Me Enamoré De Mí Gata (Jenlisa)

Un bikini para gato

La mañana estaba soleada, olía a agua salada y bloqueador solar. Jennie sonrió, jamás había estado en la playa y le resultaba realmente mágico, a pesar de su fobia felina al agua.

habían carpas y sombrillas de colores con bonitas tumbonas debajo. Los turistas no se distinguían de los tailandeses dentro del agua, pero a nadie parecía importarle.

El padre de Lisa había decidido disfrutar la llegada de su hija mayor en pattaya, una espectacular playa turística a una hora de Bangkok. Allí alquilaron una casa de playa verca al mar y Mina no tardó en idear una salida con las chicas

-¿Hey Jennie, no vas a entrar al agua?- Mina salía del agua empapada, con un diminuto bikini que cubría solo lo justo

-Yo... Ni me gusta el agua, y ni tengo bañador- respondió la coreana jugueteando en la arena con una vara

-¿Oh, quién viene a la playa sin traje de baño?. Mira hasta Lisa vino preparada

La castaña miró hacia dónde la tailandesa señalaba y su mandíbula se desencajó. La rubia salía del agua como una maldita Barbie girl de Baywatch. ¿Por qué la vei en camara lenta? Y es que cada paso de la bailarina era arte para la coreana. Sus movimientos pausados, su piel destilando, y la sensualidad de como se apartaba su humedo flequillo del rostro. Jennie sintió una corriente desde su entrepierna hasta su vientre, obligándose a cerrar con fuerza las piernas. Pero el calor en su zona Sur se hizo fuego al verla fuera del agua. ¡Oh, Dios gato!. Los senos de la tailandesa se veían deseables en ese bonito bikinie rojo, y sintió su boca hacerse agua al ver su tonificado abdomen, y cada uno de sus chocolatitos. Jennie mordió el labio deseosa, se moría por aruñar esa zona. Su mirada bajo un poco más y casi sufre un colapso al ver su perfecta entrada en V, que se perdía en la parte inferior del bikini

-¡Tailandia llamando a Jennie!- Mina dio un chasquido frente a la castaña sacándola de su transe - Joder, sé que mi hermanita esta buena pero no te babees

Jennie limpió su boca confundida y Mina rió

-Yo hablaba de otra boca

-¿Pues cuántas bocas tienen los humanos?- quiso saber la castaña con interes

-Las mujeres fuimos dotadas por dos, una más placentera que la otra- le gruñó un ojo y miró hacia su hermana- mira, parece que Lisa Unnie pronto entrara en acción

-¿Lisa qué...?- Jennie apretó los puños al ver a dos chicas y un chico dirigiéndose a la tailandesa con coquetería.

-¡Espera mojadas tu ropa!

-Está mojada de todas formas...- susurró la coreana apretando las piernas

-¿Qué?

Jennie iba a responder pero noto como una de las chicas se inclinaba a Lisa. Eso sí que no

-¿¡Jen qué haces, a dónde vas!?

Lisa por otra parte empezaba a sentirse incomoda con la conversación, la actitud coqueta de las dos chicas y las miradas lascivas del castaño eran molestas

Una de las chicas, la pelirroja, empezó a juguetear con uno de los cuadritos de Lisa, poniéndola nerviosa

-Eres bastante sexy, ¿qué te parece si tú y yo...?

-¡Quitale las malditas manos de encima!

Lisa quedo en shock al ver a la castaña, Jennie iba hacía ella únicamente en ropa interior. Joder. Ese cuerpo sin duda era el de una diosa. El contoneo de caderas era infernal. ¿Cómo seria tener ese vaivén sobre ella?. Agitó la cabeza. No Lisa, no pienses en eso ahora.

La castaña estaba de brazos cruzados. Nadie iba a tocar a su Lisa mientras ella estuviera allí

La chica pelirroja miró a Jennie de pies a cabeza, confundida por su apariencia y su reciente interrupción

-¿Y tú eres..?

-Jennie Kim, y Lalisa Manoban me pertenece

Las piernas de Lisa se aflojaron con ese tono posesivo de la castaña. ¿Quién es ella y que hizo con mí Nini?

-No veo nada que diga que es tuya- respondió la chica mirando a Lisa

Jennie arqueó una ceja y sonrió

-Tranquila, puedo demostrarlo- en segundos la castaña ya se encontraba frente a Lisa jalando de su nuca y fundiéndose en un beso agresivo

La bailarina se sentia en el cielo ¿Cielo? ¡en el puto infierno!. Se estaba quemando viva y esa coreana de cuerpo despampanante era el mismísimo lucifer con vagina. Jadeó cuando la castaña tiró de su labio inferior y finalizó lamiendolo con mimo para aliviar su malestar

Aquella sensación era placentera. El sabor de Lisa era simplemente exquisito. Jennie suspiró, y miró a la chica que apretaba los puños con disgusto. Sonrió. De reojo podía ver a los otros dos mirarla con odio y eso le encantaba. ¿por qué?. Ni ella lo sabía, pero como felina le encantaba marcar su territorio y Lisa desde que la beso, le pertenecia

-¿Está claro o debo dar otro ejemplo?- retó Jennie, mirando fijamente a la pelirroja

-¡Otro ejemplo!- exclamó Mina a poca distancia, dándole un sorbo a su Coca Cola

La tailandesa se ruborizó. Su hermana había pillado toda la escena. Mina estaba junto a ella con una sonrisa burlona. A Mina le gustaba Jennie para su hermana, y estaba lista para shippearlas

-Hermanita parece que estás empapada

-Cállate Mina, no estoy tal cosa

-¿No? Pero si acabas de salir del mar- fingió inocencia, y rió- tu di lo que quieras Pokpak, pero esa chi... ¿ha dónde se fue?

Las dos miraron de un lado al otro en busca de la castaña y un alarido las hizo girar hacia el mar.

Ambas tailandesas ampliaron los ojos, en el agua la chica que coqueteaba con Lisa minutos atrás estaba en ese momento luchando por salir a la superficie para respirar, mientras la de ojos felinos, furiosa, la hundía una y otra vez hasta el fondo

-Lisa- hundió su cabeza- Es...- otra vez- ¡Mía!- y esa vez la dejó por más tiempo dentro del agua

-¡Oh Mierda!- exclamó Mina corriendo al agua

-¡No Jen, sueltala, la vas a matar!- ordeno Lisa siguiendo a su hermana de cerca

Las hermanas luchaban por desprender a la castaña de su victima, pero Jennie estaba inmersa en su labor. Nadie se mete con lo de Jennie Kim