Capitulo 5

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Esa noche Temo y Diego se encontraban en la habitación del primero platicando mientras se iban a dormir, en ese momento entró Susana.

-Hola muchachos- los saludó.
-Hola Susy, ¿todo bien?- dijo Temo.
-Si, solo vine a echarles un ojo. ¿Cómo estuvo el viaje, Diego?
-Bien Susana- contestó Diego.

Mientras Diego platicaba sobre su viaje y que había conocido a un chico Susana desvió un momento su mirada, la cual vio algo que comenzó a preocuparle.

-Permiteme un momento Diego- dijo Susana tomando el brazo de Temo ya que tenía un moretón-. ¿Qué te pasó Temo?
-No lo sé Susanita, no lo había visto- dijo Temo observándolo.
-¿Te lastimaste? ¿O te lastimaron?
-Claro que no Susanita, apenas me dí cuenta que tengo ese moretón.
-Es verdad Susana- intervino Diego-. En toda la tarde desde que llegué Temo no tenía eso.
-Así es. Pero no te preocupes, seguramente me pegué sin darme cuenta.
-Está bien Temo, ya sabes que cualquier cosa cuentas conmigo. Los dejo para que ya se duerman.

Susana salió de la habitación y los dos jóvenes se acostaron en sus respectivas camas para dormirse. Alyster como siempre se acostó junto a Temo ya que nunca le gustaba estar lejos de él.

Susana aun no se acostaba, le preocupaba la situación de Temo por el moretón.

-¿Qué pasa Susanita?- preguntó Pancho al verla pensativa.
-Estoy un poco preocupada por Temo- dijo ella-. Hace un momento que fui a verlos ví un gran moretón en su brazo.
-¡Achis! ¿Cómo si alguien lo hubiera golpeado?
-Si, pero dice que nadie lo lastimó y a lo mejor se pegó sin darse cuenta.

Estuvieron analizando eso por unos momentos hasta que Pancho se le cruzó algo que sabía que era imposible.

-¿Tú crees que el Aristofanes lo haya lastimado?- dijo Pancho con duda.
-¡Ay no Pancho!- dijo Susana un poco asustada-. Ari es un buen muchacho y ama mucho a Temo que sería incapaz de hacerle algo así. Además, Diego dijo que en toda la tarde que los tres estuvieron juntos Temo no tenía ese moretón.
-Es cierto, el Aris es un buen muchacho que no lastimaría a mi hijo de esa manera. Perdón Susanita.
-No te preocupes Pancho. Lo mejor será dormir y olvidarnos de este tema.

La pareja se acostó a dormir tratando de olvidar la situación. Pero no contaban con que esto cada vez se iba a poner peor.

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