Besame (Como un pez) - Jesse y Joy
Omnisciente Pov
—Tranquila, Lern. Ya pasó.—Mojó el algodón en alcohol.
—Tenía miedo de que te hiciera algo, Camz. Me ha hecho tantas cosas que no quería comprobar que te hiciera daño.
—Lo sé, pero conmigo sólo se atrevió a gritarme.—La menor suspiró—Te va a arder un poquito.—Apoyó el algodón mojado en alcohol en la herida en su sien y la ojiverde hizo una mueca.
—¿Tú qué crees que harán ahora?
—Nada, como siempre, pero tú tienes que estar tranquila, yo te voy a cuidar—Sus rostros estaban demasiado cerca. Tanto que Camila realmente quería besarla. Tomó otro algodón y lo mojó nuevamente en alcohol, lo apoyó en su labio inferior y la castaña hizo una mueca de desagrado nuevamente. Lauren también quería besarla, sólo que ella no lo sabía. Estiró su mano y acomodó un mechón rebelde detrás de la oreja de la morena—Ahora te vas a sentir mejor, Lolo.
Acarició su mejilla no golpeada para que no le doliera. El profundo verde de sus ojos la estaba matando. Sin pensarlo la menor rompió la distancia y juntó sus labios con los suyos. Fue un simple toque, del cual luego se separaron, pero la había descolocado. Se quedaron unos segundos mirándose. Camila dejó la botella de alcohol y los algodones sobere su mesita de luz. La ojiverde estaba por hablar, pero la morena acortó nuevamente la distancia. La tomó de la cintura y la besó con mucho más cariño y pasión que antes.
Al principio, Lauren se sentía algo insegura. La mayor movía sus labios demasiado rápido en comparación a ella. Sentía que no podía seguirle el paso, pero cuando Camila comenzó a desistir, colocó sus manos en sus mejillas y tomó el control. Movía sus labios sobre los suyos como jamas lo había hecho con nadie. Su toque era dulce, pero para nada suave del todo. Su sabor era una sensación distinta a cualquier otra, la morena no quería mover sus manos de su cintura, no quería obligar a su amiga a nada. Sus manos bajaron por sus hombros hasta sus brazos, pero sin pasar ningún límite, y luego volvió a sus mejillas. Cuando el aire hizo falta se separaron, mientras que la morena dejaba algunos picos delicados en sus labios. Un silencio incomodo se instaló entre ambas luego.
—Yo... perdón, Camz.—Dijo algo avergonzada.
—Está bien, yo también te correspondí, así que no te sientas culpable.
—No sé por qué lo hice.
—Yo sí sé por qué te correspondí...—La ojiverde tenía miedo de cruzar esa linea. Si de algo estaba segura, era de que ya no sentía sólo un afecto amistoso por ella, algo más, pero no sabía qué.
—¿Te gusto?—La morena la miró por primera vez después de aquel beso.
—Jamas me había enamorado tan fuerte de alguien.
—Camz...
—Lern, no hace falta que me correspondas.
—Es que yo... no lo sé.—Un silencio volvió a instalarse entre ellas—Tengo que ir a ver a Ally.
—Suerte con ello, Lolo.—La castaña sonrió.
—Gracias. Por favor no le digas a nadie que te besé. A mí no me gustan las mujeres—Eso se sintió como un puñal en el pecho. Camila era fiel y leal, no estaba en sus principios contar secretos que no eran suyos, ella no iba a fallarle a su amiga. Aunque ese secreto la carcomiera. Aunque quisiera besarla otra vez. Aunque quisiera gritarselo al mundo. Aunque quisiera que Lauren la aceptara. Cleo se subió a la cama y Camila la abrazó contra su pecho.
—Tu mamá me rompió el corazón.—Acarició su cabecita—Ella es un ángel, y yo una simple mortal, era obvio que iba a rechazarme.—La perra la miró triste para luego lamer su mano.
Lauren realmente tenía que irse a encontrarse con su amiga de la secundaria, Camila lo sabía, pero al final lo había usado de excusa para salir corriendo. Parte era verdad, a ella no le gustaban las mujeres, ni siquiera la morena. Estaba segura de que ella no estaba enamorada de su amiga, pero era otro tipo de enamoramiento el que tenía por ella. Era más fuerte, más leal, más sincero que el que había tenido por su casi ex esposo. Casi porque sólo faltaba que ambos firmaran el contrato que lo haría oficial.
—Hola, Laur—Ally la abrazó por los hombros como pudo, debido a su baja altura.
—Hola, solecito.
—¿Cómo estás? ¿Por qué tienes esa cara de susto?
—No, por nada. Estoy bien, ¿Tú?
—Bien, cuéntame algo de tu vida.
—Pero tú me citaste aquí porque tenías algo que decirme.
—Tú primero, no te contaré hasta que hables, ¿Cómo están las cosas con Darren?—Ella bajó la mirada y el moso trajo su café con leche. Ally siempre llegaba más temprano que ella, y siempre pedía en su lugar, siempre sabía que era lo que su vieja amiga quería.
—Que me perdone dios, pero me estoy divorciando.
—¿Puedo preguntar por qué?
—Él... no me trataba bien, solecito. Me pegaba, y yo me dejé pegar.—La cara de su amiga se desfiguró.
—¿Por qué nunca me dijiste nada? Podría haberte ayudado, Laur—Tomó sus manos por sobre la mesa—¿Ahora estás bien? ¿Hace cuánto pasó esto?
—Pasaba desde hacía cinco años, y dejó de suceder hace dos, casi tres meses. Yo nunca dije nada, porque creía que era normal en las parejas, además me tenía algo amenazada.
—¿Sigues viviendo con él?
—No, vivo con Camila en su departamento. Es una amiga, nos conocimos en una fiesta del trabajo de Darren, son compañeros.
—Que ángel, es una ayuda muy grande.
—Lo sé, ella me ayudó a denunciarlo. Me defendió cada vez que lo necesité. Esa mujer es una luz en la oscuridad—Sonrió.
—Antes tenías una cara un poco triste, ¿Era por ella?—Asintió.
—No sé qué pasó por mi cabeza, Ally. La besé, hará una hora de eso.
—¿Y qué es lo que te tiene mal si tú la besaste?
—Yo... Camila se confesó, me dijo que yo le gustaba, y la rechacé. La hice pedazos, All. Debiste ver su rostro. Lo peor es que no sé por qué lo hice.
—Tal vez tu corazón quiera estar con ella, ojitos. A veces el subconsiente nos lleva a hacer cosas que no sabemos en nuestra cabeza el por qué, pero nuestro corazón sí sabe la razón.
—¿Crees que me perdonará el haberla destrozado?
—Si es el ángel del cuál me hablas, te perdonará incluso si la mataras.
—Eso sí que no lo haría. Entonces ella va a perdonarme. Dime que era lo que ibas a decirme.
—Pues... vas a ser tía, y si tú quieres. Madrina también—Los ojos de Lauren brillaron cómo nunca, un sobrino o sobrina estaba en camino, y era por parte de Ally.
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Secretos que no deben guardarse [CAMREN]
FanficLauren vivía una pesadilla con Darren, sólo que ella no lo sabía. Afortunadamente, conoce a Camila, quién le da el verdadero golpe que necesita: un golpe de realidad. •Historia finalizada •Esta historia es pura ficción y no pretende molestar a nadie...