El Secreto de Vanya (Fiveya)

Capitulo 8.2 Uniendolos y la Verdad

Unas Horas Antes

Como de costumbre, cuando sus hijos entrenaban y ensayaban respectivamente. Sir Reginald Hargreeves permanecía en su oficina escribiendo en su libreta. Nadie sabia que escribía ahí, pero nunca la dejaba sola. Incluso antes de dormir, todas las noches la ponía en su caja fuerte.

Mientras escribía, comenzó a sonar el teléfono que estaba junto a el. Pero al responder se llevo una gran sorpresa, era una voz conocida.

¿Rey? -pregunto Reginald al teléfono incredulo- ¿Eres tu?

¿Quien más quisieras que fuera? -dijo el hombre al otro lado del telefono-

¿Cual es el motivo de tu llamada? -pregunto el señor Hargreeves acomodándose en su silla-

Max y yo tenemos una semana de vacaciones finalmente... pensábamos ir a dar una vuelta... han pasado años desde la última vez que nos vimos -dijo el hombre-

Eso seria esplendido -dijo algo nervioso Reginald- ¿Para cuando están planeando venir?

Esta noche -dijo el hombre- Claro si no es una molestia

Por supuesto que no lo es -respondio inmediatamente-

Entonces llegaremos a la hora de la cena... estamos emocionados por ver cuanto a crecido nuestra Vanya -dijo el hombre en un tono más alegre-

Recuerda las reglas... -dijo el hombre un tanto nervioso y preocupado-

Lo se... lo se... no mencionar que soy su tío, no demostrar más atención y cariño a ella sobre los demas, no hablar de Evangeline y no... -

Interrumpir en las actividades diarias de los niños -dijo otra voz al telefono-

¿Max? -pregunto Reginald-

El mismo -dijo quitandole el teléfono a su hermano-

Que gusto me da oír tu voz -respondio el señor Hargreeves-

Lo mismo digo cuñado -

Por cierto... llámenlos por el número que tienen asignado -dijo Reginald-

Enserio queríamos pasar tiempo con Vanya... -dijo Max triste-

Podría dejarlos a solas con ella mañana mientras sus hermanos entrenan... claro si les parece bien -

¡Nos parece perfecto! -gritaron ambos hombre al unisono-

Mientras sigan las reglas estára bien -respondio-

Lo entendemos -dijo uno de los hermanos-

¿7:45? -pregunto el otro-

Exactamente -respondio el señor Reginald-

Nos vemos esta noche -

Nos vemos esta noche -dijo colgando-

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Mientras tanto, los dos hermanos estaban en una suite de un hotel en la ciudad donde estaba la Academia. Habían hecho lo imposible para que su gira terminara ahí y así poder visitar a su cuñado y sobrina antes de tener que empezar la siguiente.

Enserio no entiendo sus tontas reglas -dijo uno de los hermanos buscando un traje en el armario-

Creo que simplemente quiere hacer algo bueno por los niños, Max -respondio el otro-

¿Pero porque no podemos tratar a nuestra sobrina como nuestra sobrina? -pregunto algo molesto-

Sabes que nuestros padres fueron injustos con el... lo culparon de que Evy muriera -dijo el otro acomodando un estuche-