ADAPTACIÓN | 𝐁𝐀𝐍𝐂𝐎 𝐃𝐄 𝐄𝐒𝐏𝐄𝐑𝐌𝐀 | 𝐭𝐚𝐞𝐠𝐠𝐮𝐤.

Capítulo 30.

—Está todo preparado señor—. El doctor miró a la pareja. —Lo tenemos agenda do dentro de tres semanas pero en su condición es muy probable que se pueda adelantar, su hijo está más activo ahora, ya no quiere estar ahí adentro.

SeokJin se rio con ternura, cualquier cosa podía pasar, buena o mala pero estaba feliz, muy feliz, conocería a su bebé y después podría descansar, sentía que así sería, pues claro, el vientre ya no le pesaría, los pies ya no le dolerían y sus pantorrillas se dejarían de acalambrar en las madrugadas. Miró como YoonGi sonreía un poco para ponerse de pie y tomar una toalla de papel que el hombre le entregaba. Lo miró limpiar su gran vientre, retirando el gel azul que anteriormente había sido de ayuda para poder ver a su bebé por la máquina, le regaló una sonrisa y le agradeció cuando terminó.

—Es hora de ir a casa, amor—. Susurró antes de besar su frente.

El embarazado asintió, YoonGi lo ayudó a bajar de la camilla para ahora regresar con el doctor, terminar de mirar unas últimas cosas y ahora partir con destino a casa.

La casa olía increíble, pero les hacía sentir mal, HoSeok estaba con ellos porque los quería ayudar pero parecía más su empleado que amigo y odiaban eso, no debería de ser así, el menor solo debería de estar esperándolos acostado o leyendo algún libro, no limpiando y cocinando.

—Bienvenidos Hyungs ¿Cómo estuvo la consulta?—. Se atrevió a preguntar ya que ambos estaban sonrientes.

—Excelente, el doctor me dio unas vitaminas y algunas cremas, también nos dio una fecha exacta para el nacimiento de nuestro bebé, pero también dijo que no nos fiemos, Min Yoonie ya quiere nacer.

HoSeok sonrió feliz, abrazó a ambos chicos, los quería demasiado, daría su vida por ellos si fuera necesario, incluso prometía cuidar de YoonGi, de SeokJin y del pequeño Yoonie como el embarazado le llamaba, si era necesario.

Pareció recordar la comida y rápidamente tomó la mano de ambos chicos para llevarlos hasta el comedor, la comida ya estaba servida y lista para ser disfrutada, no perdieron demasiado tiempo y comenzaron a comer.

—¿Qué pasó con TaeHyung?—. YoonGi preguntó mientras lo miraba.

Hobi suspiró, ese era uno de esos momentos en los que se sentía pequeño, cuando se tocaba el tema del moreno, YoonGi y SeokJin cambiaban su actitud, no estaban en contra pero tampoco estaban a favor de que no le diera una respuesta al moreno si ya no quería nada con él.

—Fui al hospital... Si, TaeHyung está en la bitácora, se hizo una muestra de fertilidad... Pedí los resultados pero me dijeron que no me los podían dar porque era privado y no sé qué más— Suspiró. —No sé qué me esconde pero no voy a parar hasta encontrarlo.

—¿Y has pensado en preguntarle? Si no te dijo es porque algo sucedió, tal vez tiene miedo de que te enteres del resultado o que te sientas mal, por si él fuera fértil, ya lo sabes cariño, TaeHyung odia tocar ese tema contigo, por tu condición y por todo el dolor que te trae—. SeokJin tomó su mano, entrelazado sus dedos con los de HoSeok mientras lo miraba con pena.

Y HoSeok terminó por romperse, odiaba que TaeHyung sea tan malditamente lindo y que le escondiera ese tipo de cosas buenas para que no se sintiera mal, ahora más que nunca debía de alejarse de él, tal vez irse a Busan con sus padres, o a Daegu, siempre quiso ir a Daegu y tal vez podría comenzar su vida desde cero, incluso podría ir con un doctor y comenzar algún tratamiento por si aún tenía la mínima posibilidad de poder tener sus propios bebés en un futuro.

YoonGi se puso de pie para caminar hasta su lugar, lo alejó de la mesa, colocándose a su nivel, HoSeok lo miró borroso debido a las lágrimas que inundaban sus lindos ojos.

—Tienes que terminar con él si eso es lo que deseas, si no es así, pídele disculpas y comiencen de nuevo, sabes que odiamos que estés tan triste, piensas que todo se acabó para ti pero tal vez la vida te tiene preparado algo magnífico, recuerda que te tropezarás mil veces antes de obtener la paz y la felicidad que tanto te mereces—. Acarició sus cabellos con cariño.

YoonGi y SeokJin se habían encariñando demasiado de ese chico, eran como una pequeña familia y en algunos momentos tomaban el papel de padres pues HoSeok era más joven y bueno, habían cosas en su vida que eran muy tristes pero ellos estaban ahí, para darles mimos y todo el cariño que el menor necesitaba.

El pelinegro se volvió a poner de pie, regalándole un besito en su mano y otro en su frente. Los ojitos de Jung brillaron con felicidad, amaba tener a esos chicos en su vida.

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JungKook acarició los cabellos de TaeHyung, este se había quedado dormido en sus piernas mientras miraban un dibujito animado en la televisión, últimamente estaba más tranquilo, había despertado de buen humor y eso era un avance.

Sonrió al mirarlo dormir tan plácidamente, sus cabellos suaves se enredaban en sus dedos ligeramente pero después se volvían a soltar, esperando por una nueva caricia.

Su bebé se movió, sonrió mientras miraba su vientre, podía sentir una presión en dos diferentes puntos, quizá su bebé estaba despertando y se estaba estirando.

TaeHyung se movió, susurrando algunas cosas que hicieron su corazón palpitar fuerte.

—Aunque no sea mío, solo déjame quedarme con ustedes...—. Susurró. —Eres demasiado lindo para mí... ¿Podría probar tus labios? Se miran tan suaves... ¿Se sentirán como nubes de algodón?—. Sonrió de lado.

¿Qué estaba pasando? ¿Por qué sentía que TaeHyung estaba soñando con él? Odió a su corazón, porque comenzó a palpitar fuerte, por un momento no le pareció mala la idea besarlo y aclarar sus dudas ¿Pero qué? No, no podía pensar en eso aunque admitía que a él le gustaría besar las mejillas del moreno así que estaban a mano.

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