Después del estruendo del salón, el silencio de la antecámara le resultó a Serenity ensordecedor. Caminaba despacio, esperando que Endymion entrara furioso tras ella, pero no lo había hecho, de modo que tendría que enfrentarse completamente sola a su padre y a su esposa.
-Acércate, Serenity - dijo Galaxia, con el ceño fruncido-. Estoy segura de que comprenderás que debemos evitar todo tipo de rumores en la corte.
-¡Cállate, esposa! -replicó Apolo, arqueando furioso la mano. Galaxia pareció encogerse por dentro-.
Serenity, hay muchas cosas que debemos decir, cosas que no podemos seguir aplazando. Tu madre debería haberte enviado en cuanto dejaste de mamar, pero eso es algo que dependía de la princesa Selene, no de ti.
-Mi madre hizo lo que consideró más conveniente, teniendo en cuenta lo que sabía sobre vos -respondió Serenity con un gesto de determinación-.
Debería haber solicitado una audiencia con vos, pero me dijeron que los reyes no recibían a las concubinas.
-Eres mi hija, deberías haber venido a verme inmediatamente.
-Endymion no estaba al tanto de nuestro parentesco - Serenity mantenía la voz serena-. Y la petición que he venido a haceros no es para mí, sino para mi padrastro y para mi hermana. Debéis enviar una felag inmediatamente.
- Reunir y preparar una felag lleva su tiempo -repuso Galaxia-. ¿Por qué arriesgar las vidas de los vikingos?
-Porque Kenji arriesgó la suya por los vikingos. Él sabía el peligro que corría, sabía que Zafiro Sigmundson era un traidor. Podéis preguntárselo a Endymion.
-¿Estáis buscando una excusa para la conducta de Endymion? -gritó el rey-.¡Te convirtió en su concubina! Tenía que haber adivinado tu parentesco. Tú y yo nos parecemos.
Serenity fulminó a su padre con la mirada.
-Hasta que mi padre no me ha reconocido, el único padre que he tenido ha sido Kenji. Decidí ocultarle a Endymion la verdad.
-Pero ahora te he reconocido como hija mía - dijo el rey Apolo-, de modo que desde este momento hasta el fin de los tiempos, espero que seas tratada como una princesa de los vikingos.
-El rey también desea que te comportes como tal - dijo la reina secamente-. Y espero fervientemente que sea posible.
-Mi madre era una princesa Ranrike y es a su reino al que pertenece mi corazón.
-Tu corazón debería permanecer junto al país de tu padre -replicó la reina Galaxia-. Y nos aseguraremos de que no vuelvas a deshonrarle con tus palabras, tu vestido o tu conducta.
-Cállate, Galaxia, éste no es el momento. Serenity, déjame verte otra vez -Apolo la tomó por la barbilla y le hizo volver el rostro de lado a lado-.Tienes el pelo de tu madre. Incluso la forma de tu rostro es la misma. Supongo que tienes aproximadamente la misma edad que cuando ella residía aquí.
-Me sorprende que lo recordéis-susurró Serenity-. Ha pasado mucho tiempo desde entonces.
-Algunas cosas quedan grabadas para siempre en la memoria- contestó Apolo.
-Pero la nariz y su forma de caminar son idénticas a las tuyas, Apolo - dijo la reina Galaxia en un tono que a Serenity le provocó escalofríos. Se volvió hacia ella y no encontró calor alguno en su mirada-. Años atrás, Kakeru me contó toda la historia. Le pedí que fuera a investigar, pero regresó diciendo que Selene, la princesa Cisne, había muerto y que su descendencia ya no me molestaría más. Yo era consciente de que su abandono continuaba doliéndote.
Te oía llorar por las noches.
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UNA PRINCESA INDOMABLE
AventureLa batalla que se libraba era para conseguir su corazón. El peligroso guerrero Endymion Shields era un hombre de acción, más que de palabras. Sin apenas tiempo para pensar en amores ideales, se apropiaba siempre de cuanto quería, y la princesa Sere...