Para Que Nadie Se Entere. -Juan Pablo Villamil.- LDA #2

Cap. 56

Antonia
Angela: ¡Que gusto verte! -me envolvió en un abrazo-
Antonia: ¿Cuando volviste? -pregunté aún en shock-

Les explico la relación de Simón y Ángela había terminado, ella se tenía que ir a estudiar a Canadá, ya que su familia deseaba eso para ella.
Simón terminó muy mal, cuando ella partió de Colombia, tenía 13 cuando ella se fue y básicamente ella fue como una hermana para mí, ella me ayudó en todo, ella me ayudó con el primer chico que me gustó, me arregló para mi primer baile escolar, me enseñó todo lo que sé de maquillaje y moda, más bien, me ayudó a encontrar mi estilo.
Lo último que supe de ella, fue que inició una relación con algún chico de la escuela, pues nos seguíamos mutuamente en Instagram.

Ángela: Hace dos días, ¿Y tú?, Por qué se que no vives aquí desde hace un tiempo
Antonia: está mañana -sonreí asintiendo ante lo que ella había dicho antes-
Ángela: de verdad que me da gusto verte. Todo lo que se de ti es gracias a las redes sociales, pero dime, ¿Cómo estás?, ¿Tu familia?... ¿Cómo está Simon?
Antonia: Estamos todos bien, muy felices y sanos, al igual que Simon... ¿Tu como estás? ¿Que tal tu novio?
Ángela: oh, el y yo terminamos hace unos meses, pues yo volvería aquí y el no podría venir conmigo...
Antonia: Lo siento mucho, debió ser duro -intenté sonreírle pero salió más como una mueca-
Ángela: Tranquila, estoy bien, lo he superado...
Antonia: Fue un gusto verte pero debo irme, me están esperando y seguro van a matarme por qué voy tarde -deje salir una leve risa-
Ángela: no te preocupes, yo entiendo, ¿Te parece si quedamos para más tarde?
Antonia: amm, si. Está bien -sonreí. En la que me estaba metiendo-
Ángela: Aún viven en el mismo lugar, ¿Cierto?
Antonia: sip
Ángela: perfecto te veo más tarde

Sonreí en forma de despedida y salí corriendo de ahí. Ahora mi mayor problema era hacer que Nath, Simón y Ángela no se vean.
Llegué finalmente a la tienda donde fuera de ella pude ver a las chicas y a mamá esperándome.

Gisselle: Tu si que eres impuntual
Antonia: ¿Viste el diario de la princesa? Una reina nunca llega tarde, los demás se adelantan.
Nath: Bueno entonces, explicanos que hacías con Villamil
Antonia: ¿Por qué piensan que estuve con el?
Gisselle: hueles a perfume de hombre y ese es el de Juan Pablo.
Antonia: eso es jodidamente enfermo y da miedo
Sra. Vargas: Bien chicas, podemos comenzar -salió de la tienda con una sonrisa-
Nath: Tenemos una charla pendiente -me señaló con el dedo-

Entramos a la tienda, dónde voltearas todo era blanco, y me encantaba.
Y entonces la búsqueda comenzó, mamá se probó máximo unos seis vestidos, hasta que encontré el indicado. Uno blanco obviamente, largo y esponjado por debajo, pero lo que lo hacía hermoso, eran las pequeñas piedras que brillaban con fuerza. Mamá sabía, todos sabíamos, que ese era el indicado.
La chica que la estaba atendiendo se acerco, pues debían hacerle algunos ajustes al vestido, mientras tanto, me aleje un poco para ver otros vestidos, y me tope con que había uno idéntico al que Bella Swan usó al casarse con Edward Cullen, sonreí con emoción pues soy una gran fam de esas películas, pase mis manos por el vestido suavemente.

Sra. Vargas: Es hermoso -llega a mi lado con una sonrisa. Ella se ve hermosa con ese vestido- Deberías probartelo...
Antonia: No, para que? -me gire a verla riendo-
Sra. Vargas: Bueno, ellas lo hicieron -señala a las chicas quienes salían del probador con unos hermosos vestidos- señorita mi hija se probará este

La señorita me sonrió y tomó el vestido, me guió al probador y me entregó el vestido, con mucho cuidado me lo puse, al salir, ella me colocó el velo y me ayudó a pararme frente los tres grandes espejos. Pude ver las caras de mis amigas y de mi madre pues ellas estaban sentadas frente a mi en el hermoso sillón.

Gisselle: ¡Te ves hermosa!
Nath: Me siento como una mamá -sonríe limpiándose una lágrima falsa-
Sra. Vargas: Imagina como me siento -sonríe mirándome mientras se para a mi lado- Como que hay que apurar a Joel, ¿no?
Antonia: No quiero que asustes a mi novio, además, no quiero casarme a los 19, y estoy segura de que el tampoco lo quiere -sonrío mirándome al espejo. No es por nada, pero me siento demasiado bonita en este vestido-
Gisselle: Bueno, quien sabe, Joel está que babea por ti, y como dices, tiene 19, todo puede pasar -ríe dándome una mirada-
Nath: Sí, ahora todos suelen comprometerse a esa edad.
Sra. Vargas: Es cierto, tu padre y yo nos juntamos a tu edad. 
Antonia: Bueno nosotros no somos todo el mundo, y no queremos eso...
Nath: Bien bien... Debemos tomarnos una foto, somos como Rachel, Mónica y Phoebe.

Nos tomamos unas fotos y luego mi mamá se nos unió. Al final mamá se quedaría con aquel lindo vestido, solo necesitaría algunos ajustes pero prometía estar listo antes de la boda. Mamá y yo nos habíamos ido en su auto mientras que Gi y Nath se iban en el que yo había llegado. Hice que mamá manejara, así que en el camino aproveche a contestar algunos mensajes de mi bubu, Mau y Santi a quienes llevaba un rato sin ver por qué todos estábamos muy ocupados, y los extrañaba más que a nada. Al llegar a casa me dirigí a mi habitación donde seguidamente deje mi bolso y me tire en la cama pero esto ocasionó que mi bolso cayera y tirará todo lo que estaba dentro de el. Incluyendo aquella linda libreta de cuero cafe que Elizabeth la mamá de Joaquín me había regalado, su función era ser un diario pero para mi es como un cuaderno de canciones, sip, igual al que tenía Ally de Austin y Ally. En esta tenía algunas partes que podrían ser de canciones que si me lo propongo podrían llegar a serlo.
Había estado escribiendo en aquellos días en lo que Villamil me había estado ignorando y no quería saber nada de mi y otro donde describía al 100 de lo que iba nuestra relación.
                                 "A veces somos
                                  A veces no
                                  Un día es odio
                                  Otro es amor"

Mi laptop había sonado indicando una llamada de facetime, sonreí al ver de quién se trataba y la contesté de inmediato.
Pase un buen rato hablando con Joel hasta que se despidió pues tenía algunas cosas que hacer antes de venir a Colombia, escuche que alguien tocaba el timbre, según yo no esperábamos a nadie.
Pero de inmediato recordé a Ángela y en qué vendría por mi a verme, rápidamente baje las escaleras gritando un "YO ABRO" pero fue inútil, pues Nath ya había abierto la puerta y Simón estaba por ir detrás de ella.
¿Habría algún día en el que los problemas se alejen de mi?

//HOLAAAAA, ya volví y con ganas de vivir, así que eso significa que con ganas de escribir para ustedes, díganme algo, ¿Les gusta la pareja de Nath y Simón?, Tengo muuuuchas ideas para ellos ujum.
Nos leemos pronto (ahora sí, cuando digo pronto, es pronto).