El sol salió, era una muy linda mañana. Como el pronóstico lo indicaba, este mes sería un mes algo lluvioso. Algunas gotas caían del cielo, ________ decidió tomar una ducha e ir en dirección al hospital.
Aún era temprano, aprovecho para ir en la mañana ya que era Domingo y no tendría clases.
Al llegar al hospital, la recepcionista la atendió.
- ¿Señorita ________? ¿Qué hace aquí? Ayer la señorita Trinity fue dada de alta.
- Lo sé, vengo a visitar a otro paciente. - exclamó con seriedad.
- Oh claro. - La recepcionista tomó una libreta y anotó el nombre de la chica. - ¿A quién deseas visitar?
- Aidan Gallagher.
- ¡Oh, el nuevo paciente! Me alegro que tenga visitas. - sonrió. - Puedes pasar a su habitación.
- Muchas gracias.
________ caminó hasta la habitación de Aidan, tocó la puerta con sus nudillos y Aidan le otorgó el paso.
- ¿Qué haces aquí?
- ¿Acaso no puedo venir a visitarte?
- No es eso. Solo me pareció raro, Trinity se ha ido del hospital, no tienes porque venir a verme.
- Sinceramente no tengo idea de qué hago aquí.
- Tuviste el deseo de ver mi hermoso rostro una vez más. - dijo Aidan en un intento de coqueteo.
- Idiota. Creo que vine porque me sentía culpable al dejarte aquí solo. No, no te tengo lastima, es solo que no puedo abandonar a un amigo.
- ¿Amigo? ¿Desde cuándo me consideras tu amigo?
- Desde que compartimos nuestros números, no suelo pasarlo.
- ¿Entonces puedo decir que soy un afortunado?
Una risa salió de los labios de ________.
- Exactamente, eres afortunado.
[...]
En otro lado de Nueva York se encontraba un chico castaño caminando en dirección a la casa ________. Al llegar a su casa, la madre de ________ abrió la puerta y dejó a entrar a dicho chico.
- ¡Buenos días Henry!
- Buenos días. ¿Se encuentra _______ en casa?
- No, hace rato salió, fue al hospital.
- ¿Al hospital? ¿Para qué? ¿No se supone que Trinity fue dada de alta ayer?
- Sí. Pero creo que fue a visitar a un amigo nuevo que conoció.
- ¿Con qué un amigo? - pensó Henry mientras apretaba con fuerza su puño.
...
- ¿Quieres que te cuente otro de mis chistes? - preguntó Aidan con una sonrisa.
- Estoy segura de que será tan malo como el anterior, pero bueno, cuéntamelo. - dijo ______ con una sonrisa dibujada en su rostro.
Aidan le parecía un chico algo simple de entender, esos chistes suyos ayudaban a avanzar con rapidez su amistad. ¿Por qué? Simplemente con esos chistes malos hacían que la risa de ambos saliera a flote.
- ¿Qué le dice un vaso a otro vaso?
- ¿Qué vasó? - respondió _______, le pareció ya haber escuchado antes ese chiste.
- Nada, porque los vasos no hablan :3
Una fuerte carcajada de ambos llenó toda la habitación.
