𝒰𝓃𝒹ℯ𝓇 𝒯𝒽ℯ ℛ𝒶𝒾𝓃 [ᴷⁱᵐ ᵀᵃᵉʰʸᵘⁿᵍ] ❥ completa

∴6∴

☔︎

Habían terminado de comer y estaban en la sala viendo una serie. Los truenos y relámpagos hacían que la casa temblara y Sook tenía miedo de salir, morir en el intento de llegar a su casa y ya no poder volver a entrar nunca más en lo que conoce como su hogar. Por esa razón el chico le sugirió que esperara hasta que se calmara la tormenta y que se quedara un poco más.

En "Cobra Kai" John Lawrence miraba a un padre y su hijo compartiendo comida y el protagonista tenía una cara triste en su rostro. Esta escena hizo pensar a Sook y unos segundos más tarde notó la ausencia de los padres del chico, así que le hizo sacar ese incómodo tema de conversación.

—Tus padres...—murmuró y Taehyung volteó a verla.—¿dónde están?—dijo un poco más alto.

—Ah...—comenzó.—Digamos que no están aquí por el momento, regresarán más en la noche.

La respuesta incomodó a Sook e hizo pensar en lo tonta que había sido... tal vez... Comenzó a pensar el la posibilidad de que Taehyung le hiciera algo malo.

¿Cómo se le había ocurrido ir a la casa de un chico cuando sus padres no están ahí ni sus propios padres estaban enterados? ¿Por qué no había pensado en eso desde antes?

—¿Qué hay de los tuyos?—preguntó de vuelta.

—Tampoco están aquí...—soltó cuidadosamente.

—¿A qué se dedican tus padres?—le bajó el volumen a la tele y se volteó hacia ella, para prestarle toda su atención.

Sook lo notó y decidió voltearse de igual forma hacia él. Se acomodó entre la gran sudadera y los amplios pants que traía puestos, y lo miró fijamente a los ojos.

Por primera vez le prestó más atención a ellos, los ojos del chico; oscuros, con una forma peculiar, adornando su hermoso rostro. Comenzó a sonrojarse al notar que se había distraído con el buen aspecto del chico, así que volteó a otra parte para explicarle más calmada.

—Mi padre es militar y mi madre azafata.—dijo tranquilamente.—Por eso no los veo muy seguido.—El chico formó una "o" con su boca.—¿Los tuyos?

—Mis padres dirigen una empresa, por eso se la pasan fuera la mayoría del tiempo, pero—se acomodó en el sillón, cruzando sus brazos mientras sostenía sus rodillas a su pecho, la misma posición de Sook.— los veo por las noches, aunque sea para desearles que descansen.—dijo con una sonrisa.

Sook volvió a analizarlo; por un momento pensó que él tal vez quería hacerle daño o humillarla, pero esa sonrisa inocente decía todo lo contrario. Esa sonrisa cuadrada, sincera y honesta; Sook decidió confiar en ella y deshacerse de la incomodidad que sintió hace unos minutos.

¿Por qué no solo considerarlo de una vez por todas cómo un amigo? ¿Por qué no simplemente confiar en él de ahora en adelante?

Sook vio a Taehyung distrayéndose con la película, pero lo llamó.

—Kim Taehyung.—dijo suavemente, mientras se levantaba del sillón.

Él de igual forma se levantó y la miró confundido. Ella se acercó, al igual que él. Estaban parados frente a frente y Taehyung miraba a su compañera como queriendo resolver un acertijo.

Finalmente Sook estiró su mano y sonrió un poco más. Taehyung estaba helado, sin expresión, tratando de armar el rompecabezas frente a él.

—Seamos mejores amigos.—dijo sin más.

Taehyung veía la mano de Sook. Esta parecía ser suave y delicada, parecía estar helada por el tipo de clima. Pero de todas formas, no lo pensó mucho. Alzó su mano y tomó la congelada mano de la chica.

—De acuerdo.—sonrió.—Seamos mejores amigos.

☔︎

—Han Sook.—gritaba el chico mientras golpeaba su mano contra la puerta de la casa de su amiga.—Llegaremos tarde.—continuó golpeando, hasta que la puerta se abrió.

—Si mi papá estuviera aquí, ya te habría corrido con un misil en sus manos por no dejarlo dormir en paz.—salió y cerró la puerta detrás de ella.—Tienes mucha suerte.

—Bueno, pero tú no tienes misiles y además no serías capaz de lastimarme, ¿no?—preguntó con una tierna sonrisita mientras caminaban.

—Ajá, como digas.—lo empujó y siguió caminando, con él detrás de ella.—¿Sí repasaste los temas para la clase de Seo?

—¡Sí!—dijo orgulloso.—Sentí que me explotó el cerebro por primera vez ayer a noche.

—¿Por primera vez? ¡Ha, noob!—se burló de él.

Entraron a la universidad, fueron al edificio correcto y entraron al salón del profesor Seo. Se sentaron juntos, como de costumbre cuando tenían las mismas clases. El profesor pasó lista y comenzó a hablar de un proyecto, en el que dos facultades iban a participar.

Todos los alumnos quedaron asombrados y varios muy emocionados por poder conocer a sus compañeros de generación. Sook no sabía si era algo bueno o malo; tener que ver o conocer a más personas llegaba a agotar por completo su energía y no consideraba ese proyecto tan bueno, también teniendo en cuenta la importancia de este y lo mucho que se tenía que esforzar.

De repente se abrieron las puertas del salón y entraron varios alumnos, uno tras otro, chicas y chicos. Todos estaban sorprendidos mientras formaban estos una línea recta frente al salón. Hicieron una reverencia y saludaron formalmente a todo aquel que estuviera pisando el salón de forma unísona, como si de robots se tratase.

Los ojos de Sook se abrieron como platos y pudo sentir su mandíbula bajando lentamente. ¿Hace cuanto no lo ve? ¿Serán... 4 años, más o menos? En fin, no había cambiado mucho. Seguía siendo atractivo, seguía llamando la atención y seguía teniendo esa maldita sonrisa. La respiración de Sook se detuvo por un momento al ver que este le había dirigido la mirada.

Taehyung tampoco podía creérselo, pues sabía de quien se trataba... y no le iba a permitir nuevamente lo que hizo hace 4 años.

☔︎

La lluvia daba golpecitos en las ventanas del salón, captando la atención de una cansada y desanimada Sook. Las gotitas resbalando lentamente por el vidrio parecían ser mil veces más entretenidas e interesantes que la desesperante voz de su maestra al presentar a un nuevo alumno.

Por alguna razón, la voz de él no era desesperante, en absoluto. De hecho, era interesante y muy atractiva, por lo muy grave y firme que era. También su cara era linda; labios carnosos, ojos cautivadores y un cabello algo desordenado. Él no sabía que ella había clavado sus ojos en él, solo porque Sook lo veía a través del reflejo en la ventana.

"Otro cara bonita..."

Esa fue la primera impresión que tuvo Sook de Yong Suneul, el segundo chico hermoso del salón. Ella estaba orgullosa de poder decir que el primero era su mejor amigo, pero sobre todo, amaba que Taehyung no fuera como esperaba, y que fuera en realidad todo un ángel.

Por esa razón ahora había aún más chicas tras él, pero eso no la preocupaba; lo contrario. Le gustaba que al fin tuviera un poco más de espacio personal para ella.

Pensando en Taehyung, Suneul y él no se parecían, casi nada; Taehyung era más alto, Suneul tenía sus labios más carnosos, el cabello castaño llegaba a tapar los ojos de su amigo y el negro de Suneul destacaba su piel pálida.

—Puedes sentarte allí, atrás de Sook.—aclaró la maestra, y Sook volteó a ver al chico directamente a la cara.—¿Han Sook, levantarías tu mano?—solicitó la tutora.

La chica obedeció y levantó la mano. El chico caminó hacia ella y se sentó en el pupitre de atrás. Como no había nada más interesante que hacer, Sook regresó a ver las gotitas, bailando felizmente entre el viento. De tanta atención que les había puesto, había perdido la noción del tiempo y a penas se percató del final de la clase.