Capítulo 24: "Miradas"

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Me detuve al escuchar a alguien pero no logré ver a nadie.

¿Habré escuchado mal?¿Me lo habré imaginado?

-Athanasia ¿Qué haces ahi parada?

-¿Ah? Eh nada...

Dije volviendo a caminar al lado de Lucas, sorprendentemente el emperador y el príncipe heredero nos estaban esperando, y al parecer no estaban de muy buen humor.

-No entiendo porque se van ahora

-Disculpe su majestad pero mi esposa no se siente bien, su estado es delicado y creo que lo mejor es regresar

-¿Estado delicado?¿Qué?¿Esta enferma?

-Pues...

-Mi esposa esta embarazada y como dije no se siente bien por lo que regresaremos a Shiodonnia

Al escuchar sobre mi embarazo, tanto el príncipe como el emperador colocaron una expresión algo extraña.

No sabría decir que es lo que pasa aqui pero no me estoy sintiendo cómoda y eso Lucas lo notó,  me dijo que no me alejara de él y yo solo asentí, le pedí a Félix que también se acercará a Lucas, por si pasaba algo.

Algo no me estaba gustando...

-Eh...que sorpresa...felicidades princesa de Shiodonnia

-Gracias Su Majestad...

-Veo que el gran imperio de Shiodonnia esta algo desesperado por aumentar la cantidad de herederos de la familia real...

¿Qué?

¿Qué es lo que esta tratando de decir ese príncipe de pacotilla?

Iba a responderle, me sentia muy molesta, pero fue mi esposo quién le respondió de una manera algo particular.

-Bueno más bien el desesperado era yo, ya que deseo mucho a mi esposa y hay veces que no puedo controlarme jaja

-.......

Maldita sea Lucas.

Mi rostro estaba ardiendo, estoy segura que estaba muy roja, tanto que podria combinar con mi vestido rojo que estoy usando justo ahora.

Félix queria reirse pero trataba de resistir lo más que podia.

Lucas tomó mi mano y la de Félix, y con una sonrisa algo descarada nos teletransportamos de regreso a nuestro hogar.

-Yo...

Ah...

No habian pasado ni 5 segundos cuando llegamos al palacio de Shiodonnia cuando me dieron unas ganas tremendas de vomitar.

Traté

Juro que traté de llegar al baño pero terminé ensuciando toda mi ropa.

Ahora estaba llena de lo que alguna vez fue un delicioso desayuno.

Ah~ que asco...

Mamá fue a recibirnos, se veia bastante sorprendida por nuestra pronta llegada y bueno, tambien estaba preocupada al verme toda sucia.

-Hija ¿Te sientes bien?

-No...estas náuseas...asco...

-Lillian manda a preparar el baño para athanasia

-Si su majestad

Mamá me ayudo a sacarme cada prenda de ropa y me cubrió con una bata.

Ella amarró mi cabellos para que no se mojara y me volvió a preguntar como me sentia.

La justicia tarda pero llegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora