The Beyond

17: Es Huening Kai.

ㅡ ¡¿Qué mierda haces?!

Namjoon se levantó, poniendo rápidamente su espalda contra la pared y su mano en el pecho.

Lo mataría por darle tremendo susto, pero agradecía que fuera Seokjin quien se apareció tras él.

ㅡ Lo siento, no quería interrumpirte. ㅡ respiró con calma, pues también se había asustado por el grito de su capitán.

ㅡ ¿Qué haces despierto? Necesitas descansar.

El pelinegro se puso serio ㅡ ¿Dónde está Dabu?

ㅡ ㅇㅅㅇ ㅡ

Taehyung no estaba teniendo buenos sueños. Todo lo contrario.

Los recuerdos ajenos iban apareciendo de a poco. Era evidente que estaba adaptándose a ese cuerpo. Pero con cada recuerdo recuperado, su conciencia lo castigaba por tomar aquellas acciones.

Amor, comprensión, cuidado, atención. Todo eso fue nuevo para él. Y el haber hecho aquello, ahora le pasaba factura.

Taehyung nunca lo hubiera hecho, Taehyung nunca haría algo así, y eso era lo que le pesaba en el pecho ahora.

ㅡ ¿Tae? ㅡ Jungkook lo movió levemente ㅡ Taehyung, por dios, despierta.

El rubio abrió los ojos de repente y vio a Jungkook arrodillado al lado de su cama. Se enderezó asustado.
ㅡ ¿Qué... Qué...?

ㅡ Tae, estás todo sudado. ¿Te encuentras bien? ¿Tuviste una pesadilla, es eso?

Kim lo miró a los ojos con un deje de pena en ellos.
Si Jungkook se enteraba, lo odiaría.

No solía importarle los sentimientos ajenos. A ninguno de ellos les importaba. Sólo buscaban sobrevivir, como todos... ¿Entonces por qué ahora...?

Tenía tanto miedo de que se enterara.

ㅡ Jungkook, yo... ㅡ tragó saliva ㅡ Quiero dormir, pero no puedo dormir.

Jeon parpadeó, pensante.
ㅡ ¿Quieres que me cole en tu cama? ¿Domir juntos? Podría abrazarte tan fuerte que las pesadillas no podrán siquiera entrar. ¿Te parece?

No entendía este sentimiento. Lo había oído, sí. Pero no lo entendía.
Aún así, este cuerpo anhelaba por eso.

Asintió.
ㅡ Por favor...

ㅡ ㅇㅅㅇ ㅡ

ㅡ Puedo ir hasta el área de electricidad y restablecer la corriente ㅡ resolvió Jin.
Ambos, él y su capitán, estaban sentados en la cafetería, sólo alumbrados por las luces azules de emergencia. ㅡ Sabes que esto no durará mucho.

ㅡ Si estás seguro, entonces haré que Yoongi lo repare para que no surja otro corte, pero... ¿No te preocupa lo otro?

ㅡ ¿Qué alguno de nosotros esté haciendo esto? ㅡ dijo con algo de gracia ㅡ Lo único que me preocupa es encontrar a Dahyun y aterrizar rápido en el planeta civilizado más cercano.

ㅡ Nunca dejarán aterrizar a una nave con una posible infección. ㅡ suspiró ㅡ Hay que encargarnos del problema antes.

ㅡ ¿Y acusarnos los unos y a los otros? ¿O ya sospechas de alguien?

ㅡ Huening fue con nosotros... ㅡ tamboreó los dedos sobre la mesa ㅡ Y, bueno... Él se encaminó solo hacia una de las áreas del Beagle. Cuando lo encontré...

ㅡ ¿Qué? ㅡ lo instó a continuar, viendo su expresión preocupada.

ㅡ Kai se estaba ahogando con algo.
Diablos, él tosió con todas sus fuerzas. Incluso pensé en hacerle la maniobra, pero él se enderezó y me dijo que estaba bien.

ㅡ ¿Crees que fingió ahogarse o algo?

ㅡ No. Yo creo que él de verdad se estaba ahogando.
Y uniendo cabos, puedo tener una ligera idea de eso.

ㅡ No me jodas, ¿crees que Kai se tragó uno de esos parásitos? ㅡ dijo algo alto.

ㅡ Shhh.
Digo que el parásito se le metió.
Digo que es quién quizás este saboteando todo.

ㅡ Pero los KJ te dijeron que era un parásito externo.

Namjoon masticó levemente su labio inferior, nervioso ㅡ Estos científicos del Beagle estuvieron experimentando con ellos... ¿Qué tal si...? ¿Qué tal si al parásito no le quedó otra manera de defenderse más que cambiar su modo de ataque? ¿Qué tal si-

ㅡ ¿Ellos lo ayudaron a adaptarse rápidamente al sistema de una nueva especie? ㅡ Namjoon asintió y Seokjin puso cara de asco ㅡ ¿Estamos siendo un paso más para la evolución de estos seres? Es por eso que quisieron deshacerse de ellos antes de eso...

ㅡ Es por eso que quizás estén tan ansiosos por deshacerse de nosotros primero.

ㅡ ¿Qué dices, Taehyun? ㅡ Huening pateó su colchón desde abajo ㅡ Si ya no te resistes, será menos doloroso.

El joven de arriba, totalmente amarrado y cubierto por las sábanas al borde de la asfixia, seguía luchando contra eso que Kai había ingresado en su boca.

No quería hacerlo, no quería perder la conciensa y ceder; pero realmente estaba doliendo mucho.
En verdad, un gran dolor tanto físico como mental.

La sangre de su garganta, siendo desgarrada por el intruso que deseaba ingresar y adaptarse, se escapaba por la comisura de sus labios y sólo podía llorar en silencio.

Luego de la ida de su capitán, Huening lo había despertado para atacarlo.

Si él hubiera hablado antes.
Pero ya no era él.