ADAPTACIÓN | 𝐁𝐀𝐍𝐂𝐎 𝐃𝐄 𝐄𝐒𝐏𝐄𝐑𝐌𝐀 | 𝐭𝐚𝐞𝐠𝐠𝐮𝐤.

Capítulo 42.

El aire fresco entró por su nariz para después dejarlo salir, no había estado tantos días fuera de Seúl pero si que lo había extrañado. Suspiró feliz, tomó correctamente su equipaje para seguir caminando hasta la salida.

NamJoon y JiMin ya lo esperaban. HoSeok corrió hasta ellos en cuanto los encontró. JiMin y él se dieron un gran abrazo para después suceder lo mismo con NamJoon. Era verdad que no habían tratado tanto en el pasado, sólo algunas veces pero sabían que podrían ser más cercanos en el futuro.

—¡Que guapo estás!—. JiMin soltó alegre.

—Gracias, creo que algo en mí cambió, estoy comenzando a aceptarme y a dejarme brillar—. Sonrió grande mientras apartaba unos mechones rojizos de sus ojos.

—Ese color te queda genial—. NamJoon dijo.

—¿Ustedes creen? Siempre quise tenerlo de este color pero nunca tuve el valor, hasta ahora.

La pareja asintió alegre, HoSeok pudo sentir que lo que ellos decían era verdad, ahora estaba feliz y más porque dentro de muy poco podría ver a sus Hyungs y tal vez poder conocer al pequeño Min.

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—Muchas gracias Tae, se que ya te lo dije muchas veces pero la cena estuvo deliciosa, no se quién lo disfruto más, si mis bebés o yo.

—Yo creo que los tres—. Sonrió.

—Creo lo mismo... Por cierto, hoy NamJoon y JiMin nos invitaron a un almuerzo en su casa, dicen que tienen una sorpresa que darnos, yo digo que nos dirán que serán padres.

—Sería algo lindo, ellos dos se ven muy bien juntos, hacen una linda pareja.

—Nosotros también podríamos serlo—. Dijo.

TaeHyung aparcó el auto para mirar al mayor con las mejillas sonrojadas. ¿Él en serio dijo eso?

—JungKook...

—Si, NamJoon es muy competitivo, cuando le decía sobre mis antiguos novios, él también me contaba sobre los suyos, es algo así como una competencia pero sin que lo sea... Como una broma—. Se rio un poco después de encontrar las palabras correctas para especificar lo que acababa de decir.

La cuestión era que TaeHyung no quería bromear con eso, quería que fuera real.

—Creo que...

—Gracias por traerme, Tae—. Se giró para besar su mejilla.

Bajó del auto dejando a un muy confundido moreno. Lo miró entrar al local con toda la seguridad y felicidad, diablos, JungKook era hermoso.

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—¿Le avisaron a Yoonie y SeokJin Hyung?—. Preguntó entusiasmado.

—Lo hicimos, se pusieron súper felices pero dicen que no saben cuanto tiempo se quedarán, al parecer muy pronto su bebé nacerá, SeokJin dice que siente su vientre duro y a su bebé más activo, incluso su doctor le dijo que es porque se está terminando de acomodar para al fin comenzar a patear y llegar al mundo.

—¡Estoy entusiasmado! Le prometí a Hyung estar aquí para el nacimiento de su bebé, lo quiero conocer ya—. Estaba demasiado feliz.

—Al parecer pronto será, todos lo conoceremos—. NamJoon sonrió.

JiMin llegó con algunos alimentos para ofrecerle al rubio y pasar el rato mientras llegaba la hora de la sorpresa.

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—¿En serio te sientes bien, amor?— YoonGi preguntó mientras miraba a su pareja.

SeokJin asintió sonriente, se sentó en la cama tanto como su gran vientre se lo permitió, para tomar las manos de su novio.

—Me siento genial, sólo nos quedan muy poquitos días para conocer a nuestro bebé y estoy muy feliz—. Sonrió.

YoonGi se acercó para besar su frente con cariño, amaba la luz que SeokJin desprendía.

—Yoon... ¿A quién crees que se parezca?—. Preguntó en los brazos del pálido.

—Ojalá a ti...—. Sonrió. —Tú eres como un sol que llega para iluminar mis días oscuros, estoy seguro que nuestro bebé también lo será y por eso quiero que se parezca a ti.

—Yo digo que se parecerá a ti, me daría mucha ternura que nuestro bebé fuera tan blanquito como tú, sería lindo, incluso con su carita de Yoonie bebé ¿Te imaginas?

—Sabes... Sólo espero que todo salga bien—. Besó la mano de su pareja mientras lo miraba directamente a los ojos.

SeokJin sonrió para acercarse a sus labios. En esos momentos lo único que podía calmar a YoonGi eran sus labios.

Claro que SeokJin también estaba nervioso y tenía miedo de que algo saliera mal pero tenía la esperanza de que su bebé nacerá bien y que tampoco presentaría ninguna complicación.

YoonGi lo refugió en sus brazos una vez más mientras cantaba alguna canción, admitía que no era tan bueno para cantar pero lo hacía con amor y cariño que era lo que importaba.

SeokJin buscó más de su calor corporal, su bebé seguía moviendose, pronto, muy pronto lo conocerían.

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—Gracias por venir por mí, Tae—. Besó su mejilla.

TaeHyung sonrió para él, para tomar su mano y llevarlo al auto, lo ayudó a subir, le colocó el cinturón de seguridad y pronto corrió a subirse del otro lado.

El auto se puso en marcha con destino a la casa del menor, JungKook le había pedido ir a casa para tomar una ducha y luego ir a casa de sus menores para el almuerzo y la sorpresa.

Estaba entusiasmado, varias cosas le llegaban a la mente, desde que serían padres hasta que se casarían pero nunca lograba acertar, necesitaba saberlo ya, antes de desesperarse.

Sí, JungKook era una persona que se desesperada rápido. En ese momento se encontraba sobando su vientre lentamente mientras mordía su labio, estaba perdido en sus pensamientos que no notó en que momento llegaron.

—JungKook— Le llamó.

JungKook seguía pensando, necesitaba saber de que se trataba.

—JungKookie—. Volvió a decir.

Pero nada, JungKook seguía sin atender.

—Hermoso... JungKookie, amor...

Se quedó en silencio, JungKook también. Taehyung tembló, seguramente lo había escuchado, era un idiota ¿Cómo le pudo decir eso?

Pero JungKook aún seguía pensando. El moreno se armó de valor para tomar una de sus manos y besarla con cariño. El menor pareció salir de sus pensamientos para mirarlo sonrojado.

TaeHyung también se sonrojó mientras lo soltaba lentamente. JungKook tenía otros planes. Tomó la mano del moreno para entrelazar sus dedos con los de él. TaeHyung lo miró sorprendido pero a la vez realmente feliz.

—¿Decías algo?—. Preguntó bajito mientras jugaba con sus dedos.

—Ya llegamos...—. Intentó no sonar emocionado.

JungKook miró y sí, estaban en casa. Lentamente separó sus manos para ahora bajar del auto seguido del moreno.

—Esperame aquí, cariño—. Le sonrió.

TaeHyung se quedó procesando lo que había pasado. JungKook le había dicho cariño, había entrelazado sus manos... Quería gritar de la emoción pero claro, sólo lo asustaría y parecería un loco enfrente de su bonito mayor, lo mejor sería esperar para cuando este en casa solo y poder gritar todo lo que pudiera.

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