𝟎𝟎𝟖. aries and scorpio, zodiac bitches

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CAPÍTULO OCHO:ARIES Y SCORPIO, PERRAS DEL ZODIACOU

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CAPÍTULO OCHO:
ARIES Y SCORPIO, PERRAS DEL ZODIACO
U.A. MUSUTAFU, JAPÓN

Hablando por el grupo que tenían los chicos de su círculo amistoso en común, notó como se habían invitado solos a su propia casa

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Hablando por el grupo que tenían los chicos de su círculo amistoso en común, notó como se habían invitado solos a su propia casa. Era un día sábado, ya para eso de la una de la tarde que estaban armando planes para juntarse a hacer alguna pijamada y cosas de chicos normales para pasarlo bien luego de tanto ajetreo.

El problema: querían ir a su departamento. Y a pesar de que su sala era lo suficientemente grande como para que todos entraran, le incomodaba un poco. Al primero que mencionara lo de la pata de conejo en la ventana le volaría la cabeza.

Ya hasta parecía Bakugo.

Y les permitió ir a su casa esa misma noche, siempre y cuando fueran callados y no le contaran a todo el mundo. Había chicos que no estaban involucrados y le agradaban de igual manera, pero prefería no meterlos para no tener problemas.

Entre ellos, Todoroki. Sabía que algunos pensaban que era un poco raro, pero era realmente secreta la admiración que Hachiro tenía hacia él. Imaginarse que fuese mutuo lo haría morir de un infarto.

Ese chico le agradaba demasiado. Pero claramente, no era cosa de ninguno ser lo suficiente sociable como para buscarse.

Finalizó la conversación con sus compañeros con un simple: "Arreglen ustedes a que hora vienen, me la soba mientras me dejen dormir siesta y no vengan con olor a sucio". Y así fue, como apagó el celular y lo dejó sobre su mesita de luz. Tenía pensado desperdiciar su tarde durmiendo, un rato antes de que llegaran iba a hacer ejercicio.

O no.

Al final el pensamiento bipolar que poseía le hizo levantarse de la cama y hacer algunas flexiones en el suelo. Eran raras las veces que tenía aquellos saques de energía instantáneos, luego creía que moriría por la presión en su cuerpo.

Así que realizó la rutina de siempre. Flexiones, lagartijas, pesas y un descanso de cinco minutos que se basaba en tirarse en su cama como si de una bolsa de papas se tratase. Ni siquiera se estaba hidratando bien, por lo que su cabeza dolía horrores.

𝐈𝐊𝐈𝐆𝐀𝐈! bakugō katsuki ✶ male ocDonde viven las historias. Descúbrelo ahora