ADAPTACIÓN | 𝐁𝐀𝐍𝐂𝐎 𝐃𝐄 𝐄𝐒𝐏𝐄𝐑𝐌𝐀 | 𝐭𝐚𝐞𝐠𝐠𝐮𝐤.

Capítulo 35.

—Lo encontré, es un buen lugar para esconder a JungKook y a su bebé, nadie los encontrará aquí.

—Muy bien Kyung, ahora quiero que sigas vigilando a JungKook, se nos acaba el tiempo, dentro de cuatro meses más el bebé nacerá y si no nos movemos ahora, estamos perdidos.

—Lo entiendo doctor Lee, pero ahora necesito que me de información de mi hijo...

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—¿Cómo te sientes Hyung?—. TaeHyung preguntó mientras miraba al menor.

JungKook estaba perdido en sus pensamientos, no comía, solo jugaba con sus palillos y con un grano de arroz.

—Estoy bien—. Dijo, saliendo de su pequeña burbuja donde solo había podido pensar en lo que había sucedido el día anterior.

HoSeok se había ido, ni siquiera había pasado un día y ya lo extrañaba, lo bueno era que había quedado con el menor para hacer una llamada en cuanto saliera del trabajo.

—¿Y tú?—. Sus orbes se posaron en las de TaeHyung.

—Puedo manejarlo—. Suspiró. —HoSeok ha sido una persona importante en mi vida pero tengo que aprender a soltar, lo dejaré ir, se que posteriormente dejará de doler—. Sonrió débil.

Y JungKook se sintió orgulloso de él, TaeHyung era tan maduro y sabio, lo apoyaría siempre, a ambos, hasta que sus corazones estén del todo curados.

—¿Por qué no has comido nada? El desayuno es el alimento más importante del día y más cuando estás en cinta—. La señora Kim llegó con una gran sonrisa a la mesa de los chicos.

—Lo siento, me quedé pensando en muchas cosas, pero descuide, no me iré de aquí hasta que mi bebé no esté satisfecho—. Sonrió.

—Me parece excelente—. Les dijo. —Jin, amor, sal de esa caja registradora y ven a desayunar con tus amigos.

SeokJin elevó la mirada en cuanto escuchó que su madre lo llamaba. Lo pensó por un momento pero después sonrió alegre, no había podido desayunar antes con YoonGi, así que le prometió a su hambriento bebé que comerían en el restaurante pero de solo llegar, los clientes llegaron y prefería sacar las cuentas de todos para mantenerse más organizado, entonces no había podido desayunar y ya llevaba treinta minutos en el lugar.

El embarazado dejó su calculadora y su lápiz para ponerse de pie con mucho cuidado, su gran vientre le pesaba demasiado, estaba en la recta final y tenía miedo, sabía que en cualquier momento su bebé podría llegar al mundo, así que evitaba hacer mucho esfuerzo.

—Toma lugar bebé, enseguida te traeré tu platillo favorito, caldo de pollo con espagueti—. Sonrió para su hijo. —Y se me olvida algo...

—Y para beber un Sprite—. Sonrió.

La mujer se rio divertida para dejar un beso en la frente de su hijo, se despidió de los chicos y regresó a la cocina. SeokJin tomó lugar en la mesa mientras sonreía.

—Hace mucho tiempo que no te veía— TaeHyung habló. —Te olvidas de tu mejor amigo.

El mayor se rio un poco para ahora negar.

—El embarazo no es fácil hermano—. Suspiró. —JungKook me entiende. —Miró al nombrado quién asintió de acuerdo con aquello. —Estoy demasiado feliz con esta oportunidad que la vida me dio, porque a pesar de que ahora se que es estar embarazado, me gustaría tener más bebés en el futuro... Soy padre primerizo, al igual que YoonGi, ambos estamos muy asustados, prefiero quedarme en casa a descansar mis hinchados pies a salir y estar expuesto a que me ocurra un accidente y el bebé nazca antes de su fecha... Sabes que nunca me alejare de ti, porque te amo, eres mi mejor amigo, mi hermano, mi cómplice...—. Sonrió.

TaeHyung sonrió mientras limpiaba la lágrima que baja por su mejilla, se movió en su silla para llegar al embarazado y abrazarlo fuertemente. Lo amaba, casi habían crecido juntos, TaeHyung era hijo único y siempre quiso tener otro hermano, cuando SeokJin se mudó junto a su casa, fue como lo mejor que le pudo pasar a sus a penas seis años, desde ese entonces ellos dos fueron inseparables, siempre estuvieron antes que las relaciones amorosas, cuando uno estaba por tirar la toalla, el otro estaba ahí, para tomar su brazo y colocarlo en su hombro, para ahora ambos caminar hacia adelante sin detenerse ni mirar a atrás. Su relación era especial y pasara lo que pasara, SeokJin siempre seguiría siendo su hermano, ni porque ahora había formado su propia familia lo dejaría de ser.

JungKook los miró feliz pero con lágrimas nublado sus ojos, esos chicos eran tan lindos, el amor fraternal se sentía por todos lados. Su bebé se removió y sonrió para ahora acariciar esa zona sin dejar esa felicidad de lado.

—Perdón JungKook, estamos muy tristes hoy—. Se rio limpiando sus lágrimas.

El moreno se rio un poco mientras asentía ante lo antes dicho por su mejor amigo.

Después de eso la comida del embarazado llegó, los tres chicos se dispusieron a comer mientras se sumergían en una gran charla.

Tiempo desde un apresurado YoonGi llegó al restaurante, preocupado por su novio y bebé que no habían podido desayunar con ellos, se alegró cuando lo miró riendo y siendo el encantador que era junto a sus amigos, también porque ya había comido, ahora se sentía menos mal. SeokJin lo recibió con un gran abrazo y un beso en su mejilla, estaba feliz de ver a su pareja.

TaeHyung y JungKook terminaron sus postres para pedir la cuenta, pagar, despedirse de la señora Kim y de los novios.

Ambos chicos salieron del lugar, TaeHyung dejó al menor en su trabajo para después retirarse al suyo. Estuvo tan concentrado en lo que hacía, ni siquiera había visto la hora hasta que una llamada llegó a su celular. Era JungKook, faltaba una hora para que saliera del trabajo así que contestó preocupado, el mayor nunca le llamaría y menos si estaba en el trabajo.

—Tae...

Lo escuchó asustado y él también se asustó.

—Ven por mi, por favor... No se que está mal, ven por favor, tengo mucho miedo.

Lo escuchó llorar y eso encendió una luz roja en su cabeza. Rápidamente se puso de pie mientras salía de su estudio para conducir de camino a la pastelería. En ningún momento colgó la llamada, tenía miedo de que algo le pasara al mayor.

En cuanto llegó, pudo visualizar a los empleados del local al rededor de alguien, su miedo fue tanto ahora, corrió dentro del local para buscar al embarazado, tenía miedo.

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