"La flor que florece en la adversidad es la más rara y hermosa de todas".
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- El momento en el que encuentres el coraje para dar tu vida por alguien, será el momento en el que finalmente comprendas el amor...
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Los mechones de su cabello se balanceaban al ritmo de la fresca brisa que rondaba los alrededores un pequeño jadeo se escapó de su boca, una mezcla entre emoción y adrenalina.
Fuertes estruendos se escuchaban en lo profundo del inmenso bosque donde dos jóvenes se encontraban entrenando sus habilidades con una pequeña lucha entre espadas.
Ambos se miran con una mirada amenazante esperando a que uno de ellos sea el primero en atacar.
Se encuentran muy cansados cualquier movimiento en falso hará que uno de ellos se convierta en el perdedor.
El primero en tomar la iniciativa es el joven príncipe espadachín el cuál se abalanza contra la albina que logra bloquear la primera estocada ambos chocan espadas forcejeando el uno contra el otro en un descuido la joven pierde el equilibrio y cae al suelo quedando el castaño como vencedor.
- No es justo perdí porque ya estoy muy cansada - dice aún en el suelo.
- Claro que no gane justamente no seas una mala perdedora - responde extendiendo la mano para que se pueda levantar.
La albina se pone de pie limpiándose el polvo de la ropa no sin antes agradecerle a su amigo por ayudarla.
- Arturo podemos descansar por favor llevamos toda la mañana practicando - dice derritiendo su espada que era echa de hielo.
- De acuerdo solo porque has mejorado mucho - accede sentándose sobre una roca.
- Gracias no sabes cuánto te lo agradezco - suspira cansada.
- No te alegres solo serán díez minutos aún no eres buena guardando el equilibrio.
- Pero estoy muy cansada no podemos dejarlo para mañana - propone acostándose sobre el césped.
- Aún eres débil no puedes depender todo el tiempo con tus poderes.
- Odio admitirlo pero tienes razón - suspira resignada.
- ¿ Por cierto crees que Merlin se encuentra bien después de lo que pasó con Relais ? - pregunta observando el cielo.
- Ya han pasado semanas desde eso además no parecía herido de ninguna forma - responde el castaño.
- De todos modos ya sabes como es Merlin el nunca se enamora de ninguna chica - agrega.
- Si es verdad creo que me he preocupado de más - dice cerrando los ojos.
- Ahora que recuerdo Jack me ha dicho que tienes una amiga ¿ es eso verdad ? - pregunta mirándola.
- Yo diría que es más como una compañera de lectura es la encargada de la biblioteca de la Avenida del ganzo dorado.
- Bueno da igual lo importante es que ya tienes una compañera.
- No te la presentaré si eso es lo que buscas - dice aún con los ojos cerrados poniendo ambos brazos detrás de su cabeza imitando una almohada.
- ¿ Por qué crees eso ? - pone una mano sobre su pecho fingiendo indignación.
- Te conozco bien y se que eso es lo que tienes en mente - dice abriendo los ojos.
El castaño se cruza de brazos en señal de indignación - Claro que no deja de inculparme sin pruebas soy un caballero no tengo tales intenciones con esa chica.
- De acuerdo lo que tú digas - suelta una pequeña carcajada.
— ¡ Arturo, Lia ! - se escucha un grito a unos cuantos metros los antes mencionados se ponen de pie y a lo lejos ven a sus compañeros que vienen corriendo en dirrección hacia ellos.
- Debe ser una emergencia si no ellos no vendrían a buscarnos - dice el castaño levantando su espada.
Ambos corren al encuentro con los chicos al estar enfrente de sus compañeros preguntan sobre lo sucedido.
— ¿ Un dragón en la Avenida del Ganzo Dorado ?- pregunta para si misma la platinada y todos corren en dirección al lugar.
Al llegar a la entrada ven con horror como algunas casas y locales se están incendiando.
- Lia encárgate de extinguir las llamas - ordena el mago a lo cual la chica asiente corriendo en dirrección hacia los lugares que se incendian.
Lia.
Corro lo más rápido que puedo hacia las casas que se están quemando me toma más tiempo del que creí extinguir las llamas pero lo logré había olvidado que el fuego de dragón es muy difícil de apagar cuando terminó escucho los gritos de una mujer desesperada que pide ayuda.
Me dirijo lo más rápido al lugar antes de preguntar la mujer me reconoce y empieza a suplicarme.
- ¡ Por favor ayuda a mis hijos están atrapados ! - dice desesperada señalando un lugar en específico.
No lo pienso dos veces y me adentró al lugar el cuál está completamente en llamas grito varias veces pero no recibo respuesta empiezo a desesperarme busco por todos lados extinguiendo las llamas asta que logro escuchar una pequeña y débil voz.
- Ayuda por favor estamos aquí - dice una voz débil que parece ser de una pequeña niña la cuál proviene del segundo piso.
Me dirijo de inmediato al lugar de donde proviene la voz y encuentro a dos niños los cuales están atrapados debajo de una mesa empiezo a extinguir de inmediato las llamas que están a nuestro alrededor.
Levanto la mesa en donde está atrapado un pequeño niño de no más de cinco años y una niña entre doce o trece años está agachada cerca de el la niña levanta al pequeño en brazos y corremos hacia la salida empiezo a extinguir el fuego que no parece querer ceder.
Cuándo ya estamos por llegar a la salida se escucha que algo está empezando a quebrarse al levantar la mirada veo como el piso de arriba está empezando a caer empujó a los niños lo más rápido que puedo los cuales logran salir pero ya es tarde para mí.
Lo único que logró hacer es crear una pared de hielo esperando que eso puede amortiguar un poco el impacto.
No se que es lo que pasó ni en dónde estoy solo puedo sentir un inmenso dolor en la cabeza y veo todo borroso a mi alrededor, escucho que gritan mi nombre pero no logro reconocer quién es lo único que puedo ver son unas pequeñas sombras que se dirigen hacia mi empiezo a sentir pesados los párpados y todo se vuelve oscuridad.
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