Secuestrada/Karmaland y tú

Capítulo 27

-¡¡_____!!

-¿Que paso guapo? ¿No querías hablar conmigo? Con tu querida ____. Pues aquí me tienes.

"Sangre sangre, que bonita se ve correr por su perfecto abdomen"

-Estoy... de acuerdo contigo... pero déjame en paz! -suplico sujetándose el costado.

-Tarde bebe. Has despertado a la bestia, y no se irá hasta que tenga su recompensa. -reiste mientras te acercas lentamente a él.

Sacaste una daga de la túnica y la pusiste de cara a la luz.

-Demasiado corta.-declaraste lanzándola contra la pared. Esta se clavó a unos milímetros de la cabeza de Vegetta.

Volviste a revisar los bolsillos y esta vez sacaste un cuchillo. Le diste unas vueltas en la mano mientras mirabas su brillo con una sonrisa psicópata.

-Chiqui... -susurro Vegetta mientras la sangre se deslizaba por sus labios.

La expresión de tu cara se descompuso y por unos escasos segundos volviste a tener el control. "Corre" río la voz a modo de desafío.

-Corre -lograste articular antes de que un blanco fantasmal cubriera tu visión.

Lobo nocturno no se lo pensó dos veces y a duras penas se levantó y salió de la habitación. Tú habías perdido el control pero con un acto desesperado para dar tiempo a tu amigo, te clavaste el cuchillo entre las costillas. Eso no detendría a la voz pero daría tiempo a Vegetta para alejarse.

"Puta. Sabes que no lograrás detenerme. ¿Por qué gastas tiempo en intentarlo?"
No podías controlarte, necesitabas... necesitabas... "Matar"

Giraste la cabeza, y miraste la puerta con los ojos completamente negros. Ya no había vuelta atrás.

...

-Joder nena.

-Vete

-No te voy a dejar.

-Te puedo hacer daño.

-Se que no lo harás.-respondió Fargan con dulzura.

-Yo no estoy tan segura.-susurraste encogiendote más en el sofá.

Él solo volteó los ojos y se sentó a tu lado. Estaba a una distancia prudencial, no porque te tuviera miedo, si no porque sabía bien que necesitabas espacio.

-¿Puedes dejar de mirarme como si fuera una niña pequeña a la que tienes que cuidar?

-¿Como prefieres que te mire?

-Prefiero que directamente no me mires.

-Bueno, eres mi novia, así que vas a tener que soportarme mirándote como si fueras un achuchable osito.-respondió acariciando tiernamente tu pelo.

-No puedo controlar a la voz, y cada vez se hace más poderosa Fargan.-susurraste apartándose la mano.-Ya ni sé si tú puedes detenerla.

-Pero encontraremos una solución. -afirmó agarrando tu mano con fuerza.

-SIEMPRE DICES LO MISMO.-gritaste con una voz cavernosa.

Te tapaste la boca rápidamente con el brazo y te apartaste de Fargan con un ágil salto.

-Lo siento...-murmuraste al borde de las lágrimas.

Fargan te miraba sorprendido y un poco asustado, un segundo despues quito la expresión velozmente para no dañarte. Pero ya habías visto el miedo en su cara. Saliste corriendo sin mirar atrás. Oías como Fargan gritaba tu nombre pero sonaba muy lejano.

Llegaste al tejado jadeando y sudorosa. Habías tocado tu límite, Fargan. La única persona que te amaba y tu habías perdido el control.

"Es hora de irse pequeña"

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Buenas genteeee!!!!

No sabéis lo mucho que aprecio todo ese apoyo que me dais. Es increíble como una pequeña historia haya llegado tan lejos. Estoy que no me lo creo. Así que muchas gracias wapas y wapos (づ￣ ³￣)づ

Este es un capítulo más corto, tenéis que perdonarme. Pero bueno, es mejor que nada 😌

Tomen zumitos y hasta el próximo cap.