Narra Héctor.
Su cabello alborotado, el sube y baja de sus perfectos senos cada vez que se mueve sobre mí, sentir las paredes de su sexo alrededor de mi miembro mientras grita...
-Pobre café tener que ser bebido por un idiota que no lo disfruta.- se burla de mi.
No lo vi cuando llegó.
Mi abogado estrella está sentado en mi frente, va vestido con un traje azul oscuro, camisa blanca, corbata, unos lentes y se a dejado crecer la barba.
Es guapo, no hay duda que es mi sangre.
-y bien, me dirás en qué pensabas- me mira con una sonrisa burlona.
Mi castaña.
En mi castaña, primito.
-me hiciste esperar mucho- le respondo ignorando por completo lo que acaba de decir.
-hola primo, ¿cómo estás? Bien, wao me alegro mucho yo igual- finge una mini conversación y luego me rueda los ojos.
Para ser abogado es muy infantil.
-deja el drama, te llamé para algo serio, necesito que trabajes para mí chica-
Le explicó todo lo poco que se y luego quedamos en vernos con Valeria.
Llegamos a su oficina, no tuve que decir tan siquiera mi nombre para que me dejasen pasar.
Se detiene el ascensor justo en el piso de Valeria y nos encaminamos a su oficina pasando por alto a su secretaria.
Muy mal educados, aunque el sujeto que camina a mi lado no pierde tiempo y le sonríe a la chica.
***
-tengo poco tiempo para arreglarme- dice mi castaña dejando su plato en el fregadero.
-Con cualquier cosa te vez preciosa-
- ok, ¿Que crees que deba ponerme?¿Que cantidad de persona asistirán?- pregunta mientras camina hacia las escaleras y le sigo.
-unas 16 o eso creo.- hablo encogiendome de hombros aunque estoy a su espalda y no me puede ver.
Luego de esperar unos 25 minutos, ella está lista lleva un vestido corto color rosa brillante, la hace ver sexy y elegante a la vez, tiene un bolso del mismo color y tacones negros es simplemente perfecta.
-es lo que mejor encontré para la ocasión- dice dandose un pequeño vistazo en el espejo.-Nos vamos- añade encaminándose a la puerta de la habitación.
-claro, estás preciosa-
Narra Valeria
Estamos frente a una casa algo la verdad es que es exageradamente lujosa, y eso que solo estoy en la entrada, detesto los lugares así.
-No me gusta mucho esta casa pero es aquí la reunión- me dice Héctor mientras caminamos hacia la puerta donde nos espera un joven.
Este nos saluda y habré la puerta para nosotros.
Dentro hay más de 16 personas joder y no me pondré a describir la casa está, se ve que solo viven de apariencias lo deduzco por parte de la decoración que pide observar.
-nena te presentaré algunas personas- dice Héctor colocando su mano en mi espalda baja.- no has dicho nada desde que llegamos.
-No me gustan muchos este tipo de cosas exageradas- digo refiéndome a la casa y él entiende perfectamente, lo sé porque disimula una sonrisita.
De la nada aparece una castaña con un vestido corto y empieza a hablar animadamente con mi acompañante, al cabo de unos minutos se percatan de mi existencia.
-Tú debes ser Valeria, un placer poder conocerte, soy la Loca con la que hablaste por teléfono, prima de Héctor- dice y luego me abraza.
-El placer es mío-
No recuerdo el nombre.
Caminamos un poco más hasta llegar a un comedor donde habían más personas, entre ellas señoras elegantes con vestidos de diseñador y hombres con trajes hechos a su medida.
Si esto es una reunión familiar no me imagino Navidad con esta gente; luego de saludar a una gran parte de ellos no sentamos en una mesa que es para mínimo 26 personas , estoy al lado de Héctor.
-Buenas noches, gracias a todos los presentes por asistir a nuestra reunión familiar, espero que sea una excelente noche para todos.- se levantó un señor con un traje gris, camisa blanca y corbata roja a juego con su pañuelo.
***
Hemos comido y hablando poco, ya estoy cansada de esta gente tan superficial, ahora estamos hablando en una esquina, Héctor, sus primos y yo
-¿te he visto en algún lado?- pregunta un chico de unos 16 años que la verdad se me hace conocido.
-no creo- respondo.-voy un momento al tocador- le susurró a Héctor.
*
Cuando estoy apunto de salir del baño entra una señora.
Maldición, no puede ser.
-Eres una trepadora, ¿Piensas que puedes engatusar a mi sobrino?- dice mientras me mira de arriba abajo.
-¿le gusta mi vestido ?
-crees que me gustará la ropa de una asquerosa mesera-
-señora solo fue un cafe-digo calmada recordando el pequeño suceso.
-sabes cuándo cuesta el abrigo que arruinaste, nunca en tu vida tendrás esa cantidad y sé que solo quieres a mi sobrino por el dinero.-
-no me joda maldita bruja- digo e intento salir pero su brazo me lo impide y la encaró.
-y es que no te enseñaron modales lo mugrosos de tus padres- me dice con una sonrisa arrogante y los siguiente que siento es el picor en mi mano.
Le he pegado.
-Usted no tiene calidad moral para hablar de mis padres, no vuelva a mencionarlos- le gritó y salgo del baño.
Intento sonreír pero no puedo solo quiero aire, tomar algo, quiero seguir golpeándola.
-bebelo todo y ven conmigo- dice lana entregándome una copa.
Tan tan tan tan
Holiiiis¿Qué pasará?
¿Que paso aquí?¿Cómo están ?
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Mi bailarina
Randomuna chica independiente bailarina por pasión, desea tener su propia escuela de baile por si sola e intenta salir adelante, consigue trabajo en un club luego de varios problema en su antiguo trabajo. Las cosas parecen tranquilas por un tiempo hasta q...