-...Y así fue como finalmente pudimos regresarlas a sus hogares- terminando de contar todo lo sucedido, Peter Parker limpió el sudor que perlaba la cara de una pálida Invisible Woman dormida.
Más de un corazón volvió a comprimirse con la escena mostrada, donde atestiguaban lo leal que era el Parker adulto al pasar tanto tiempo junto a una mujer que ni siquiera era capaz de escucharle atentamente, al mismo tiempo que se dedicaba diligentemente a cuidarla.
-No sé que decir ante eso...- meditándolo por largos segundos, Natasha comentó, enfocando su visión en un punto fijo entre el suelo y el televisor, demostrando lo perdida que estaba.
-Tanta determinación en cuidarla. Tanto empeño por el bienestar de quien ama- abstraída por lo compenetrado que se divisaba el rostro masculino, continuó hablando la romaní.
Había logrado, junto a los niños y Ben, tranquilizar a un volátil Johnny Storm que parecía más que listo para llevar a cabo un extenso y minucioso interrogatorio. Simplemente la actitud del rubio y la preocupación que tenía por la hermana de este, hizo que Spiderman pensara en los informes que tenía en su oficina para no sucumbir ante la necesidad de gritar nuevamente gracias a las secuelas de Superior Spiderman.
Haciéndolo a un lado, el castaño había ingresado a la recámara de la Storm para chequear el estado de salud, comprobando que aún continuaba dormida. Avistando ese hecho, la araña sabía que poco podía hacer en ese caso, por lo que se dirigió a la cocina para prepararles la cena al resto de los Fantastic Four y los niños. Para poder finalmente estar tranquilo al saber que todas las tareas domésticas del Edificio Baxter estaban cubiertas por el día, y así dejándole vía libre para cuidar personalmente a la rubia adulta.
-Sue...hasta cuándo dormirás? No es divertido hablar solo, no cuando he logrado conseguir tu amistad de nuevo- triste susurró el arácnido héroe, dejando a un lado el paño y reclinándose con cuidado sobre la cama desde el borde para no despertarla, con intenciones de peinarla.
-Perdón, Peter...- como si pudiese sentir en los más primigenio de su alma el dolor que aquejaba al ex fotógrafo, se disculpó Invisible Woman, dedicándole una compungida mirada cian.
Algo incentivaba a las demás espectadoras a dejar de ver la película. Era sumamente diferente la interacción existente entre los protagonistas actuales si se comparaba a las dos películas previas, pues esta vez todas eran conscientes de la relación que tenían, y los sentimientos que ocultaban tontamente por temor mientras el universo parecía funcionar a favor de ellos para que estuviesen juntos.
Les dolía ver la escena, pero sin importar lo que les deparara, ellas continuarían.
Inconscientemente, la dama de cabellos áureos parecía seguir el tacto del hombre entre sueños, soltando pequeños suspiros cálidos que generaban cosquillas en él.
-Eres tan caprichosa sin que lo notes...- sonriendo al ver cómo cada vez que quitaba su mano ella fruncía el ceño, Peter habló en voz baja.
-No lo soy- para diversión del resto, Susan pareció molestarse con la comparación hecha.
Aun así, esto fue rápidamente refutado con claras pruebas cuando la pequeña mano siniestra de Benjy se posó en la mejilla derecha de ella e intentó acariciarla como vio a su padre hacerlo, consiguiendo que la adulta cerrara los ojos y siguiera la calidez de la extremidad.
-Mama! – exclamó victorioso el niño, despertando de su ensueño a la rubia fantástica que atestiguó las burlonas muecas de sus acompañantes.
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Mujeres Marvel ven sus One-Shots con Spidey!
Fiksi PenggemarReunidas por una fuerza mayor, heroínas y villanas descubriran facetas nuevas de un hombre al que nunca pensaron ver más de una vez si les era posible. Una experiencia que les ayudará a reencontrarse con ellas misma a través de escenarios alternos a...