Capítulo 25.

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El humo entró en sus pulmones y cada respiración era dolorosa, sus verdes fanales no podían siquiera ubicar el lugar donde estaba. Instinto, se estaba dejando guiar por sus instintos y eso era lo que hasta el momento lo había mantenido consciente, todo ahí dentro era destruccion total, habían secciones donde todo estaba completamente en llamas y otros donde estas aun no habían logrado llegar.

El aire le estaba faltando y el infernal calor le estaba haciendo jadear por una gota de agua, no quería regresar, ya estaba cerca, sabía a donde ese pasillo lo llevaría, solo faltaba un par de metros mas.


~*~

Oscuridad total, falta de oxigeno, calor, mucho calor, llantos, suplicas y lamentos. Aquello era un caos, aquello era una pesadilla de la cual parecía hacerse cada vez más real, trataba a como fuera posible mantener la fé, en mantener sus esperanzas de que nada malo iba a pasar pero, no sabía cuanto tiempo había pasado desde su llamada al 911, no sabía cuanto tiempo había pasado cuando a duras penas logró escabullirse de esos hombre y haber podido entrar a esa habitación.

Ni siquiera sabía que existía, probablemente ellos habían olvidado decirle que eso se encontraba ahí. Se habían mantenido a salvo durante los primeros minutos pero ahora, ahora parecía que todo su mundo se venía a pedazos frente a sus ojos. Su hijo, su hermoso hijo y su Alfa han de estar devastados.

-Sssh, ya pequeños, todo estará bien.- Trataba clara de arrullarlos pero el calor desesperante estaba comenzando a sofocarlos cada vez mas.

La omega humedeció dos trapos que había encontrado antes y con mucho cuidado a no desperdiciar la poca agua que tenía, los escurrió y los colocó sobre la cabecita de cada uno de los cachorros. Hasta el momento era lo único que los calmaba por cortos minutos.

-Saldremos de esta, ya verán que pronto estaremos con mi Danno y Steve.- Musitaba la omega.

Estaba comenzado a marearse y eso no significaba nada bueno, no era momento para que un bajón de azúcar se presentará en esos instantes. Debió haber comido su desyuno cuando los niños aun dormían, pero a decir verdad, no le había dado tiempo ni para prepararse un ligero almuerzo.

Y todo se volvió oscuro... Clara ya no supo cuando el humo comenzó a entrar por uno de los ductos que no había siquiera visto, pues, este estaba de detrás de un pequeño muble casi empotrado a la pared.



~*~

Harry se había quedado al cuido de Danny, algunos de sus amigos se encontraba a las afueras del edificio. Danny aun no despertaba, la droga que usaron en él había sido tan fuerte que por un poco mas le hubiera causado la muerte. Nada fue coincidencia, el haber estado en esa fiesta justo el último día de su celo no lo fue, el regreso de Callem no lo fue, el mal comportamiento de Liam hacia él meses atrás tampoco lo fue, que su padre estuviera a punto de golpearlo cuando se enteró de su embarazó no lo fue, mucho menos el haber caído por las escaleras ni haber sido drogado por un supuesto maestro, ni siquiera que unos sujetos hayan irrumpido en su apartamento para asesinar a Grace y Charlie.

Nada de eso era una coincidencia porque todo estaba planeado y premeditado por una sola persona, bueno, quizá mas de una, solo que en planes iniciales no contaba con que Steve asumiera la responsabilidad de hacerse cargo de un estúpido omega embrazado, desde primeras instancias todo era para arruinar la vida de McGarrett hijo de puta Müller, siempre se trató de él pero... Daniel estaba ahí, se suponía que él sería el causante de la expulsion de Steve, se suponía que Steve al ser el jodido cobarde que siempre huía de sus problemas y responsabilidad se iba a regresar a Alemania en cuanto supiera que había embarazado a un omega.

Tanto maldito esfuerzo para que al final todo se complicara, no tuvo mas remedio que hacer lo que hizo, nada podía quedarse así cuando se enteró que Steve, "Su Steve" se había casado con ese insignificante omega. ¿¡Qué tenía el estúpido de Williams como para tener toda la atención de ese Alfa!?

-El trabajo está hecho.- Mencionó alguien tras sus espaldas.

-¿No hay nada que vincule los asesinatos conmigo?.

-No.

-¿Dejaste limpio todo el desastre?.- Preguntó.

-Algo así...

-¿Cómo que algo así?

-Un edificio en llamas para borrar evidencia ha sido lo que se nos ha ocurrido.- Mencionó aquello sin tapujos mientras encendía la Tv y buscaba las noticias locales.

-Eso... eso ha sido demasiado, incluso para mi.- Dijo muy sonriente.

-Creo que con eso bastara para que el bastardo de Steve regrese a donde pertenece.

-McGarrett entró al edificio, lo vi antes de habernos retirado.

-¡Maldito imbécil!.- Espetó con desden.-¿Y a ti como se te ocurre quedarte a mirar después de lo que has hecho?.

-Nadie nos vio.

-Mas te vale, ahora solo hay que esperar a que el idiota de Steven no salga hecho carbón como sus dos crías y la inútil de su suegra.

-Si.

-Sabes qué... necesito que le hagas una vista al omega, ya sabes, ellos te conocen, no creo que se nieguen a que lo veas.- Sonrió.- Toma, si aun sigue inconsciente dale de tomar esto.- Le pasó una ampolleta con un líquido aceitoso dentro.- Si los pollitos ya se cocieron, hay que seguir con la mamá gallina.- Mencionó antes de dar la vuelta y salir de la habitación.

Él solo siguió las ordenes. No fue difícil saber en que hospital estaba internado Danny, en el campus pudo conseguir muy fácilmente tal información, quién no se la daría a su muy preocupado amigo, muchos se acercaron a él preguntando sobre el estado de ese pobre omega.

Se encaminó al hospital lo mas rápido que pudo, si tenía suerte lo dejarían pasar, nadie podía sospechar de él, solo necesitaba unos minutos asolas con el rubio, debía obedecer y cumplir con su trabajo. Así que una vez en el hospital, se adentró a la sala en donde seguramente lo dejarían pasar, y ahí estaba, uno de los amigos de Danny, quien mejor para comenzar a actuar.

-Harry, ¿cómo sigue Danny?, me acabo de enterar.- Su voz sonaba tan preocupada que cualquiera podía creer su falso pesar.

-Hola, Anto.- Saludo al italiano diciéndole ese pequeño apodo.- Danny ya se encuentra estabale, aun sigue dormido por el efecto de lo que le haya dado ese bastardo, pero está mejor.

-¡Dios mio! Pobre rubio, ¿crees que pueda entrar a verlo unos minutos?.- Sus ojos parecían querer dejar escapar algunas lágrimas.

Harry le sonrió y asintió.

-Claro, hace poco salí de su habitación, puedes ir tu, es la cuarta puerta de ese pasillo.- Señaló.

-Gracias, Harry.- Mencionó e inició su caminata hacia la habitación.

No estaba tan lejos, así que una vez ahí, solo entró y cerró la puerta con seguro. Danny yacía en esa cama, tranquilamente dormido, sin saber que probablemente sus hijos, su mama y su Alfa estén justo ahora mas que muertos.

Antoine Ripoll se acercó a la camilla y con mucho cuidado abrió la boca del omega para dejar caer las gotas aceitosas de aquella ampolleta, debía beber cada gota para que la formula funcionara o sino su trabajo no haría efecto, solo faltaba acabar con él, Así que procedió a hacer su trabajo.

-Dulces sueños, querido Danny...






H× :)

Mein mürrischer Omega >><< McDanno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora