ADAPTACIÓN | 𝐁𝐀𝐍𝐂𝐎 𝐃𝐄 𝐄𝐒𝐏𝐄𝐑𝐌𝐀 | 𝐭𝐚𝐞𝐠𝐠𝐮𝐤.

Capítulo 36.

JungKook se lanzó a sus brazos en cuanto lo miró llegar y apartar a la gente de su alrededor. TaeHyung suspiró cuando lo tuvo en brazos, besó su mejilla varias veces para tratar de calmarlo.

—¿Qué sucede?—. Preguntó.

—Mi bebé, creo que algo sucede con mi bebé—. Dijo llorando.

—¿Te duele? Llámale a tu doctor, estaremos en el hospital en cinco minutos.

Los empleados los dejaron pasar mientras los miraban salir. TaeHyung ayudó al mayor a entrar al auto mientras este temblaba y lloraba, tenía miedo, miedo a que algo le esté sucediendo a su bebé y que sea muy tarde para hacer algo.

Le colocó el cinturón de seguridad para pronto correr al lado del piloto y poner el auto en marcha. Se concentró en no chocar y en manejar los más rápido posible mientras escuchaba lejanas las palabras de JungKook que le decía a su doctor por el teléfono.

En cuanto llegaron, las enfermeras ya los esperaban para llevar a JungKook al consultorio, TaeHyung se quedó ahí, llamando a SeokJin, YoonGi, NamJoon y JiMin, ellos estuvieron en el hospital tan rápido como TaeHyung terminó la llamada.

—Señor Kim—. Una enfermera habló.

Los demás chicos miraron mientras TaeHyung se acercaba a ella.

—El señor JungKook lo necesita ahí adentro.

—¿A mí...?

—Si, a usted, no para de temblar y dice que quiere que usted este con él antes de que el doctor Lee proceda a hacerle el ultrasonido.

TaeHyung asintió, le dio una última mirada a los otros chicos para seguir a la enfermera. Su cuerpo vibró debido al frío que comenzaba a tener por los nervios.

Entró a la habitación, encontrándose con el doctor Lee encendiendo una pantalla y otras máquinas, JungKook paró en él para casi suplicándole con la mirada que se acercara. El moreno obedeció, llegó hasta el mayor para tomar su mano que aún seguía temblando.

—Bienvenido—. Le dijo.

—Gracias doctor—. Hizo reverencia.

—Bien, procederé a colocarte el gel, JungKook, ya sabes, al principio lo sentirás frío pero después pasará, tenemos que ver a tu bebé y que todo esté bien—. Lo miró.

JungKook asintió a punto de llorar. El doctor hizo lo que dijo, TaeHyung lo miraba todo atónito, nunca había estado en esa situación.

Su mano no soltaba la de JungKook, por ratos repartía pequeños besos para tratar de tranquilizarlo y tranquilizar a su propio corazón que no había parado de latir fuerte.

El doctor al fin colocó la máquina encima del vientre de JungKook, imágenes en negro y blanco comenzaron a aparecer en la pantalla, TaeHyung no podía mirar nada, no le encontraba una forma, eso no parecía un bebé, sólo manchas de colores oscuros.

Sus ojos se abrieron grandes cuando el doctor comenzó a darle forma a la imagen, sintió su corazón paralizarse por un momento en cuanto lo entendió, no podía ser cierto... Estaba mirando por primera vez al bebé de JungKook.

—¿Qué fue lo que sentiste, JungKook? El bebé parece estar completamente bien.

—Lo sentí moverse pero después fue casi como un tirón, fue extraño, sentí mucho movimiento y me asusté porque es muy pequeño como para moverse como si tuviera nueve meses.

—Tranquilo JungKook, aparentemente tu bebé está bien...—. El doctor dejó de hablar en cuanto movió el aparato a un costado del vientre de JungKook.

TaeHyung y JungKook lo miraron, rápidamente comprendieron que no todo estaba tan bien como él decía. Las ganas de llorar aumentaron, JungKook lloró fuerte al pensar que algo estaba mal con su bebé.

—Este bebé es bueno guardando secretos...—. Sonrió. —JungKook, notas eso de ahí—. Apuntó la pantalla.

Se lograba mirar su bebé pero también había algo más, algo que no supo como interpretar.

—Felicidades JungKook, son gemelos.

Y TaeHyung y JungKook abrieron la boca grande. ¿Gemelos? ¿Dos bebés? TaeHyung casi se desmaya mientras JungKook lloraba de la felicidad. Ahora comprendía todo, los movimientos en diferentes puntos de su vientre, incluso lo que sintió en el trabajo, eran sus bebés intentando acomodarse.

—¿D-dos?—. Lo miró incrédulo. —¿Podemos saber su sexo?—. Sus manos temblaban pero sonreía.

—Podemos saber el sexo, de hecho, lo supe desde el primer momento, pero mira, recién nos dimos cuenta que son dos, creo que tendrás que esperar dos meses más para poder saber el segundo sexo y confirmar si son gemelos o mellizos...

—B-bien, quiero saber que es, estoy seguro que si este bebé es niña, el otro bebé también lo será ¿No es así?

—Si, puede ser pero no podemos descartar que puedan ser mellizos... Sabes, es más probable que sean mellizos, aún no se sabe porqué, pero la mayoría de los hombres suelen tener partes buenas y malas del embarazo, la mala es que corren mucho peligro a la hora del parto o incluso en el embarazo pero lo bueno es que casi siempre son dos o incluso tres, claro el sexo varía pero tampoco podemos descartar que sean mellizos—. Sonrió. —Bueno ¿Listos?

JungKook asintió rápidamente después de guardar la información anterior, mientras TaeHyung aún seguía impactado.

—Es un varón—. Sonrió. —Te mostraré.

El doctor comenzó a mover la máquina por diferentes puntos, explicándole a JungKook porque su bebé era niño, este miraba todo con suma felicidad, ahora no sólo amaba a uno, desde que miró al segundo, su corazón latio rápido por ese bebé también, los amaba, amaba a sus bebés.

—¿Puedo escuchar sus corazones?

—Buena pregunta JungKook, tenemos que escuchar como está el latido de tus bebés.

Pronto movió algo en la máquina y un sonido llegó a los oídos de todos en el consultorio, eso que sonaba como tambores, era el corazón de sus bebés, no sólo de uno, eran los dos, latiendo casi al mismo ritmo. TaeHyung salió de su trance cuando lo escuchó, las lágrimas bajaron por sus mejillas. No se lo podía creer, no podía creer nada de eso.

—Felicidades JungKook, tus bebés tienen un buen ritmo cardíaco, no presentan complicaciones, de hecho, están muy cerquita que no los logramos mirar desde las primeras consultas pero en cuanto van creciendo y tu vientre también, ellos lo harán, hasta obtener su propio espacio ahí adentro.

—Eso es bueno, gracias doctor—. Sonrió.

Este comenzó a retirar el gel para después apagar sus máquinas, La mano de JungKook aún seguía entrelazada con la de TaeHyung.

—Iré por una copia de la imagen de tus bebés y también por una pista del audio del latido de su corazón.

Ambos chicos asintieron mientras lo miraban salir del consultorio. JungKook terminó de retirar las pequeñas manchas de gel para ahora sentarse con ayuda del moreno. Sus miradas se encontraron por unos segundos, se sonrieron para abrazarse.

—Son dos Tae, tendré gemelos—. Sonrió con lágrimas en los ojos.

Y TaeHyung también lloró mientras lo refugiaba en su pecho, se sentía feliz y no comprendía el porque, unas inmensas ganas de besarlo se apoderaron de él pero estaba mal, solo era por la alegría del momento, sentía que esos bebés eran suyos cuando no era así, tenía que obligar a su mente y corazón a no pensar en esas cosas.

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