[AU]
Dawson Hale, primer hijo nacido de tres, toma una fuerte y difícil decisión luego de ocasionar lo que él cree es la muerte de sus padres.
Luego de una dura batalla por escapar de una clínica enfocada en crear una nueva especie de lobos, Dawson...
Los tres lobos corrían entre los demás niños en la escuela.
Alfa...alfa...alfa... se murmuraba en los pasillos. Dawson era bueno, eran buenos niños...
"No deben convertirse... No pueden hacerlo si están frente a extraños... Si no estamos nosotros con ustedes para protegerlos..."
Dawson no entendía por qué sus padres no les dejaban convertirse frente a otros, él quería hacerlo, él quería mostrar su pelaje blanco, él quería...
Sus padres no lo permitieron, él nunca desobedeció, siempre siendo buen niño, se negó a ir en contra de sus padres...
Pero uno no puede detener el tiempo, éste avanza y con él las pruebas llegan...Dawson no pudo detener el tiempo. Y ahora ellos ya no estaban.
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Actualidad
La llamada que recibió fue segundos antes de subir a la camioneta negra que lo esperaba fuera del campamento. Casi la ignoró, no muchos tenían ese número por lo que solo podía ser un grupo reducido de siete personas, y no estaba de ánimos para contestarle a ninguna.
Siempre era alguna mierda, y no quería lidiar con ello.
Sin embargo, el «querer» y el «deber » son cosas muy distintas. Así que contestó sin siquiera mirar el identificador.
—¿Qué?
Escuchó un suspiro al otro lado y rápidamente supo de quien se trataba.
—Esa es una manera muy poco educada de contestar una llamada —dijo el agente.
—Tengo muchas otras respuestas poco educadas —suelta enojándose, luego de un gruñido de desagrado —¿Es importante?
—¿Cuándo una llamada mía no lo es? — el agente Sidney dijo entre dientes —¿Por qué siempre debe ser tan difícil hablar contigo Hale?—
Dawson apretó la mandíbula al escucharle llamarlo por su apellido. Esperó, porque nada bueno saldría de una pelea.
—Ve al grano. No tengo tiempo—
Su mano apretó el aparato celular pero se contuvo de romperlo porque sería el tercero en los últimos dos meses.
—Tenemos un trabajo— dice Sidney. Dawson se relame los labios. De eso se trataba siempre ¿no? ¿Entonces, por qué no tenía un buen presentimiento al respecto?
Sidney tomó el silencio de Dawson como una confirmación.
—Un grupo de Siberianos tomó de rehenes a un grupo de Betas hace doce horas en la ciudad de Boulder— comienza a leer mientras el Alfa escucha atentamente
—¿Qué tiene eso que ver conmigo? No soy un maldito rescatista Sidney — lo llama por su nombre por primera vez —¿Es esto lo que hacemos ahora? Porque no estaba en mis planes ser un maldito héroe...—
