-O-oigan porque me traen a-aquí- el pequeño chico de 14 años forcejeaba en los brazos de unos hombres muy altos y robustos con trajes blancos completamente.
-¡Mamá! a-ayudame, por por favor- su llanto entrecortaba sus lamentos. A sus espaldas mient...
─Que lugar tan húmedo y oscuro─ pronunciaba en voz alta Scott mientras miraba el techo de la celda, el día anterior lo recuerda muy vagamente; el rostro encolerizado de su doctor, los enfermeros llevándolo a rastras, una sombra oscura mirándole fijamente.
Le dolía todo el cuerpo, cada movimiento sentía como si le desgarraran por dentro, con mucho esfuerzo se sentó en la cama, observo a su alrededor, olía a humedad y desechos humanos, la oscuridad envolvía todo el cuarto y a el.
Aun no comprendía el porque estaba ahí pero ya se había resignado al maltrato, nadie esperaba por el, su familia hace años que lo había abandonado en ese parque, siempre durmiendo en la misma banca, sin perder la esperanza de que volverían por el. Todo por su maldita enfermedad y con la excusa que no tenían dinero para su tratamiento, fue dejado atrás. Hasta que un mes antes de que Morty llegara a las instalaciones, un par de policías que andaban rodando por el parque se les hizo fácil molestar al vagabundo sin nombre que solo estaba sentando mirando al vacío. Uno de ellos perdió el dedo anular por la fuerte mordida que le profirió Scott cegado por la ira; fue entonces que el Estado intervino y lo mandaron al centro psiquiátrico.
Sus lagrimas recorrían sus mejillas sin previo aviso, le invadía un miedo irracional estar en ese lugar tan deprimente.
─Oye, por fin despiertas, es hora de la cena─ Una voz le alejo de sus pensamientos y miro al enfermero entrar a dejarle una bandeja que contenía una hogaza de pan y un vaso con agua. No hizo movimiento alguno, su cuerpo no se lo permitía. El enfermero no se molesto ni en revisarlo, solo se limito a dejar la comida y salir del lugar.
Rick se encontraba en su despecho, no se podía concentrar en los papeles en su escritorio, la imagen de Morty era todo lo que tenía en su mente. La temperatura de su cuerpo comenzó a elevarse y podía sentir claramente como sus pantalones le estorbaban.
Bajo sus manos y libero su enorme erección, la tomo comenzando a dar lentos movimientos de arriba a abajo, su respiración se agitaba mientras que se imaginaba teniendo a Morty entre sus brazos, podía imaginarse lo suave de sus nalgas y lo delicioso que se sentiría darle fuertes azotes hasta dejarlas rosadas, hurgar entre ellas y saborear su culo hasta el cansancio. Los movimientos cada vez eran mas frenéticos, no podía dejar de pensar en meter su pene en ese pequeño hoyo y destrozarlo, dejarlo sin fuerzas en las piernas, hacérselo hasta que Morty quedara ronco de gritar su nombre, quería corromperlo, hacerlo suyo hasta el hartazgo. Morder sus rosados pezones, chuparlos, lamerlos sin piedad mientras escucha los melodiosos gemidos de Morty sobre su cabeza, pidiendo por mas y mas. El extasís recorrió su espalda, haciéndole llegar al orgasmo saltando un grave gruñido, manchándose de semen el abdomen. Morty tenía que ser suyo o se volvería loco.
Luego de recuperar su compostura, dio otro vistazo a los papeles, se le anunciaba que el día de mañana abría una inspección por lo que tenía que coordinar a todo el centro para salir ilesos y seguir recibiendo el dinero del gobierno. No habría ningún problema para el, cada año era mas de lo mismo.
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Hola!
Una disculpa por tardar en actualizar, el trabajo me tiene muy ocupada, espero que esten bien y les haya agradado el capitulo.
Y otra cosa que me tiene un poco trabada, son los personajes, les gustaria que hubiera mas interacción? O solo deberia concentrarme en el Rickorty? que opinan ustedes. Me refiero a relaciones secundarias y asi.
