CAPÍTULO OCHO

10.2K 1.2K 534
                                    

P

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

P.O.V JENNIE

Ya estaba anocheciendo y seguíamos en el jardín con Tae. Me enseño varios lugares de éste, haciéndome ver que era más enorme de lo que creía.

Entre los muchos arbustos había un camino de piedras que llevaba a lo que parecía un área de descanso. A cada lado del camino había unos hermosos rosales, los cuales continuaban en la estructura enrededandose por sus pilares hasta la parte superior de ésta -imagen multimedia representativa, solo para que entiendan la estructura-. En el medio se encontraba una pequeña mesita de alambre y a cada lado unos cómodos sofás blancos. Si pasabas esto podrías apreciar una pequeña cascada artificial hecha con rocas. Sin duda este lugar parecía mágico.

En ese lugar nos encontrábamos hace más de media hora. Nos habían traído la merienda y yo estaba disfrutando de cada bocado, parecía que llevaba días sin comer. Estar en este rincón del jardín con el sonido del agua cayendo y el pequeño haciendo cada bobería para que ría, disminuía mi miedo a encontrarme en una manada de lobos. Sin embargo, cada vez que una sirvienta se acercaba a nuestro lugar, me ponía en alerta por cualquier movimiento extraño.

- ¿Y cómo es tu casa? - preguntó el pequeño alejando la taza de chocolatada de su boca y ocasionando una risa de mi parte al contemplar como el chocolate se encargó de dejarle un bigote.

- Pues... Vivo en un departamento, en un edificio, lejos de aquí - conteste mientras movía la cuchara en mi taza sin razón alguna. - No es muy grande, incluso el baño de ustedes puede ser del tamaño de toda mi habitación. - Rio por mi comentario y yo lo acompañe. - Sería algo pequeño para ustedes supongo, pero se amoldaba a nuestras necesidades. - Sonreí tristemente al recordar que tal vez nunca vuelva a mi casa.

- ¿Nuestras? - cuestionó.

- Si... - Suspire antes de continuar. - En el mismo lugar vive mi amiga de toda la vida, Jisoo, es prácticamente mi hermana. - Sonreí al recordarla. Espero que se encuentre bien...

- ¿Algún día me llevaras a conocer tu casa y a tu amiga? - preguntó con un brillo en sus ojos. Sonreí ladeadamente sabiendo que eso no sería posible. Tal vez el niño no tenga problemas con nuestra naturaleza, sin embargo, Jisoo no se la pensaría dos veces antes de asesinar a Tae. Un escalofrió me recorrió por completo ante ese pensamiento.

- Claro Tae. algún día te llevare a mi casa - mentí con una sonrisa de labios cerrados.

- Ésta es tu casa ahora, ninguna más. - Se escucho un gruñido desde el camino de piedras, y al voltear pudimos observar a Lisa. Sus ojos estaban oscuros y su postura tensa. - Así que olvídate de tu amiga o lo que sea, de ahora en más este será el único lugar donde vivas. - Un sentimiento de dolor recorrió mi cuerpo al pensar en nunca volver, sin embargo, rápidamente fue remplazado por furia. Una furia contenida hacia esa estúpida loba que me miraba fijamente.

- ¿De verdad? - preguntó aún más emocionado Tae sin darse cuenta el tono con el que hablaba su hermana. Lo siento peque, pero no podría quedarme aquí, menos con esa idiota.

The Alpha's Huntress (JenLisa G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora