SINCE I MET YOU

CAPÍTULO 2

Tyler me cogió de la muñeca y me sobresaltó, luego, sin mediar palabra me arrastró hasta un sofá lleno de gente, saludó a todos los que habían allí y se sentó, me hizo un hueco a su lado y me senté entre él y Quinn que me miraba con mala cara desde que había entrado al coche. Seguía sorprendida y aturdida por cómo me estaba tratando mi hermanastro, no me disgustaba pero tampoco sabía qué hacer al respecto.

Unos instantes después un chico al que había saludado mi hermanastro se acercó y le dijo a Quinn que se apartara.

- ¿Quieres algo de beber? Soy Bryce, por cierto. - quería socializar y no estaba mal hablar con alguien dentro del montón.

- Ehh.... Si gracias ¿Que hay en el vaso? Soy Emma - me reía y no sabía porque.

- Es margarita, tequila y algo de lima. Encantado.

- Venga va,... vamos a jugar a un juego. - intervino de repente Quinn. - Yo empiezo. Yo nunca.... nunca lo he hecho en un sitio público.

Cuando pronunció esas palabras, todos empezaron a beber a excepción de mi, por un momento mi mente pensó en decir que si, solo por no quedarme sola. Pero no iba a mentir, aquí no podía, no después de lo de la última vez.

- Yo nunca, nunca... - prosiguió Quinn con el juego.

Parecía que no se iban a cansar nunca de jugar, ellos iban por el cuarto vaso mientras yo estaba por el primero, muchas veces se me quedaron todos mirando porque de las cosas que ellos habían hecho mil veces yo no, y supongo que para ellos era raro.

A lo largo de la noche todo se movía más al igual que estaba más borroso pero sobretodo más divertido. Conocí una chica llamada Emily, al principio estaba igual de perdida, no por el alcohol, si no porque no conocía a nadie, al igual que yo pero ahora que nos hemos conocido un poco mas me cae bien, es muy maja y esta un poco loca, creo que tiene la misma edad que yo y es la hermana o amiga de alguien de el fiesta, con todo el ruido no oía muy bien ya que la música está demasiado alta hasta para escuchar mis propios pensamientos.

Hace un rato largo nos hemos puesto a jugar al "Beer Pong"; un juego que consiste básicamente en tirar pelotas de ping pong dentro de vasos llenos de alcohol, si aciertas bebe el equipo contrario y si no bebe tu equipo. Los dos chicos con los que estábamos jugando iban super pedo, así que siempre les tocaba beber más.

Pasadas las cuatro ya tenía suficiente fiesta por hoy, pero por lo que veía Tayler no, así que le indique que me iba con la mano, pero creo que no se percató ni de mi presencia.

Mi móvil marcaba un 10% de batería, así que tenía que ir deprisa en buscar un método para volver a ¿casa?, si ya podría llamarlo así. No encontré nadie que me pudiera llevar y finalmente el móvil se quedó sin batería. Cuando estaba dispuesta a volver a andando, mientras salía por la puerta, oí que alguien me llamaba y corría en dirección mía, me giré y vi que se trataba de Tyler.

- ¡Joder, para! - gritó mientras corría acercándose a mí.

- ¿Que? ¿Que pasa?

- Que no te puedes marchar sin más y menos con la borrachera que llevas. No puedes irte sin decir nada y sin conocer la ciudad.

- Pero si he recorrido toda la casa para buscarte y cuando por fin te encuentro ¡me ignoras! ¡Además no voy borracha! - dije mientras giraba sobre mis talones y seguía mi camino.

- Vale admito que te he ignorado. Pero, ¡vuelve a entrar en la puta casa!

- ¡¿Pero porque te comportas así conmigo?!

- Cómo te pase algo esta noche, a parte de que a mi se me va a caer el pelo, tú no vas a volver a querer salir. Las calles están llenas de gente borracha a estas horas y no te sabes el camino para llegar a casa. - me lo dijo de una manera muy clara.

- Está bien. Entraré, pero con una condición. Que nos vayamos dentro de 5 minutos, y no acepto negociación - entonces se me quedó mirando con rabia.

Sabía que él no se quería marcharse pero yo no podía más. Estaba cansada del viaje y necesitaba dormir. Minutos después estaba dispuesta a arrastrar a mi hermanastro hasta casa pero él se me adelantó, a sus espaldas se encontraban Josh y Emily, que por lo visto eran hermanos y nos iban a llevar de vuelta a casa. Puede que Emily me lo hubiera comentado pero no escuchaba nada, tampoco me interese mucho, estaba concentrada jugando al Beer Pong.

- Vamos Emma. - dijo Tyler sin mirarme y pasando por mi lado. Cuando se dio cuenta que no tenía intención de moverme, agregó una explicación - Josh nos va a llevar de vuelta a casa.

Emily se acercó y me cogió del brazo para levantarme. No dije nada y seguí el camino hasta su 4x4 blanco y reluciente. que estaba en la entrada de la casa. En el viaje de vuelta, solo se oía la horrible música de Josh. A mi lado estaba Emily, dormida como un bebe, acurrucada. Delante de mí estaba Josh que conducía y Tyler que de vez en cuando me miraba de reojo. Quince minutos después estábamos delante de la puerta de mi nueva casa.

- Venga Emma. - dijo haciéndome una señal con la mano para salir del coche.

Salimos y segundos después Josh se fue por donde había venido. En el momento en que nos quedamos solos y Tyler va a meter la llave se dio cuenta de que no entraba , lo que tenía en sus manos era una llave para abrir el piso de la universidad.

- ¡Mierda! - pego un grito - ¡Joder, mierda! - repitió llevándose las manos a la cabeza

- ¿Qué pasa? Relajate y no chilles que la gente duerme. - le dije pero al instante me di cuenta de lo que pasaba. No teníamos llaves para entrar a casa.

Empezó a maldecir en voz alta y a decir maneras de cómo podíamos entrar, estaba claro que iba un poco colocado por la manera que hablaba y se inventaba cosas imposibles. Me puse a reír por la forma en que se creía que éramos capaces de hacer esas cosas y él también se unió. Me dolía la barriga de tanto reirme y finalmente optamos por esperarnos en la entrada hasta que mi madre o Christian salieran y nos vieran. Pensamos en entrar por el jardín pero estaba la alarma puesta y si nos colabamos saltaría.