Derrota

46 15 2
                                    

—Y por tu culpa, Omega, yo no pude estar ahí para cuidar a Gabriel, por tu culpa Diego golpeó a mi hermano, por tu culpa seguridad social se llevó a Gabriel, y quién sabe dónde esté —hizo una pausa para tomar aire—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Y por tu culpa, Omega, yo no pude estar ahí para cuidar a Gabriel, por tu culpa Diego golpeó a mi hermano, por tu culpa seguridad social se llevó a Gabriel, y quién sabe dónde esté —hizo una pausa para tomar aire—. Mi hermano era todo lo que tenía. ¿Y sabes qué? Luego de matarte a ti, mataré a Jeremy, o como el mundo lo conoce mejor, Anti-Omega, Ambos tienen la culpa de todo. De no haber quedado en coma, ahora mismo estaría viviendo con mi hermano en otra ciudad.

Solo miré a White Shadow y le dije:

—Oye Estuart, siento mucho escuchar todo eso, pero eso no fue ni culpa mía ni de Jeremy, eso fue...

Antes de que terminara de explicarme, Estuart me tomó del cuello y me levantó.

—¿Qué? ¿dices que entonces fue culpa mía? No, nada de lo que digas cambiará lo que pasó.

—Bueno, en ese caso...

Seguido de decir eso, mostré la mano que tenía detrás de mi espalda, la cual estaba recubierta de energía Omega, y antes de que él pudiera reaccionar, con todas mis fuerzas, le di un puñado en el centro del torso; así soltándome, y él saliendo disparado hacia un edificio.

—¡Jaja! ¿Qué tal eso idiota? —me burlé.

Después de chocar con la estructura, Estuart cayó al suelo, le tomó solo un instante recuperarse. Se puso de pie, y comenzó a correr hacía mí.

—Voy a acabar contigo, Zack.

Ya cuando estaba él estaba bastante cerca, intentó darme un puñetazo en el rostro, pero lo logré esquivar a tiempo, para luego yo darle una patada en el abdomen.

Después de soltar un gritó de dolor, Estuart intentó darme otro puñetazo, pero esta vez acertó, dándome en el lado derecho de las costillas, haciéndome retroceder; él aprovechó y me dio otro golpe en la cara, dejándome totalmente desconcertado.

Viendo que estaba aturdido, White Shadow me tomó por la parte de atrás del cuello y me empujó hacia abajo, dándome un rodillazo en la nariz.

Me quejé del dolor, y sostuve mi nariz con fuerza.

Estuart me agarró del pecho la sudadera que llevaba puesta, y comenzó a volar, elevándome con él.

—¿Pensaste que podrías ganar esta batalla? Desde que te volviste un «héroe» tu actitud rebasa confianza a más no poder. Nunca te han vencido y creíste que sería igual esta vez.

Ya estando a una altura bastante pronunciada, Estuart me dejó caer al suelo. Al yo estar lastimado no pude usar mi energía para suavizar la caída, por lo tanto, al chocar con el cemento del piso no solo me lastimé la espalda, sino que también quedé inconsciente.

—Ay, Zack, aún no es hora de la siesta —tras decir eso, White Shadow me tomó de una pierna—. Apenas estoy calentando.

Entonces comenzó a darme vueltas en el aire, para después soltarme y salir disparado y caer enfrente de un puesto de comida. La fuerte caída provoco que varios de mis huesos se rompieran. Donde caí había bastantes personas, algunas salieron corriendo al verme impactar con el suelo y otras solo se quedaron observando.

Pero en específico, un hombre; él cual tenía el pelo rubio, peinado hacia arriba; llevaba una camisa formal azul, con las mangas arremangadas; lentes de sol, con el armazón color blanco; y un pantalón de lona color negro, caminó hacia mí, se agachó y dijo:

—Vaya, nunca había visto un superhéroe tan de cerca —se puso de pie— ¡alguien debería ayudarlo! —ninguna de las personas que estaban allí respondió— bueno, entonces lo haré yo.

Instantes después, White Shadow se acercó al puesto comida donde caí, al ver a su alrededor y no apreciar donde estaba yo, preguntó por mí a las personas de alrededor.

—Buen día ¿Alguno de ustedes a visto a un Omega caer justo aquí?

Nadie respondió, solo lo veían con miedo.

—¿Ninguno? Bueno —se acercó a una de las personas que estaba allí, un hombre.

—¿Tú has visto algo? —le preguntó Estuart.

—No —dijo el tipo tartamudeando.

—Muy bien —White Shadow golpeó a esa persona en el estómago, dejándolo sin aire y haciendo que cayera rendido al suelo.

Automáticamente todas las personas que estaban allí salieron corriendo del lugar, aterrorizadas.

—Malditos cobardes.

Estuart empezó a buscar por todas partes para ver donde estaba, pero no me encontró en ningún lugar; supo que me había escapado.

Muy molesto por mi huida, se paró en medio de una calle y golpeó el suelo de la rabia, dejándole una gran grieta.

𝗢𝗺𝗲𝗴𝗮 𝟮: 𝘚𝘩𝘢𝘥𝘰𝘸𝘴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora