Mi Tanjiro

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Kanae seguía disfrutando de su estudiante, pego sus grandes pechos contra el pecho de el, llenó de labial la boca de su Tanjiro.

—Kanae Sama deténgase porfavor...

—¿Porqué mi Kamado Kun? Talvez esto te ayude a aclarar tus sentimientos.

—Ara ara Kamado Kun ¿Puedo tallar mi ropa en tu lavadero?– Con sus dedos acarició el cuerpo de Tanjiro. No se sorprendía la verdad, en los entrenamientos el terminaba bañando de sudor su ropa y aquél cuerpo bronceado tan trabajado le era muy llamativo.

—Per...

Ella le negó la palabra al silenciarlo con otro beso un poco más apasionado. Las cosas se le estaban yendo de control cuando sus manos le desabrocharon la camisa.

—Kanae Sama deténgase porfavor– Entre pequeños gemidos Tanjiro lo decía. Ella se motivó al escuchar su nombre con aquella voz tan tierna e inocente era como una droga.

—Silencio Kamado Kun nos van a escuchar– Ella terminó de desabrocharle la camisa exponiendo su cuerpo tan tonificado y musculoso, esas 5 prominentes cicatrices en su pecho eran tan apetecibles.

Por culpa de Sanemi desarrolló un fetiche por las cicatrices y Tanjiro cumplió por mucho las expectativas.

—Necesitan mucho amor y cariño– Guió sus labios a su pecho para darle pequeños y delicados besos en el área de las cicatrices aumentando los gemidos de Tanjiro.

—Porfavor ya deténgase... Kanae Sama– En sus grandes ojos carmesí un pequeño corazón se dibujó [N/A: Que raro... Siempre es al revés] sin dejar de gemir el nombre de ella motivandola aún más.

Aquel excelente momento TanjiNae terminó cuándo el timbre sonó.
Ante eso ella se bajó de Tanjiro quien permanecía en un estado aturdido, le limpió y arregló.

—Kamado Kun... Hablaremos de esto luego cuando terminen las clases– Lo llevó hasta su banco para luego abrir la puerta.

—Hola chicos– Saludo muy nerviosa y agradecida de no ser descubierta.

Todos sus alumnos llenaron el salón.

—Profesora Kanae ¿Que le pasó a su labio?– Una de sus alumnas se percató de la pequeña cortada en los labios de ella. Kanae confundida paso su dedo ahí, efectivamente un poco de sangre reposaba en su dedo.

—No es nada... Solo me mordí sin querer al comer una manzana.

Kanao; Momentos antes...

Después de retirarse con su amiga Aoi llegaron a su salón repleto de muchos estudiantes dónde destacaban un chico de cabellos rubios que peleaba con un chico de rostro un tanto afeminado y hasta atrás un chico con una gran cicatriz en su mejilla dibujando. Zenitsu, Inosuke y Genya sus amigos y compañeros más cercanos.

—¡Podrían dejar de pelear porfavor!– Exclamó muy molesta Aoi sin importar que llamara la atención de toda la clase.

—¡Me llamó Pikachu sin entrenador!– Lo dicho hizo que todos empezarán a reírse irritando aún más el temperamento de Zenitsu. —¡Maldito Pumba!–

—¡Es la verdad pelo oxigenado!– A pesar de que Zenitsu le ahorcaba Inosuke no mostró interés en arrepentirse.

—¡Ya cállense!– Genya que era el único que se mantenía tranquilo terminó irritado ¿Porqué no podían transferirlo a otro salón?

—Guarden silencio– Un hombre joven pero algo bajito de ojos de diferentes colores entró al salón. —No me agradan y yo se que ustedes no les agrado así que si terminamos rápido mejor, pasen a dejar al pupitre la tarea mientras copian este cuestionario que transcribire a la pizarra.

My Darling Hunter: Fate RebuildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora