Cap 1

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Era un día hermoso en la isla de los cuentos de hadas todas las personas ya se encontraban listas para iniciar con sus labores diarios.

A unos metros de distancia se encontraba una joven rubia observando un mapa con una mirada confundida- Creo que estoy pérdida - suspiro frustrada.

- Tengo que girar a la derecha, luego a la izquierda y nuevamente a la derecha y - suspira - Difinitivamente estoy perdida sera mejor que tome un descanso- digo sentandome bajo la sombra de uno de los árboles del bosque.

Aún así no me arrepiento de escapar de mi reino todos en ese lugar tenian el tonto pensamiento de que las mujeres solo sirven para los que haceres del hogar en mi caso solo servia para ser un hermoso adorno nisiquiera podía hablar si mi padre no me lo permitía el solo me miraba como un instrumento para lograr alianzas con otros reinos .

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Una joven platinada se encontraba observando desde su alcoba como los caballeros del reino entrenaban, ella siempre ha soñado poder vivir con libertad y ayudar a las personas más necesitadas .

Decidió salir a escondidas del palacio real y visitar el pueblo como solía hacer algunas veces siempre le llevaba comida o agua a las personas más pobres que no tenían un hogar .

Aún recordaba la primera vez que logró salir del palacio se encontraba jugando en el jardín cuándo encontró un túnel que conducía hacia el pueblo era la primera vez que salía del castillo.

Se quedó horrorizada al ver que el lugar estaba en la ruina habían personas que se peleaban por la poca comida y lucían muy delgados al igual que los niños y los bebés, sus ropas estaban muy sucias y rotas.

Sin duda era un ambiente muy distinto al que ella estaba acostumbrada a vivir en la villa dónde solo era habitada por personas nobles.

Desde ese día empezo a notar cosas en el castillo que no estaban bien cada vez que al rey no le gustaba alguna comida la tiraba al suelo sin siquiera tocarla y ordenaba que le prepararán más, cada vez que sobraba comida solo la desechaban aún si nadie la hubiera tocado.

Esos pequeños detalles sin duda estaban mal cuando afuera habían muchas personas que morían de hambre desde ese día empezó a escabullirse constantemente para llevarle comida y agua a todas esas personas que lo necesitaban.

Siguió haciendolo por algunos años asta que su padre descubrió que faltaban varias de sus joyas el muy furioso la llamo a su oficina.

- ¿ Por qué han desaparecido varias de tus joyas ? ¡ Habla ! - ordena furioso.

Tuve que tomar todo el valor que tenía para poder enfrentar a mi padre, desde pequeña siempre me decían que no tenía que contradecir a ningún hombre mucho menos levantarle la voz cosa que nunca me agradó.

- Con el debido respeto padre tuve que utilizar las joyas para obtener dinero y poder ayudar a las personas que viven en el pueblo que se encuentra detrás de la muro que usted mando a construir- dije con una mirada determinada y alzando la voz.

- ¡ Cómo te atreves a levantarle la voz a tú padre desvergonzada y desobedecer mis reglas sabes que está estrictamente prohibido cruzar el muro ! - grita furioso.

- No tuve elección padre ellos también son parte del reino y aún si no lo fueran no puedo solo sentarme y observar como sufren así como lo ha estado haciendo usted todos estos años- hablo algo enojada, antes de poder decir algo más sentí un dolor punzante en mi mejilla sucedio tan rápido que no me di cuenta de que mi padre me acababa de golpear.

- ¡ Eres una vergüenza para el reino como te atreves a levantarle la voz a tú padre y desobedecerme, Guardias llevensela a su habitación y encierrenla bajo llave ! - grito enojado- La princesa no saldrá asta que aprenda a obedecer - exclama dándome la espalda.

Me encontraba encerrada en mi habitación con dos guardias custodiando mi puerta la mejilla me dolía mucho pero aún así no era suficiente para lograr desanimarme ya he logrado muchas cosas solo me falta construir unas cuantas casas más para que todas las personas que viven en el pueblo puedan tener un hogar después de que todo esté echo podré escapar y tener una mejor vida.

Los siguientes días en los que estuve encerrada lograba escapar por la ventana que estaba en una de las torres más altas del castillo gracias a mis poderes pude congelar gran parte de la torre y bajar deslizándome seguí llevándole más cosas al pequeño pueblo que siempre he ayudado asta que todo ya estaba listo me despedí de ellos ya que al siguiente día me marcharia fue muy difícil y no pude evitar soltar algunas lágrimas me encariñe mucho con esas personas fueron los primeros que me demostraron cariño y jamás los volvería a ver.

A la mañana siguiente un guardia llegó a avisarme que el día de mi cumpleaños conocería a mi prometido mi padre seguro se pondrá furioso cuando se enteré que escapé del reino de todos modos no tengo nada que me detenga para quedarme en este horrible lugar si mamá estuviera viva tampoco me quedaría ella pensaba igual que papá que las mujeres solo sirven para obedecer.

Tomé la capa que utilizaba para escabullirme, algunas joyas, objetos de valor y me marché tuve suerte de esquivar a los guardias y lograr salir del reino sin que nadie se diera cuenta estoy muy feliz al fin podré ser libre vivir sin cadenas y  empezar una mejor vida en otro lugar .

Desde ese día estuve viajando durante tres meses de reino en reino asta que llegue a un pequeño pueblo donde estuve viviendo un mes las personas eran muy amables conmigo no me quejo fue la mejor decisión que pude tomar escapar de ese horrible lugar donde pase los dieciséis años de mi vida.

Un día mientras caminaba por el pueblo escuché a unas chicas hablar sobre un grupo de príncipes que luchaban contra dragones, bestias que causaban terror y rescataban a damiselas en apuros al parecer se hacían llamar los siete intrépidos.

Nadie sabía exactamente donde vivían pero la mayor parte del tiempo siempre aparecían en un pueblo que no estaba muy lejos de donde me encontraba así que decidí que me uniria a ellos y así poder ayudar a las personas como siempre he querido desde pequeña.

Y así fue como emprendí mi viaje para conocer a los siete intrépidos y tratar de unirme a ellos para poder cumplir mi sueño de ayudar a las personas con mis poderes siempre supe que era distinta que no encajaba con los demás nunca entendí por qué nací con poderes, sin poder sentir frío siempre creí que era un monstruo y nunca le conté a nadie por temor a lo que podía suceder conmigo.

Pero desde ahora ya no viviré con temor esos días ya se acabaron en su lugar ayudare a todo aquel que lo necesite.














Pero desde ahora ya no viviré con temor esos días ya se acabaron en su lugar ayudare a todo aquel que lo necesite

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  Diferentes e Iguales / Merlin ( Editando )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora