No me alcanzó con mirarte (Completa)

Parte 17

En este capítulo todo comienza...espero les guste.

Gracias por lo  votos y como siempre por leerme!

Romina estaba a punto de inaugurar su negocio de ropa. Tenía organizado un cocktail de inauguración en el local y sabía que después de eso su partida estaba cerca. Ya había terminado sus cosas en Buenos Aires, por lo tanto, con todo en marcha se iría a retomar sus obligaciones en Miami. En su ausencia necesitaría una mano derecha que atienda su negocio y mantenga la producción en marcha. Desde que se había dado cuenta de ese detalle, no menor, solo había podido pensar en una persona, Rodrigo. Él podría tomar ese trabajo si estuviese interesado y ella había descansado en esa idea, dándolo como algo seguro.

Dos días antes de la reunión de inauguración en el local, Rodrigo recibió la propuesta. Por supuesto que no la esperaba, aunque le encantó el ofrecimiento y con más miedos y dudas que seguridades, aceptó de inmediato. Estaba muy feliz por cómo le estaban saliendo las cosas, de la noche a la mañana su vida había tomado el rumbo correcto, un amor sincero y correspondido había golpeado su puerta y le había llegado, sin proponérselo, la oferta de un nuevo trabajo con mayor compromiso y responsabilidad.

El anuncio y la presentación del nuevo gerente, a pedido de la dueña, serían directamente en el cocktail de inauguración.

Después de tanto preparativo y arduo trabajo, el día había llegado. De a poco los invitados fueron llegando, saludándola y felicitándola.

Como regalo de despedida Romina les había diseñado a sus amigas, Sofía y Nicky entre ellas, un vestido para que luzcan esa misma noche.

Sofía estaba preciosa, elegante y sensual con su vestido color beige, ajustado al cuerpo y totalmente hecho en encaje, elegantemente corto para que luzca sus piernas, con escote redondo no muy pronunciado y mangas que apenas cubrían los hombros, la cintura marcada con un fino cinturón color suela, así como los zapatos con tacos altísimos.

Ya estaban las chicas haciendo los honores con su ropa que tan bien lucían, sus tíos y Santiago estaban también presentes, así como sus amigos. Rodrigo por supuesto, había llegado a primera hora, acompañado por Pablo y cada uno de los invitados, vecinos, modelos y diseñadores.

La reunión era todo un éxito.

Santiago no pudo quitar la mirada de las piernas de Sofía en toda la noche. Y si le regalaba la vista de su espalda podía reparar en la armonía de ese cuerpo que lo único que hacía era robarle suspiros con las curvas y contra curvas que tenía. Cada tanto y con un poco de valor se acercaba a ella para entablar alguna charla sin importancia.

Sofía sufría taquicardia en esos momentos porque el perfume de Santiago amenazaba acabar con su razón. Además, había podido confirmar que Santiago era el hombre más apuesto que pudo conocer alguna vez, cosa que la ponía un poco incómoda. No vestía sus elegantes trajes sino algo menos arreglado, sin corbata, con algunos botones desprendidos en su camisa, las mangas arremangadas y un pantalón sport. Demasiado informal y encantador como para evitar pesar que no había nadie más apuesto que él, con esos ojitos verdes que brillaban cada vez que sonreía. Tantas veces lo miró esa noche que en más de una oportunidad se encontró con su mirada sintiéndose descubierta.

Ya casi sobre el final, antes que se vayan los invitados Romina presentó a Rodrigo como el nuevo Gerente lo que originó un nuevo brindis y entre felicitaciones y felicitaciones de a poco la gente comenzó a irse.

Sofia abrazó a su amigo, feliz por él, se merecía una oportunidad así.

-Sos el mejor, vas a hacerlo muy bien. ¡Estoy tan orgullosa de vos! -Se fundieron en un abrazo de tres porque Nicky se acomodó entre ellos.