16 - EN CASA DE NUEVO

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Este es un capítulo con más "diversión" que digamos :D

— Gyu, ¿tienes algo que hacer esta tarde? —le cuestioné mientras guardabamos todo.

Iba a estar sola y aburrida en casa.

Jimin había ido a casa de Yoongi con los demás, y mamá trabajaba.

— Ehm, no. Al pedo —rió de si mismo. — ¿Por qué?

— No, es que quería invitarte a quedarte en casa un rato. Si quieres. —titubee un poco.

— ¡Oh, claro que sí! Me trae tantos recuerdos. —dijo tan alegre que mi corazón se alegró de aquello.

Ver a Beomgyu sonreír es una de mis cosas favoritas.

— Genial. Vámonos entonces. —tomé su mano.

— ¡Adiós chicos! ¡Adios Beom! —se despidió Ryujin.

Ahg, "Beom". Lo acaba de conocer, y ya lo está devorando, más de lo que Sanjuana devora a Eunwoo con la mirada.

Esos dos. Hace unos días los pillamos con Vanina besándose en un salón desocupado. No los culpo, pues hoy hice lo mismo con Beomgyu.

— Adiós Ryujin. —dijo algo en seco mi acompañante.

Adiós zorra — me despedí de ella en español.

— ¿Qué le dijiste? —se reía un poco Beomgyu, en cuanto íbamos camino a casa.

— Adiós zorra en español. Las cosas como son.

— Suena tan bien. —continuó riendo.

¿Por qué está tan alegre? Amo verlo así, su alegría contagia.

— Oye, ¿por qué tanta felicidad? ¿Te pico un insecto de alegría?

— Es que tus besos me transfieren euforia. Lo juro. Además hoy arriba del banco al que te subí tenías la defensa baja 😌

¡Oh mi...!

— ¡Beom! Te aprovechaste de que estaba seducida. Atrevido.

— Y lo volveré a hacer. Tus besos son los de la misma Artemisa. —sonrió enternecido.

— Y los tuyos como el mismo Dionisio. Solo que tus labios no saben a vino.

Al llegar, fui a mi cuarto a cambiarme.

— Tn, ¿dónde me puedo cambiar?

— ¿Te quieres cambiar? Está bien. Aquí en mi habitación. Yo me cambio en el baño.

— Gracias... Corazón de melón —me guiño un ojo.

Es tan... Increíble, dios.

Me cambié mi ropa usual a unos pantalones negros sueltos, una remera azul y chanclas.

En cuanto salí del baño, me tomé la sorpresa de encontrar a Beomgyu sin camisa.

— AH, Beomgyu avísame que no te vestiste aún. —me encerré en el baño de nuevo.

Estaba roja hasta las orejas.

Él se reía del otro lado.

— No sabía que ibas a salir. Ya está Tn, fue un accidente. Además, no me niegues que con los pocos segundos que viste, te gustaron mis abdominales.

No puedo ver su rostro, pero debe tener una mirada atrevida como siempre.

Y pues si la verdad, me habían gustado. Tenía buen físico como pensaba en un principio.

Mi Pobre Angelito || Imagina con Beomgyu TXT || TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora