira.

- Damien no se rendirá, el está dispuesto a todo. Incluso a dejar toda la fortuna por irse con esa tipa. Lo peor fue que la embarazara. No sabes cuanto quisiera que todo esto se acabara pronto-dijo Evan y yo lo miro.

-Cr..creo que tengo un plan. Quien nos puede ayudar es Angelo. El está enamorado de Evangeline. Sí, eso es-dije y Evan me mira.

-Debemos tener un segundo plan-dijo Evan y yo lo miro.

- Tienes razón-dije y Evan se ve pensativo.

-¡Ya lo tengo!-dijo algo emocionado.

-Cuenta-dije y el sonríe.

-Solo necesitamos que firme unas facturas, esas facturas tendrán una cantidad de dinero muy pero muy grande. Mucho más grande que el costo de los materiales. Así la podrás acosar de fraude y irá a la cárcel. Me encargaré de jugar con la mente de Damien. Creo que este plan será más efectivo de el que pensaste-dijo Evan y lo miro con una sonrisa.

- Tienes razón, de eso me encargo yo-dije y ambos reimos sin parar.

*****

-No te preocupes, yo me encargo. Ve tú a descansar-dije y mi compañera me entrega el delantal y me pongo a lavar los platos sucios. Siento unas manos en mi cintura que me hacen abrir los ojos muy grandes.

-S..se..señor-dije muy nerviosa y siento su respiración en mi cuello.

-Shhhh-dijo el y mis lágrimas empiezan a salir. Además de el temblor de el miedo. Sus manos suben mi vestido y acaricia mi piel.

-Po..po..por favor, n..n..no lo haga-dije entre sollozos y el me voltea y me tapa la boca.

-No sabes cuanto quería que llegara este momento. Haz rechazado todos mis obsequios hacia ti. Esos que hago con mucho amor, cariño. Te amo mucho C...-no lo dejo terminar porque le doy una cachetada.

-Usted se está equivocando, está muy equivocado. No soy ese tipo de mujer que usted piensa-dije y el tira de mi cabello hacia atrás.

-¡Escuchame bien, sólo me perteneces a mi!. ¡¿Lo entendiste?!-grito con rabia y le escupo la cara.

-Váyase a la mierda, usted es un maldito loco. Nececita ayuda, yo nunca lo amaré ni seré suya-dije entre dientes y el sonríe como un psicópata.

-¡Ay amor!. La noche es larga, ahora sólo quiero hacerte el amor-dijo él y se acerca y empieza a besar mi cuello con brusquedad y yo empiezo a empujarlo pero su fuerza era mayor. En un movimiento me levanta y me acorrala contra la pared y veo unas tijeras y las agarro. La deslizo por su su mano. Sangre sale y llena toda mi camisa de sangre y el me arrebata las tijeras.

EvangelineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora