S I E T E

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Tanto años...

Tantos putos años tratando de poder cobrar mi venganza, tantos años en los que sentía todo el puto vacío de Léx y que era también mío.

Todo el maltrato hacia mamá y hacia mí.

Solo en los sueños más oscuros y escondidos, he podido arrancarle la piel y hacerlo sufrir... pero ahora que los papeles se han invertido y que ahora tengo el poder de destrozarlo me hace sentir mejor.

Siento las emociones Léx, él quiere empezar, está ansioso para acabe con las dos personas que nos han hecho daño.

"también quiero darle este placer a mamá"

Me giro hacia mamá y le entrego el cuchillo. Elle me ve y lo toma, sus manos tiembla por lo que sonrío.

—no dudes, quieres esto. Tus ojos demuestran todo—expongo. Me acerco y la coloco frente a papá que niega repetidas veces.

— ¿Por qué Garrett? —pregunta, su voz igual de fría que la mía—. ¿Por qué te volviste así, por que destruiste a nuestra familia?

No responde, parece que no tiene argumento. Mi madre se enoja y rápidamente le hace un corte en el pecho rompiendo la camisa y traspasando su piel, haciendo que la sangre salga. El grito proferido de la garganta de mi padre me hace sonreír. Miro al amigo de mi padre que solo cierra los ojos y trata de no mirar la escena que está cerca de él.

—Tantos años llorando, tantos momentos en lo que desee desaparecer—mi madre niega con la cabeza, sus ojos parecen perdidos—. Tantos momentos en lo que espere que una bala te alcanzara y que jamás llegaras a casa.

Mamá...

Me acerco a ella y la alejo, mi padre no para de soltar maldiciones. Tomo el cuchillo y de una vez lo clavo en su estómago. Un alarido es lo que obtengo pero no me detengo. Clavo tantas veces el cuchillo que mi mano se cansa, mis manos se llena de sangre como también mi rostro y ropa cuando me salpica.

La sangre brotaba a una velocidad acelerada, goteando en la silla y creando un charco de sangre que llega hasta mis pies. El seguía consciente, sus ojos me miraban penetrantes pero no mi inmute sabía que en este momento está sufriendo y es suficiente.

Continué hacia el hombre al lado de mi padre, me miraba, salían negaciones de su garganta y clemencia a su vida.

—no lo hagas, por favor detent-

Mi puño se estrelló contra su cara dejándolo sin hablar.

— ¿acaso yo no te pedí esa mierda? ¡Te pedí muchas veces que no me tocaras!

El siguió negando y yo me acerque más él. Tome el bebedero y lo coloqué frente al hombre mientras agarré su cabeza. El la giraba y trataba de zafarse pero era inútil. De una vez tire de su cabeza al agua y el soltó un grito ahogado por el agua al primer contacto con la piel.

Su cuerpo se sacudía y trataba de subir la cabeza, las burbujas de su respiración salieron en el agua y sabía que debe estar quemándose por dentro. Lo saque y el grito fuertemente, su cara estaba roja y estaba quemada.

Pasee de nuevo a mi padre, su rostro estaba pálido y la pérdida de sangre era mayor. El chuchillo comenzó a darle cortes a la camisa que tenía y luego a su piel. Cortes como los que yo tenía pero trataba de hacerlos profundos y más dolorosos. Él se quejaba pero ya me estaba cansando de tanto drama.

— ¿quieres el acto final? —le di el cuchillo a mi madre.

Ella se acercó y lo observo, sus ojos transmitían odio y satisfacción pero veía también la paz en ellos.

—lamento a verte conocido.

El cuchillo paso lentamente el cuerpo de mi padre, mi madre lo hundió hasta el fondo y mi padre soltó un quejido fuerte.

El dejo que hacer algo y vi que sus ojos comenzaron a perder vida.

Esta muerto.

"terminemos completamente esto"

Me dirijo hacia el amigo de mi padre quien había comenzado solo a soltar quejidos. Tome el bebedero y lo voltee dejando un charco que él al igual que yo pisábamos. Me aleje y quite a mi madre del charco, busque la extensión y la conecte a un tomacorriente. Busque con la vista algún objeto hasta que vi a la lejanía la lámpara vieja que mi abuela nos la había dado hace años y que mi papá tiro aquí porque jamás le gustó.

Regrese con las cosas en mis manos. Conecte la lámpara al enchufe y ella se encendió. La puse en una de las mesas y me acerque al hombre con un cuchillo en mi mano, abrí su estómago y gritó de dolor, paso el corte a la parte interna del muslo donde estaba una de las arterias. Todo se llenó de sangre y luego terminando la escena, rompí la lámpara en el agua.

Su cuerpo se estremeció con las descargas, sabía que estaba sintiendo demasiado dolor; las cortadas, las quemaduras, la electricidad.

Su cuerpo se estremeció en espasmos hasta que en un momento dejo de gritar y su cuerpo dejo que moverse.

Sonreí.

Mi venganza se cumplió.

Mire los dos cadáveres y no pude estar más contento. Observe a mi madre, ella me mira con lágrimas en los ojos y sé que ella pensaba que al fin terminó su pesadilla.

Todo termino.

Todo se ha acabado.

"todo por fin terminó"

La Compañía De Léx ✓ 0.0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora