Sucesos escogidos que prueban una verdad
Creedme que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras. (Juan 14:11)
Juan escribió su libro acerca de Jesús con un propósito limitado que el declara muy especificadamente: "Pero éstas (cosas) se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que, creyendo, tengáis vida en su nombre" (20:31). Este libro, mas que una biografia, es una argumentación. Su autor ha escogido acontecimientos que demuestran que Jesús es diferente de cualquier otro hombre que haya vivido: él es el Hijo de Dios.
Este propósito se manifiesta, por ejemplo, en la forma en que Juan trata los milagros de Jesús. Si bien Mateo, Marcos y Lucas describen milagros, Juan va un paso más allá y los llama "señales". Una señal es algo que apunta en dirección de una realidad. En Juan, los actos sobrenaturales son una prueba más de la naturaleza única de Jesús. Jesús se negó a hacer milagros mágicos para deslumbrar a las multitudes, pero los uso como lecciones concretas para enseñar algo acerca de su persona.
Después de alimentar a 5.000 personas con una pequeña comida, Jesús se describe a si mismo como "pan de vida" (6:1-59). Y poco antes de devolverle la vista a un ciego, él se había autodenominado "la luz del mundo" (9:1-7). Nada sucede "por casualidad" en Juan; todo subraya el tema general del autor.
¿Solamente un gran hombre?
Dado que Jesús es tan claro al describir su propia naturaleza, una declaracion tal como "Estoy dispuesto a aceptar a Jesús como un gran maestro en el ámbito de la moralidad, pero no acepto su afirmacion de ser Dios", no se puede mantener. Tal como lo manifestara C. S. Lewis, "Eso es lo que no podemos decir. Un hombre que fuera simplemente un hombre y que dijera la clase de cosas que Jesús dijo no seria un gran maestro. O seria un loco a la par del hombre que dice ser un huevo pasado por agua- o sino seria el demonio mismo. Usted debe elegir: o este hombre era -y es- el Hijo de Dios, o era un loco o algo peor".
Según Juan, no todos creian que Jesús fuera divino: "¿Quién te haces a ti mismo?", reclamaron indignados algunos. Los que no creían en él lo hicieron matar por decir cosas semejantes acerca de sí mismo. Pero es casi imposible leer Juan sin quedar convencido de que Jesus mismo afirmo ser Dios.
Preguntas vitales: A pesar de lo que dice C. S. Lewis, mucha gente sigue pensando que Jesús fue "simplemente un gran hombre". ¿Cómo lo justifican?
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El Verbo Hecho Hombre (Nuevo Testamento)
Saggistica¿Por qué venimos al mundo? ¿Qué sentido tiene la vida? ¿Por qué hay tanto sufrimiento? ¿Por qué hay tanta injusticia? ¿Es Dios bueno apesar de todo lo que vemos en el mundo? Estas y otras preguntas serán respondidas, a la luz de las sagradas escritu...
