Capítulo 29.

456 58 4
                                    

—Doctor Lee, le prometo que haré todo lo posible para que JungKook desaparezca.

—Muy bien Kyung, ya sabes que hacer.

El chico asintió para salir del consultorio y del hospital.

-----------------------

Cinco meses, el tiempo pasaba rápido, muy rápido, ahora estaba cumpliendo sus cinco meses y estaba demasiado feliz, cada día era uno menos para conocer a su bebé.

Su cita con el doctor Lee ya estaba agenda da, la próxima semana iría y si todo salía bien, sabría el sexo de su bebé.

Pero no todo era alegría y felicidad, TaeHyung prácticamente vivía en su casa, las cosas con HoSeok no estaban para nada bien, se podría decir que el moreno ya ni siquiera sabía que eran, el mayor no contestaba sus mensajes y mucho menos sus llamadas, se estaba deprimiendo y los únicos que lo hacían olvidarse por un momento de todo, era Seokjin y su bebé.

El menor hacía todo lo posible por hacerlo feliz y olvidarse del tema pero TaeHyung no podía salir a delante si ni siquiera sabía si seguían juntos, tenía que buscar a HoSeok hablar con él. En casa nunca estaba y cuando iba al trabajo, ya se había ido con YoonGi en su auto para pasar por SeokJin al restaurante de su familia.

—¿Vendrás conmigo?—. Preguntó bajito mientras se acercaba todo lo que su vientre le permitía.

Tae elevó la mirada para mirarlo, sus rostros estaban un poco cerca pero no le incomodaba, de hecho, le gustaba tenerlo tan cerca, podía notar la hermosa piel de su rostro y sus ojos brillaban aún más estando demasiado cerca.

—Sí, te prometí que iríamos juntos y eso haremos— Sonrió un poco.

—Muchas gracias, Hyung—. Sonrió.

—Si ves a HoSeok... ¿Puedes decirle que conteste mis mensajes?— Su voz sonó débil.

JungKook suspiró, todo ese tiempo lo estuvo haciendo, HoSeok simplemente se negaba o cambiaba el tema, él tampoco entendía que le sucedía y le dolía ver como ambos se destruían porque Hobi tampoco estaba mejor pero a comparación de TaeHyung, él si lograba una perfecta sonrisa aun cuando de sus ojitos bajaban lágrimas de dolor al mirar las llamadas del moreno.

Pero no podía hacer nada por ellos y eso también le dolía, sabía cuándo estaban sufriendo, había pasado por varias relaciones fallidas, él más que nadie conocía el dolor y ese fuerte impacto que te quitaba el aliento.

El mayor lo miró, esbozó una sonrisa para el moreno y después asintió. No se lo merecían, ninguno de los dos.

—Lo haré.

El moreno le sonrió agradecido, su sonrisa cuadrada se hizo notar, pero el brillo de sus ojos ya no estaba, dejó de estarlo desde hace mucho.

—Iré a casa... Me siento incómodo... Siento que estoy invadiendo tu espacio...— Dijo bajo.

—No lo haces, nos gusta que estés con nosotros, pero si te quieres ir... Bien pero no creas que te dejaré solo, cuando te vayas iré contigo, no pienso dejarte en ningún momento y menos ahora.

TaeHyung asintió sonriente. Se levantó del sillón para envolver al mayor en sus brazos, todo lo que el gran vientre le permitía.

—Lo siento, es muy grande, mi bebé creció mucho—. Se rio apenado. —Pero es normal, tendrás que acostumbrarte, normalmente amo dar abrazos y mi bebé seguirá creciendo, prepárate.

TaeHyung se rio, JungKook marcó en su lista mental un nuevo punto para él, nuevamente lo había hecho reír tan genuinamente y lindo, justo como era Taehyung.

—Lo sé, crecerá mucho y aún tiene cinco meses, imagínate cuando cumpla los ocho.

—El doctor dijo que podía crecer demasiado o no, también dependía del sexo, al parecer los niños ocupan más lugar que las niñas... Creo que un futuro futbolista descansa en su casita, no ha dejado de patear... Le gusta tú voz, tal vez por eso se mueve mucho, pero si no es así, será muy comunicativo, le gusta escuchar voces y todo lo que decimos.

—Sea niño o niña, su padre postizo estará ahí para llenarlo de besitos y abrazos.

El menor lo miró alegre, le encantaba muchísimo ese lado de TaeHyung, sabía que no debería de sentirlo así, no era como cuando JiMin le decía sobrino, no causaba la misma felicidad que TaeHyung le causaba y tal vez no quería seguir desarrollando ese sentimiento.

—¿Aún no sabes nada de YoonGi y SeokJin?—. TaeHyung preguntó.

—HoSeok... Me contó que estaba en la recta final, dijo algo de que esta o la próxima semana SeokJin cumpliría los nueve meses.

—Sabes, hace mucho no hablo con SeokJin, me preocupa, he ido dos veces al restaurante de su familia y está ahí pero es diferente... Él está pero la alegría que lo caracteriza no.— Suspiró. —Espero que sea por el cansancio del embarazo y no porque las cosas están mal con YoonGi o por culpa de HoSeok.

—No creo que sea culpa de HoSeok, al contrario, SeokJin y Hobi se han vuelto inseparables, tal vez se trate de cansancio, nueve meses es cansado, incluso yo ya lo estoy y apenas tengo cinco.

—Quiero pensar que es por eso...

JungKook asintió, iba a volver a hablar cuando llamaron a la puerta. Miró al moreno una última vez para después caminar hasta la entrada.

Kyung estaba ahí, mantenía un ramo de flores junto con una caja de chocolates de la mejor marca, exclusivamente para JungKook.

El mayor sonrió, nunca sabía que esperarse de Kyung, siempre lo sorprendía con algo nuevo.

—Felices cinco meses al padre más hermoso del mundo— Se dirigió a sus labios.

—¿Quién es, Kookie?—. TaeHyung preguntó desde la sala.

JungKook movió su rostro, logrando que el beso quedara en su mejilla. Tah sonrió avergonzado.

—Es Kyung—. Le respondió.

Escuchó una respuesta sin importancia por parte del menor y regresó su mirada al chico que tenía enfrente

—Ustedes dos pasan más tiempo juntos... ¿Por qué?

—¿Tah Kyung está celoso?—. Se rio con ternura.

—No me cambies el tema y sí, estoy celoso.

—Pues no tienes por qué estarlo, sabes que no somos nada.

—Lo sé y odio que no seamos nada, sabes que me gustas y que si me dieras el permiso, me gustaría que seamos nosotros tres, tu bebé, yo y tú—. Sonrió.

—Kyu... Es difícil para mí...—. Mordió su labio. —No sé si quiera a alguien más que no seamos mi bebé y yo, te lo dije desde la primera vez que nos juntamos...—. Suspiró.

—Lo entiendo... Y está bien, te voy a conquistar— Sonrió. —Ahora estaré fuera de Seúl, no sé cuánto tarde pero en cuanto regrese, te conquistare y entonces seremos nosotros tres.

JungKook lo miró, no comprendía como había gente que aún se interesaba en él y le gustaba, claro que sí pero en su corazón no sentía nada por ese chico, claro, lo quería, se había encariñando y habían pasado buenos momentos pero nada más los unía que su bebé. No sentía lo mismo como cuando miraba a...

Epxphany_25

ADAPTACIÓN | 𝐁𝐀𝐍𝐂𝐎 𝐃𝐄 𝐄𝐒𝐏𝐄𝐑𝐌𝐀 | 𝐭𝐚𝐞𝐠𝐠𝐮𝐤.Where stories live. Discover now