CROWN | ❝Las coronas no son las que la convierten en reina, su Majestad❞
Gadea, una de las Guardianas de la reina Ilaria, se entera demasiado tarde de un complot en contra de ella. Viéndose obligadas a huír del reino saben que necesitan la ayuda de...
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CADA DÍA que pasaba odiaba más estar en el barco.
Mi pierna se recuperó enseguida, pero June me recomendó estar unos días en cama para no levantar sospechas.
Aunque, para una más, ya da lo mismo. La tripulación no para de preguntarse cómo es que una de las famosas Guardianas ha hecho que su pierna sangre en medio de la noche. El propio Caspian perguntó a toda su tripulación quién había sido el causante, pero Ilaria llegó a tiempo para que no tomara represalías con ninguno.
Llevávamos dos semanas sin divisar tierra firme, y únicamente tomábamos medias reciones de comida al día. Cuando no había fuertes tormentas, el aire dejaba de soplar, por lo que la tripulación tenía que remar.
Aeryn y Saphira pensaron que sería una buena idea ayudar a la tripulación a izar las velas y llevar barriles pesados de un lugar a otro en medio de la tormenta. Y, si ignorabas el viento que revolvía nuestros pelos constantemente y la lluva que se colaba por nuestras ropas, tendrían razón.
Pero no me quejo. Es mejor esto que quedarme todo el día en mi camarote sin hacer absolutamente nada.
También me ayudaba a dejar de pensar.
Pero no duró demasiado. Cuando pensamos que la visión que tuve de Rayen fue causada por la bruma que acechaba Narnia, entonces, volvió a suceder.
Las blancas y frías paredes de Ryn me dieron la bienvenida acompañadas de los ojos miel de Rayen. Me tendió una mano, como si la útima vez que nos vimos no me hubiera provocado una herida en la pierna. Las cosas no cambian tanto, al fin y al cabo.
Pasarán los años y seguirá tratándome como si fuera de hierro.
Como si mis heridas no sangraran.
A veces me gustaría que fuera real. Ser una máquina sin corazón, alguien invencible, cumplir a la perfección con lo que se espera de mí.
