CAPITULO 2 LAUREN JAUREGUI

296 25 4
                                    

Una vez que les he compartido solo algunos detalles de mi y de esa vieja historia que la abuela me contaba, ahora les hablare un poco más de quién soy y que es lo que me hace diferente al resto de la gente...

Cómo ya dije antes mi nombre es Lauren Jauregui tengo 25 años, soy de descendencia cubana- americana y vivo en Miami Florida, estoy estudiando mi último grado en la carrera de Biología Molecular y aunque tal vez suene a qué soy una chica Nerd o cerebrito, no me considero así aunque todos opinan lo contrario.

Siempre he logrado las mejores notas en mis grados escolares, sin embargo también me gusta mucho divertirme con mis amigos, me encanta bailar, salir de paseo, bebo poco, me encanta leer y cantar, ir al cine, viajar y conocer gente.
En general soy una persona alegre y mis amigos acuden a mi siempre porque dicen que les doy buenos consejos y los hago reír con mis tonterías.

Físicamente no puedo quejarme, la mayoría de la gente dice que soy muy bonita, algunos incluso dicen que mejor debería ser modelo de revistas pero lo cierto es que yo me considero una chica normal pero si reconozco que tengo lo mío.
Mido 1.63 cm, piel blanca y cabello castaño oscuro, mi complexión es media con curvas marcadas, me han dicho que mi trasero es de otro mundo y que mis ojos son muy atrayentes y bonitos, y no voy a negar eso pues tal vez tienen razón porque además de lo expresivos que son, mis ojos tienen un color verde esmeralda que no muchos pueden apreciar pero lo que ellos no saben es que mis ojos no solo tienen un color bonito, lo que yo más amo de ellos es que puedo apreciar todos los colores que existen a mi alrededor...

Si... Eso es lo que me hace diferente al resto de la gente y algo que no puedo estar compartiendo con nadie pues eso sería muy peligrosos para mí vida ya que al tener esta capacidad de poder distinguir los colores, sería sometida a investigación para conocer las causas y ellos definitivamente no se detendrían hasta conseguir algún resultado.

Yo no estoy segura si esa vieja leyenda que me contaba la abuela tenga algo que ver en esta nueva evolución que tuvimos los humanos cambiando nuestra manera de ver pero cuando era pequeña me gustaba pensar que esa era la razón, aunque con el paso del tiempo y lo que he aprendido en la universidad se que más bien es algo científico que aunque no se sabe bien aún el porque, se que existe alguna razón o tal vez alguna modificación genética por la cuál hemos desarrollado y perdido algunos sentidos y apreciar colores es una de ellas.

Se han hecho muchos estudios para saber la respuesta y han tratado de encontrar una razón científica del porque sucedió eso, incluso los mejores especialistas en el ramo han trabajado en la creación de lentes especiales para que sea posible apreciar los colores de forma artificial pero por desgracia esos accesorios son tan caros que no están al alcance de cualquier persona, como siempre y gracias a las diferencias sociales son pocos los afortunados que pueden pagar esas exuberantes cantidades de dinero para poder usarlos y deleitarse con imágenes en todo su resplandor, pero para la gente normal como mi familia y yo esto significa un lujo y jamás podríamos pagar algo así...

Yo por mi parte se que tengo la fortuna de tener esa capacidad en mis ojos de forma natural, sin embargo como he dicho antes, es algo que sólo saben las personas más cercanas a mi a las cuales les cuento sobre la experiencia tan hermosa que es ver los colores, pero ellos nunca podrían entenderla por completo y sin duda me gustaría encontrar la manera de que mis padres, mi hermano y mis amigos sean capaces de ver las bellezas naturales que nos rodean de la misma forma que yo puedo verlas.

Cuando nací, fui una bebé completamente normal y sana, mientras fui creciendo mis padres dicen que yo era muy lista y despierta para mis cortos meses de vida, lo cual llamo mucho su atención.
Ellos dijeron que era una niña tan inteligente para mí edad que desde que tenía un año comenzaron a enseñarme cosas como distinguir las formas y yo rápidamente las aprendía, tal vez eso no tenía nada de extraño pero fue hasta que yo tenía 4 años cuando mamá me estaba enseñando a leer los colores de los cubos a través de unas pequeñas marcas correspondientes al viejo sistema Braille ya que esa era una de las maneras de saber de qué color eran las cosas y fue en esa época que se dieron cuenta de que yo no era como los otros niños...

EL COLOR EN SUS OJOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora