Capitulo 26. Ataque a la Academia

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¡Cinco no vayas! -trato de gritarle Vanya antes de que el desapareciera envuelto en una luz azul-

La castaña tenia miedo, la Academia era el lugar más seguro que conocía y ese estruendo no logro más que asustarla. Pero decidió que tenia que hacerle caso a lo que le había dicho Cinco, tan rápida y silenciosamente como pudo bajo las escaleras para irse a encerrar a su habitacion, esperando que el estuviera seguro. Una parte de ella quería despertar a sus hermanos, pero la otra sabia que no lo lograría sin ponerse en riesgo.

Mientras tanto, Cinco se había teletransportado a las escaleras que daban directo a la recepción, tenia que saber que fue lo que provoco el ruido. No pudo creer lo que estaba viendo, en la recepción habían siete hombres, cada uno con armas y sus caras cubiertas con pasamontañas negros de tela.

Los hombres que irrumpieron la Academia solo se veian entre si como si repasaran un plan pero sin decir una sola palabra, afortunadamente para Cinco ninguno de ellos lo había visto parado en las escaleras, observandolos. De pronto uno de los hombres hablo, preocupando más a Cinco.

¡Maten a todos! -grito el hombre- No permitan que nadie sobreviva

Cinco sabia perfectamente que sus hermanos ya debían estar dormidos y la única manera de despertarlos era activando la alarma, aunque eso significara tener que aparecer junto a la puerta por donde los hombres habían entrado y alertarlos de que todos ya sabían que estaban dentro de la Academia.

Los siete hombres comenzaron a caminar lentamente hacia las escaleras y las puertas, tenían que revisar todo rápidamente para poder acabar con su trabajo lo más pronto posible sin ser interrumpidos por los heroes tratando de defenderse. Cinco no lo dudo y mientras los hombres estaban distraídos tratando de abrir la puerta que llevaba al comedor, se teletransporto junto a la entrada principal y activo la alarma que su padre había diseñado especialmente por si alguna vez llegaban a invadir la Academia.

¿¡Quien activo la alarma!? -pregunto molesto uno de los hombres volteando a ver hacia la puerta- ¡Encontré al primero!

Los siete hombres voltearon a ver hacia donde estaba Cinco, el estaba asustado pero solo podía pensar en que no podia dejar que le hicieran daño a Vanya. Los siete hombres le apuntaron con sus armas, con la intención de dispararle y acabar con el de una buena vez por todas. Todos los intrusos eran antiguos criminales que los seis héroes habían logrado vencer, así que solo buscaban su preciada venganza.

Últimas palabras niño -dijo uno de ellos mientras se le acercaba lentamente sin dejar de apuntarle con su arma-

¡Que no soy un niño! -dijo Cinco para desaparecer de la vista de todos-

¡Encuentrenlo! -ordeno el hombre más alto de todos desesperado-

No me busques más -dijo Cinco apareciendo detrás de el hombre para luego desarmarlo y volver a desparecer de la vista de todos-

¡Los verdaderos hombre usan cuchillos en lugar de armas! -grito Diego saltando de las escaleras mientras le lanzaba varios de sus cuchillos a uno de los hombres para clavarlo contra la pared más cercana-

Mientras Cinco se encargaba de desarmar al primer hombre, todos se habían levantado asustados y presionados por la alarma. A pesar de que esta era la primera vez que la escuchaban en sus vidas (no para ser explicada), sabían perfectamente lo que tenían que hacer.

Todos tomaron sus mascaras, se las pusieron y corrieron hacia la recepción de la Academia, tenían que proteger su hogar, no les importaba portar sus pijamas en lugar de sus trajes de combate. El primero en salir corriendo para defender la Academia, fue Diego quien inmediatamente fue seguido por los demas.

El Secreto de Vanya (Fiveya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora