Los años pasaron y los niños se volvieron adolescentes. Cada vez tenían más misiones así que cada vez conocían mejor el mundo, así que los nervios de sir Reginald crecían y crecían, pensaba que pronto todos buscaran irse.
Asi que en un plan desesperado por que nadie se fuera usaba los poderes de Vanya para convencerlos de quedarse. Y normalmente funcionaba, pero el efecto duraba poco ya que nuevamente tenían que salir.
Como tenian muchas misiones, Reginald decidió que los seis se concentrarán más en los entrenamientos que en sus estudios. Así que durante algunos meses Vanya se quedaba sola, por lo que decidió dejarla ir a un internado de música para que mejorara; lo bueno es que sus poderes funcionan a distancia.
A pesar de que ella pudiera llevar una vida "normal", preferia mil veces más estar en la Academia, con su padre, sus hermanos y Cinco. No le importaba que los demas tuvieran prohibido hablarle, porque Cinco siempre rompía las reglas de su padre para hablar con ella; logrando que Vanya se enamorara de el, aunque no lo admitiera.
Duro cerca de tres años asistiendo a ese internado y solo volviendo a la Academia en vacaciones o fechas especiales. Pero convencio a su padre que a partir de su cumpleaños numero 18 pudiera volver a tomar clases en la Academia, aunque sus hermanos no estuvieran junto a ella.
Lo único que quería era estar con su familia, volver a vigilar las cámaras con su padre, volver a hablar con su madre mientras hacían galletas, volver a tomar clases con Pogo, volver a pasar tiempo con sus hermanos cuando su padre no estaba, pero especialmente quería volver a tener esos pequeños momentos con Cinco.
Respira Vanya... solo estas regresando con tu familia -dijo ella mientras soltaba un suspiro al pararse en las escaleras frente a la puerta principal de la Academia con sus maletas- Solo toca... no te va a pasar nada -dijo ella tratando de calmar sus nervios- Es ahora o nunca -dijo tocando la puerta-
Pocos segundos pasaron antes de que una cara conocida apareciera mientras se abria la puerta.
Vanya... -
Mamá... -dijo ella con los ojos cristalizados mientras la abarazaba- Te he extrañado mucho
Mi niña -dijo ella correspondiendole el abrazo- Me da mucho gusto verte
A mi también -dijo la castaña alejándose lentamente-
Entra -dijo su madre ayudandole con una maleta- Instálate y ven a decorar galletas conmigo -dijo con una gran sonrisa mientras cerraba la puerta-
Claro... -dijo Vanya con una pequeña sonrisa mientras tomaba sus maletas y se dirigia a las escaleras-
Con cada paso que daba los recuerdos la envolvían, no importaba que cada que regresara fuera lo mismo porque siempre que volvía se sentía llena, se sentía viva. Y finalmente llego a su habitacion, bajo sus maletas y abrió lentamente su puerta.
¿Vanya? -pregunto la persona que estaba dentro de la habitacion-
¿Klaus? -pregunto ella confundida mientras se le acercaba y dejaba sus maletas a un lado del escritorio- ¿Que haces en mi habitación?
Yo... -dijo nervioso, *¡No puedo decirle que hago aquí!* penso asustado-
¿Tu? -dijo ella con una pequeña risa- No te preocupes... solo quiero desempacar antes de ir con mamá... toma lo que necesites y sal
¿Desempacar? -pregunto el-
Si... -asintio ella sonriendo mientras ponia su maleta encima de la cama- ¿No tienen entrenamiento?
Papá estará fuera de la ciudad hasta el Viernes... -dijo el tomando algo y poniendolo en su bolsillo- ¿Cuanto te vas a quedar?
No pienso irme por el momento -dijo ella empezando a acomodar su ropa-
ESTÁS LEYENDO
El Secreto de Vanya (Fiveya)
Fiksi Penggemar¿Nunca se preguntaron porque el señor Reginald adopto a los niños? ¿Porque siempre excluía a Vanya? ¿Que paso para que fuera tan frío? ¿Que hubiera pasado si Cinco nunca hubiera viajado al futuro? ¿O si Ben nunca hubiera muerto? ¿Como descubririan t...
