MARZO.
La primavera había llegado y el jodido frío poco a poco se iba disipando. Estaba feliz por ello, ¿y Sussie? Resplandecía de felicidad al ver los árboles poco a poco floreciendo.
El High Park se había convertido en nuestro santuario luego del invierno. Íbamos todas las tardes después de ambos salir de nuestros respectivos trabajos, compartíamos algunos picnics aunque esos se hicieran en verano—estaba seguro de que haríamos algunos cuantos más dentro de poco—, y disfrutábamos de la compañía del otro.
Hoy cumplíamos otro mes de habernos conocido por lo que queríamos celebrarlo al máximo, eso se traducía en muchos sándwiches y galletas hechas por Sussie bajo uno de los árboles que habíamos bautizado como nuestro.
—Billy está feliz de vernos. ¡Mira como sus ramas se mueven!
—Hay algo que se llama aire, Sussie, por eso tu amigo Billy el árbol se está moviendo—dije burlón. Sussie se había empeñado en ponerle nombre al viejo arce rojo.
—¡Pero mira sus hojas! Está tan rojito, le encanta vernos.
No quise explotar su burbuja. Sussie veía con tal emoción al arce rojo que me fue imposible romperle el corazón y decirle que el color brillante era debido a que la primavera ya había llegado.
Sussie amaba la naturaleza, ella jamás arrancaría una flor de un árbol y mucho menos mataría a un animal indefenso. De hecho, me estaba comentando que estaba considerando ser vegetariana, solo que amaba demasiado la carne y sería difícil dejarla aun cuando sabía que eran animales muertos los que estaba consumiendo.
—No sé tú, pero definitivamente mi temporada favorita es la primavera.
—Concuerdo, los colores no se comparan con nada—Pero vi sus ojos y me corregí—. Mentira, tus ojos son más bonitos que el rojo de Billy.
—¡Pero si mis ojos son horribles!
—Todos morirían por tener el color de tus ojos, Sussie—ella se sonrojó.
La verdad es que todos morirían por tener un corazón tan dulce como el de Sussie.
Comimos mientras nos lanzábamos preguntas al azar. El juego de las siete preguntas estaba en la mayoría de nuestras salidas. Gracias a ello pude aprender muchísimo sobre Sussie.
Su pecado más grande es que adora comer pescado.
Su color favorito es el rojo.
Duerme boca abajo toda la noche, a veces sus padres se han asustado pensando que la chica había amanecido muerta.
Odia comer mucha sal.
Pero ama comer mucho dulce.
El chocolate es su obsesión.
Prefiere las películas antes que las series, para ella las segundas son mucha responsabilidad.
Le gustaría tener dos hijos y medio, lo que sea que signifique eso.
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Milagro de navidad entre bolas de nieve | Festividades#1
Short StoryJhetro Cavanagh podría haberse convertido en el nuevo Grinch hace nueve años atrás, cuando perdió a su vida, su luz... a ella. Odiaba ver las luces, odiaba los pinos, odiaba los villancicos y odiaba ver a la gente irradiar de felicidad en esas época...